Viejo Hostal: quejas por la falta de luz, gas y cloacas
Familias comparten espacio con brigadistas en Esquel.
Los Brigadistas del Servicio Provincial del Manejo del Fuego protestaron por las condiciones del viejo Hostal La Hoya, donde opera el personal. A la falta de gas y las cloacas saturadas, se suma el corte de energía por serios inconvenientes en la instalación eléctrica. Este corte también afectó a las familias ubicadas hace tres años tras el derrumbe de rocas en el barrio Lennard Englud, que debieron abandonar sus casas por los derrumbes y que esperan ser reubicadas en dúplex sin fecha de entrega.
El municipio informó que el lugar pertenece al Banco del Chubut y que en febrero se notificó de su demolición para construir la nueva sede bancaria, pero esto se demora para no dejar a las familias en la calle.
Rubén Álvarez, secretario gremial de la Asociación de Trabajadores del Estado Esquel, manifestó que lo único que “quedaba a los compañeros era luz y ahora no tienen”. Hace dos meses se había cortado el gas natural y no se restableció o por irregularidades en la instalación. Sostuvo que tiempo atrás indicaron que el agua no era potable. “Cuando pedíamos antes de los incendios sentarnos a hablar eran por todos estos temas”, dijo.
Manifestó que los brigadistas hacen las guardias por teléfono en sus propias casas y se los llama ante una emergencia. “Los compañeros no pueden seguir trabajando en esta situación”, indicó al señalar que las cloacas rebalsan como hace tres meses. “Vinieron a recorrer la central de incendios algunos políticos y no podían creer que aquí vivan familias y los trabajadores con una cloaca a cielo abierto”, dijo Álvarez.
Explicó que este predio es del Banco del Chubut y que construirá una sede. Pero se cedió al municipio para alojar a las familias que tuvieron serios inconvenientes en el Lennard Englud en sus viviendas y que esperan por una reubicación en los dúplex. “Nadie se hace cargo de la situación y es indigno trabajar en estas condiciones”.
Por su parte, Franco Almonacid, brigadista, explicó que es muy difícil trabajar cómodamente con las familias alojadas en el mismo predio, por la presencia de niños e indicó que no se avanzó con un nuevo edificio. “Sólo nos dijeron que busquemos una nueva oficina hasta que se solucione el tema”, dijo el brigadista y criticó actitudes políticas que felicitaron la labor del personal durante los incendios. “Después se olvidan de nosotros”, dijo. María, madre de una familia hospedada en el ex-Hostal, comentó que no tienen gas desde enero y el domingo se les cortó la energía eléctrica. “Tenemos agua adentro de las habitaciones y no se puede vivir así con nenes chiquitos; nadie nos da solución y cuando lo planteamos a los funcionarios nos dicen cosas para conformarnos y después seguimos en la misma”. Para cocinar encienden una fogata afuera. “Están esperando que pase algo peor para que reaccionen”, dijo María. Por FM Tiempo Esquel el delegado zonal del Instituto Provincial de la Vivienda, Raúl Piva, indicó que los vecinos son prioridad en un listado elaborado en conjunto con la Municipalidad con familias en riesgo respecto de su ubicación en el citado sector de la ciudad. Las preadjudicaciones se deciden en Rawson, aseguró el funcionario, agregando que se les otorgarán casas de un plan de 32 unidades próximo a ser entregado, ya que las obras finalizaron. Ese plan incluye 6 casos de situaciones límite; discapacitados e inscriptos en lista de espera. El resto de las familias que tengan su casa al pie del cerro tendrán la posibilidad de ser adjudicatarios en el grupo de 60 viviendas a ejecutar cerca del Centro de Encuentro en barrio Badén.#
Los Brigadistas del Servicio Provincial del Manejo del Fuego protestaron por las condiciones del viejo Hostal La Hoya, donde opera el personal. A la falta de gas y las cloacas saturadas, se suma el corte de energía por serios inconvenientes en la instalación eléctrica. Este corte también afectó a las familias ubicadas hace tres años tras el derrumbe de rocas en el barrio Lennard Englud, que debieron abandonar sus casas por los derrumbes y que esperan ser reubicadas en dúplex sin fecha de entrega.
El municipio informó que el lugar pertenece al Banco del Chubut y que en febrero se notificó de su demolición para construir la nueva sede bancaria, pero esto se demora para no dejar a las familias en la calle.
Rubén Álvarez, secretario gremial de la Asociación de Trabajadores del Estado Esquel, manifestó que lo único que “quedaba a los compañeros era luz y ahora no tienen”. Hace dos meses se había cortado el gas natural y no se restableció o por irregularidades en la instalación. Sostuvo que tiempo atrás indicaron que el agua no era potable. “Cuando pedíamos antes de los incendios sentarnos a hablar eran por todos estos temas”, dijo.
Manifestó que los brigadistas hacen las guardias por teléfono en sus propias casas y se los llama ante una emergencia. “Los compañeros no pueden seguir trabajando en esta situación”, indicó al señalar que las cloacas rebalsan como hace tres meses. “Vinieron a recorrer la central de incendios algunos políticos y no podían creer que aquí vivan familias y los trabajadores con una cloaca a cielo abierto”, dijo Álvarez.
Explicó que este predio es del Banco del Chubut y que construirá una sede. Pero se cedió al municipio para alojar a las familias que tuvieron serios inconvenientes en el Lennard Englud en sus viviendas y que esperan por una reubicación en los dúplex. “Nadie se hace cargo de la situación y es indigno trabajar en estas condiciones”.
Por su parte, Franco Almonacid, brigadista, explicó que es muy difícil trabajar cómodamente con las familias alojadas en el mismo predio, por la presencia de niños e indicó que no se avanzó con un nuevo edificio. “Sólo nos dijeron que busquemos una nueva oficina hasta que se solucione el tema”, dijo el brigadista y criticó actitudes políticas que felicitaron la labor del personal durante los incendios. “Después se olvidan de nosotros”, dijo. María, madre de una familia hospedada en el ex-Hostal, comentó que no tienen gas desde enero y el domingo se les cortó la energía eléctrica. “Tenemos agua adentro de las habitaciones y no se puede vivir así con nenes chiquitos; nadie nos da solución y cuando lo planteamos a los funcionarios nos dicen cosas para conformarnos y después seguimos en la misma”. Para cocinar encienden una fogata afuera. “Están esperando que pase algo peor para que reaccionen”, dijo María. Por FM Tiempo Esquel el delegado zonal del Instituto Provincial de la Vivienda, Raúl Piva, indicó que los vecinos son prioridad en un listado elaborado en conjunto con la Municipalidad con familias en riesgo respecto de su ubicación en el citado sector de la ciudad. Las preadjudicaciones se deciden en Rawson, aseguró el funcionario, agregando que se les otorgarán casas de un plan de 32 unidades próximo a ser entregado, ya que las obras finalizaron. Ese plan incluye 6 casos de situaciones límite; discapacitados e inscriptos en lista de espera. El resto de las familias que tengan su casa al pie del cerro tendrán la posibilidad de ser adjudicatarios en el grupo de 60 viviendas a ejecutar cerca del Centro de Encuentro en barrio Badén.#