Un campeón del mundo en el rincón y toda la fe. Desde la habitación de su hotel en el barrio de Palermo, Soledad Edith Matthysse vive con ansiedad las horas previas de “su” pelea. Este sábado volverá a plantarse en un ring, con la pionera del boxeo femenino y la dueña de la licencia número uno, la formoseña Marcela Acuña a quien intentará arrebatarle el título supergallo de la Organización Mundial de Boxeo mañana en el estadio de la Sociedad Alemana de Gimnasia en Villa Ballester.
La misión suena nada fácil pero no imposible, y mucho menos en la cabeza de una guerrera que dice haber hecho “la mejor preparación de su carrera” y confía en tirar abajo los pronósticos.
Esperando la oportunidad
“Estaba esperando esta posibilidad desde hace tiempo. Hace siete meses que no peleo, nunca dejé de entrenar y reconozco que valió la pena esperar porque me llamaron hace un mes y medio para esta revancha”. El Acuña-Matthysse II ya tiene un antecedente: fue el 10 de mayo del año pasado en el Auditorio “Presidente Néstor Kirchner” del Mercado Central donde “La Tigresa” ganó en fallo unánime con tres tarjetas coincidentes en 91-99. Matthysse dice haber pulido aspectos técnicos pero que no le cambian su estilo, basado siempre en el ataque. “Me faltaba experiencia y ahora tengo más movilidad de cintura y piernas. Voy a caminar y a moverme mucho más”.
En relación a su rival, la afamada “Tigresa”, la pupila y esposa de Mario Narvaez entiende que es la “rival a vencer” por cualquier peleadora del país. “Pelearemos por el título de ella, el supergallo –explicó- que es mi categoría natural salvo las últimas dos que las tuve que hacer porque fueron por títulos aunque nunca tuve problemas en dar cualquier peso”.
“Huracán” en el rincón
La presencia del “Huracán” Narváez en el rincón no es un detalle menor; el campeón del mundo supermosca OMB es referente del equipo y una palabra autorizada para delinear una estrategia y si fuera necesario, respaldar con influencia ante un posible fallo cerrado. El team de Trelew (incluído “Peto” Ruíz) entiende que no hay ni un pequeño margen para ceder y que todo influye ante lo que se supone será una pelea pareja, sin dueña. “Que esté Omar en mi rincón es un orgullo para mí. Tener a un campeón con su experiencia es algo muy bueno, me servirá mucho su presencia y la valoro muchísimo”.
Matthysse se reconoce a punto inclusive con el “plus” motivacional que significa poder alimentarse con normalidad un día antes del pesaje oficial. Y la tranquilidad expuesta de que el gimnasio es sólo para mantener, sin presiones, ni sacrificios extras que suelen alterar el humor. “Me siento –agregó Soledad- mucho mejor y siento que estoy en mi mejor etapa, lo quiero aprovechar a full. En estas peleas una se juega el futuro y el de mis hijas. Más que nunca hay que darle para adelante. Me dijeron que después de esta pelea, vendría la primera defensa de mi título y si Dios quiere, terminaremos el año muy bien”.
La peleadora de las Mil Viviendas agradeció a Lotería del Chubut, DKS Tatuajes. (“Me hice uno nuevo y me pienso hacer muchos más…”); Municipalidad de Trelew; la diputada Alejandra Johnson Táccari y Mariano Soto. Como siempre dejó un saludo especial para sus tres hijas que seguirán el combate por televisión junto al resto de la familia (Lucas en Junín, incluído) y el equipo del gimnasio Omar Narváez con quien dice pasar gran parte del día. “La pelea se la voy a dedicar a todo el sur, a los que me quieren y a los que no. Quizás no soy chubutense pero vivo en la provincia desde que tengo un año, me siento trelewense y siempre represento a Chubut con muchísimo orgullo”.
Un campeón del mundo en el rincón y toda la fe. Desde la habitación de su hotel en el barrio de Palermo, Soledad Edith Matthysse vive con ansiedad las horas previas de “su” pelea. Este sábado volverá a plantarse en un ring, con la pionera del boxeo femenino y la dueña de la licencia número uno, la formoseña Marcela Acuña a quien intentará arrebatarle el título supergallo de la Organización Mundial de Boxeo mañana en el estadio de la Sociedad Alemana de Gimnasia en Villa Ballester.
La misión suena nada fácil pero no imposible, y mucho menos en la cabeza de una guerrera que dice haber hecho “la mejor preparación de su carrera” y confía en tirar abajo los pronósticos.
Esperando la oportunidad
“Estaba esperando esta posibilidad desde hace tiempo. Hace siete meses que no peleo, nunca dejé de entrenar y reconozco que valió la pena esperar porque me llamaron hace un mes y medio para esta revancha”. El Acuña-Matthysse II ya tiene un antecedente: fue el 10 de mayo del año pasado en el Auditorio “Presidente Néstor Kirchner” del Mercado Central donde “La Tigresa” ganó en fallo unánime con tres tarjetas coincidentes en 91-99. Matthysse dice haber pulido aspectos técnicos pero que no le cambian su estilo, basado siempre en el ataque. “Me faltaba experiencia y ahora tengo más movilidad de cintura y piernas. Voy a caminar y a moverme mucho más”.
En relación a su rival, la afamada “Tigresa”, la pupila y esposa de Mario Narvaez entiende que es la “rival a vencer” por cualquier peleadora del país. “Pelearemos por el título de ella, el supergallo –explicó- que es mi categoría natural salvo las últimas dos que las tuve que hacer porque fueron por títulos aunque nunca tuve problemas en dar cualquier peso”.
“Huracán” en el rincón
La presencia del “Huracán” Narváez en el rincón no es un detalle menor; el campeón del mundo supermosca OMB es referente del equipo y una palabra autorizada para delinear una estrategia y si fuera necesario, respaldar con influencia ante un posible fallo cerrado. El team de Trelew (incluído “Peto” Ruíz) entiende que no hay ni un pequeño margen para ceder y que todo influye ante lo que se supone será una pelea pareja, sin dueña. “Que esté Omar en mi rincón es un orgullo para mí. Tener a un campeón con su experiencia es algo muy bueno, me servirá mucho su presencia y la valoro muchísimo”.
Matthysse se reconoce a punto inclusive con el “plus” motivacional que significa poder alimentarse con normalidad un día antes del pesaje oficial. Y la tranquilidad expuesta de que el gimnasio es sólo para mantener, sin presiones, ni sacrificios extras que suelen alterar el humor. “Me siento –agregó Soledad- mucho mejor y siento que estoy en mi mejor etapa, lo quiero aprovechar a full. En estas peleas una se juega el futuro y el de mis hijas. Más que nunca hay que darle para adelante. Me dijeron que después de esta pelea, vendría la primera defensa de mi título y si Dios quiere, terminaremos el año muy bien”.
La peleadora de las Mil Viviendas agradeció a Lotería del Chubut, DKS Tatuajes. (“Me hice uno nuevo y me pienso hacer muchos más…”); Municipalidad de Trelew; la diputada Alejandra Johnson Táccari y Mariano Soto. Como siempre dejó un saludo especial para sus tres hijas que seguirán el combate por televisión junto al resto de la familia (Lucas en Junín, incluído) y el equipo del gimnasio Omar Narváez con quien dice pasar gran parte del día. “La pelea se la voy a dedicar a todo el sur, a los que me quieren y a los que no. Quizás no soy chubutense pero vivo en la provincia desde que tengo un año, me siento trelewense y siempre represento a Chubut con muchísimo orgullo”.