Esquel: Alan “Quaker” Gáspari pagó una fianza y quedó libre

Estuvo detenido desde el pasado 23 de abril por ser considerado el presunto cabecilla de un grupo dedicado al procesamiento y comercialización de marihuana, con una pizzería como "pantalla".

29 ABR 2014 - 23:00 | Actualizado

El lunes por la noche el juez federal de Esquel, Guido Otranto, determinó la libertad de Alan “Quaker” Gáspari, quien estuvo detenido desde el pasado 23 de abril por ser considerado el presunto cabecilla de un grupo dedicado al procesamiento y comercialización de marihuana. Quedó libre tras pagar una fianza de 15.000 pesos. El nombrado había sido trasladado el viernes pasado a última hora a la Unidad Penitenciaria 14, y su abogado defensor tramitó la excarcelación.

Gáspari fue aprehendido en el marco de operativos simultáneos en Esquel y Trevelin realizados por la Policía Provincial el miércoles 23 de abril, mientras se desplazaba por barrio Buenos Aires en un automóvil Clío junto a otro joven supuesto consumidor.

El juez Otranto había ordenado varios allanamientos que incluyeron casas particulares y la pizzería de “Quaker”, donde se secuestraron ladrillos de marihuana y también droga fraccionada, lista para la venta al mostrador y con la modalidad delivery.

La investigación de la Brigada de la División Drogas se prolongó por cuatro meses, hasta reunir elementos suficientes como para proceder, y es así que incautaron estupefacientes y plantas de marihuana desarrolladas a gran altura, algunas superando los 2 metros. En Trevelin encontraron la especie cannabis sativa en un invernáculo, y se determinó la detención de la hermana de Alan Gáspari, aunque quedó en su domicilio al no haber un lugar propio para alojar a mujeres.

Por el estrado del Juzgado Federal de 25 de Mayo y San Martín, pasaron “Quaker” y testigos, y siguen las actuaciones por estos días, y fue el mismo juez Guido Otranto el que le dictó la prisión al jefe de la organización, hasta derivarlo a la U-14, sitio donde permaneció hasta el lunes por la noche cuando salió libre bajo fianza, abonando la suma de 15.000 pesos.

El magistrado aceptó la medida bajo juramento, y por entender que no existe peligro de fuga ni de entorpecimiento de la investigación, sin perjuicio de la prosecución de la causa y su imputación hasta el juicio oral.

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29 ABR 2014 - 23:00

El lunes por la noche el juez federal de Esquel, Guido Otranto, determinó la libertad de Alan “Quaker” Gáspari, quien estuvo detenido desde el pasado 23 de abril por ser considerado el presunto cabecilla de un grupo dedicado al procesamiento y comercialización de marihuana. Quedó libre tras pagar una fianza de 15.000 pesos. El nombrado había sido trasladado el viernes pasado a última hora a la Unidad Penitenciaria 14, y su abogado defensor tramitó la excarcelación.

Gáspari fue aprehendido en el marco de operativos simultáneos en Esquel y Trevelin realizados por la Policía Provincial el miércoles 23 de abril, mientras se desplazaba por barrio Buenos Aires en un automóvil Clío junto a otro joven supuesto consumidor.

El juez Otranto había ordenado varios allanamientos que incluyeron casas particulares y la pizzería de “Quaker”, donde se secuestraron ladrillos de marihuana y también droga fraccionada, lista para la venta al mostrador y con la modalidad delivery.

La investigación de la Brigada de la División Drogas se prolongó por cuatro meses, hasta reunir elementos suficientes como para proceder, y es así que incautaron estupefacientes y plantas de marihuana desarrolladas a gran altura, algunas superando los 2 metros. En Trevelin encontraron la especie cannabis sativa en un invernáculo, y se determinó la detención de la hermana de Alan Gáspari, aunque quedó en su domicilio al no haber un lugar propio para alojar a mujeres.

Por el estrado del Juzgado Federal de 25 de Mayo y San Martín, pasaron “Quaker” y testigos, y siguen las actuaciones por estos días, y fue el mismo juez Guido Otranto el que le dictó la prisión al jefe de la organización, hasta derivarlo a la U-14, sitio donde permaneció hasta el lunes por la noche cuando salió libre bajo fianza, abonando la suma de 15.000 pesos.

El magistrado aceptó la medida bajo juramento, y por entender que no existe peligro de fuga ni de entorpecimiento de la investigación, sin perjuicio de la prosecución de la causa y su imputación hasta el juicio oral.


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