Trelew: hoy, el veredicto por el doble crimen de los hermanos Aballay

A poco de culminar el juicio, la querella insistió en la culpabilidad de Blanco. El defensor hizo un alegato contundente y duros planteos a favor de su cliente. El fiscal, por su parte, está convencido de que la sentencia -que será la próxima semana- le dará la razón. Declaró Blanco antes del veredicto.

Con dolor y expectativas. Los padres aguardan el final del juicio.
19 MAY 2015 - 22:18 | Actualizado

Hoy a las 12.30 el tribunal constituido por los jueces Adrián Barrios, Fabio Monti y Marcelo Di Biase darán a conocer el veredicto en el juicio que se ventila en el sexto piso de Tribunales de Trelew: la muerte de los hermanos Aballay cuyo imputado es Horacio Blanco. Ayer, finalizó el debate con los alegatos. La audiencia duró 4 horas. La Fiscalía y la Querella ratificaron la autoría de Blanco en el asesinato. La Defensa aseguró que el imputado es inocente y pidió la libertad.

La jornada en el día de ayer, empezó a las 9.50 para culminar a las 14. Hizo uso de la palabra en primer lugar, el fiscal que interviene en la causa, Omar Rodríguez. “Dije en la apertura de este juicio, que se iba a poder demostrar que Blanco es el autor de la muerte de Matías y Sergio Aballay. No tengo dudas que la promesa fue cumplida”, indicó.

Luego de hacer un raconto cronológico de la fatídica noche, el fiscal reiteró no tener duda alguna que Horacio Blanco es el autor de la muerte de los hermanos Aballay. Consignó que la principal prueba es la testigo presencial (Débora Alcucero, esposa de Sergio) que dio cuenta con detalles las circunstancias en las que ocurrieron los hechos. “En cuanto a esa credibilidad no hay ningún motivo para dudar. Ni siquiera se percibió ninguna animosidad contra el imputado. Es más, pudiendo y hay que resaltarlo, haber evitado este juicio oral porque ya había declarado, eligió venir y someterse en presencia de los jueces. Qué mejor garantía para el imputado que la información salga de la boca del testigo de frente a los jueces”, remarcó.

Remarcó el fiscal que la testigo fue persistente desde el inicio. “Siempre dijo lo mismo, nunca se contradijo. Reconoció , dijo y confirmó que Blanco fue el autor. Esa circunstancia hace a la coherencia y credibilidad del testimonio de Débora Alcucero. Además de esta coherencia, consigna dónde estaba, cómo tiró, de quién era el arma y de dónde lo conocía. Su testimonio se abona con otros elementos de prueba, coincide con todas las conclusiones de la pericia del licenciado Costa”, agregó.

Rodríguez aseguró además que el perito citado a declarar confirmó los dichos de la testigo: que existió un tirador, dónde estaba, el tipo de bala, etéctera y que es compatible al que usó Blanco, pero también –remarcó- “la presencia de Juan Johnson (quien iba con Blanco en el auto) en el primer y segundo lugar es un elemento que cobra valor. Además de reconocer a Horacio Blanco como autor, lo pone a Johnson que es el cuñado. Este, no concurrió. Tenía tres posibilidades: venir y contar la verdad e incriminar a su cuñado, arriesgarse a falso testimonio o permanecer oculto: permaneció oculto”, aseveró.

Resaltó el fiscal que los dichos de Débora fueron confirmados por las hermanas Erica y Fernanda Medina. “Ellas confirmaron que lo conocían a Blanco. El primer indicio es el vehículo que fue luego acreditado por el mismo amigo de Blanco, Elías Hughes y la documentación”. Se refirió además a la declaración de la periodista de LU20 Radio Chubut Ángela Álvarez quien entrevistó a Blanco luego de la audiencia de control detención en donde el imputado admitió la culpabilidad. “La manifestación a la periodista tiene relevancia. Lo hizo en ámbito de libertad, voluntariedad. Le manifestó a la periodista que no era un ambiente coercitivo. No hay ninguna duda que la única intención del imputado era terminar con la vida de Sergio y Matías Aballay”, manifestó.

“Entiendo que todas las pruebas ventiladas no hacen más que confirmar la autoría de Blanco en el hecho. No hay ninguna prueba a favor de él”, agregó Rodríguez indicando que “el examen mental que le hizo el doctor Heredia y habiéndose probado la materialidad como autoría en cabeza de Blanco, la pretensión es que se lo declare autor materialmente responsable en el homicidio agravado por el uso de arma de fuego cometido en la persona de Matías Aballay en concurso real con el homicidio cometido en abuso de armas en la persona de Sergio Aballay. Que se lo declare responsable por el hecho cometido de abuso de arma en perjuicio de Debora Alcucero y su pequeña hija”, remarcó.

Apuntó para finalizar: “Entiendo que todas las pruebas ventiladas no hacen más que confirmar la autoría de Blanco en el hecho. No hay ninguna prueba a favor”.

“Soy inocente”

Tal como estaba previsto, declaró Blanco. Invitado por el juez Barrios a dirigirse al tribunal, manifestó que es “inocente”, que no mató a los hermanos Aballay. Disparó que se auto incriminó en una entrevista radial ante dos periodistas, porque estaba amenazado por policías. Contó que si no lo hacía corrían riesgo sus hijas. Dijo que “el día del hecho estaba en mi casa. Hughes (Leonardo, uno de los testigos en el juicio) fue a mi casa esa mañana a pedirme prestado el auto porque tenía que ir con su familia al velorio de un amigo. Allí le dije que había pedido permiso en el trabajo para ir a visitar a mi abuela enferma que vive sola cerca de Sierra Grande. Siempre iba con mi familia a verla. Además yo nunca en mi vida vi a Alcucero (Débora, otra de las testigos clave). En el año 1996 tuve un error con la justicia y lo pagué. De ahí en más no hice otra cosa que trabajar y trabajar para alimentar a mis hijos. Soy totalmente inocente y no tengo nada que ver con lo que se me acusa”.

Inmediatamente se dirigió al Tribunal Miguel Aballay y luego de su intervención, Blanco pidió nuevamente hablar. Agregó que “policías de civil me detuvieron en Sierra Grande, entraron de golpe a la casa de mi abuela y me recagaron a palos. Todo el tiempo me decían que me tenía que hacer cargo. ´Si no te hacés cargo le va a pasar algo a tus hijas´, me decían. Entonces más vale que cuando la periodista me hizo la nota me hice cargo, porque tenía miedo por mi familia. Por eso tuve que mentirle a la periodista”, indicó en alusión al reportaje que le realizó Ángela Álvarez de LU 20 Radio Chubut tras la audiencia de control de detenidos, en el que admite su culpabilidad y que “la policía no tiene nada que ver”, tal como indicó en esa oportunidad.#

“Tenemos confirmada la materialidad del hecho”

“Tenemos confirmada la materialidad del hecho. Conocemos la escena, tenemos exactitud que Matías y Sergio fueron asesinados por una serie de disparos realizada con un arma de fuego. Y que fue víctima de la agresión Débora Alcucero. Es un único agresor. Y Débora lo conocía”, expresó el abogado querellante Martín Castro, representante de Norma y Miguel Aballay.

Luego de coincidir con la Fiscalía en el relato del hecho, desplegando incluso en la sala un mapa en el que se consigna el lugar del hecho ubicando el barrio y las viviendas en donde se realizaron allanamientos, Castro apuntó: “el agresor, sube a su vehículo y huye. Hasta el 14 de marzo que se lo encontró en una provincia cercana. Se encuentra corroborada su autoría por los siguientes elementos: la declaración de la testigo, por la declaración de los padres que se constituyeron en el lugar, vieron cómo estaban sus hijos tendidos y al advertir que Matías presentaba un signo vital lo llevaron al nosocomio”, relató.

Castro resaltó la importancia de la declaración como testigos, de los policías que intervinieron en el hecho. “Se advirtieron elementos secuestrados; ojota, vaina, visera y recolección de manchas hemáticas. Es importante la declaración de los oficiales que tomaron contacto con el Comando para determinar las llamadas al 101”, indicó. No fue un dato menor para Castro, haberse determinado la posición del tirador y la cantidad de disparos. “Hubo coherencia del relato de Débora Alcucero. El agresor se coloca del lado del conductor y dispara. El perito determina las distancias y coinciden. Fueron dos disparos contra el cuerpo de Matías, lo que demuestra la intención del imputado para terminar con su vida. También, el proyectil que cayó en la puerta trasera. Los dichos del perito Costa, que iban dirigidos a Débora y su hija. La intención de lesionar a las dos personas”, agregó.

“No investigaron a Policía”

El abogado defensor de Horacio Blanco, Carlos Conti, negó la participación en el hecho de su defendido y criticó a la investigación por no haber seguido la hipótesis de “un crimen por encargo” de la muerte de los hermanos Matías y Sergio Aballay, basándose en dichos de los padres. “Los señores Miguel Aballay y su esposa refirieron tiernamente la memoria de sus hijos. Con respeto. Dijeron que los únicos enemigos de sus hijos era un sector de la policía enfrentado en el conocido caso Aballay. La investigación policial jamás ahondó una posible pista referida a lo que los señores siempre coherentemente dijeron que podría ser un crimen por encargo. Lo infirió el defensor oficial, el mismo Aballay. Fueron muy claros al decir que los únicos enemigos era la policía y que derrotaron en la Justicia”.

Sostuvo en la etapa de alegatos en el día de ayer que “en mi rol de abogado defensor del señor Horacio Blanco, voy a contestar a todos los cargos inferidos por la parte acusadora: el fiscal y querella. Voy a postular lo que en su oportunidad esbocé que es la falta de autoría de mi defendido el señor Blanco”, remarcó.

Apuntó que “la fiscalía acusa a Blanco y esboza su teoría de cómo, cuándo y por qué. La divergencia nunca puso en duda la materialidad del grave y luctuoso hecho: quién produjo la muerte”, sostuvo.

Reiteró el defensor que “esta parte afirma y reafirma la inocencia de Blanco por todos los elementos que coayuvan en demostrar su no culpabilidad”, dijo, citando el testimonio de un oficial que llegó al lugar del hecho. “Refirió que al llegar al lugar había mucha gente, que recibió golpes de puño, cólera de la gente y dijo que se tuvo que replegar. Seguían los ataques a la policía. Elabora un acta que firma otro policía. Llama la atención que 30 personas o más como refiere el oficial Carranza estuvieran dedicadas a golpear y disparar como confirmaron otros oficiales a la policía. ¿Cuál era el interés de los concurrentes para enfrentar a la policía cuando iban a auxiliar a los heridos o ya fallecidos?” se cuestionó.

Refirió además el testimonio de Dante García, otro policía. “Dijo que no lo dejaron intervenir, a la segunda y tercera vez tiraban con armas de fuego, nos agredían, era batalla campal. La muerte se produjo en ese espacio. Nunca quedó claro el lugar de los hechos. Nunca quedó claro que de todos los testigos aportados, uno solo fue presencial: la víctima Débora Alcucero. Como víctima no la contradigo pero es parte interesada del relato”, agregó. Apuntó que “el oficial habla de 30 personas que se enfrentan dos o tres veces a la policía y arrojan piedras. Irigoyen Esteban dijo que eran disparos también. ¿Qué pasó esa noche en la calle Saavedra? No lo sabemos aún. No se pudo preservar el lugar sino hasta las 3.50 de la mañana. Ocurrió a la 01.32 hora del 9 de marzo”, remarcó. “La reconstrucción es a partir del único relato de Débora Alcucero. La investigación no pudo aportar ninguna persona que nos pudiese arrojar luz sobre esa balacera. ¿Qué hacían todos peleándose con la policía a las 2 de la mañana? No lo sabemos. Sí que para esa hora, yacía sin vida el señor Sergio Aballay y disparaban sobre la humanidad de Matías”, manifestó.

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Con dolor y expectativas. Los padres aguardan el final del juicio.
19 MAY 2015 - 22:18

Hoy a las 12.30 el tribunal constituido por los jueces Adrián Barrios, Fabio Monti y Marcelo Di Biase darán a conocer el veredicto en el juicio que se ventila en el sexto piso de Tribunales de Trelew: la muerte de los hermanos Aballay cuyo imputado es Horacio Blanco. Ayer, finalizó el debate con los alegatos. La audiencia duró 4 horas. La Fiscalía y la Querella ratificaron la autoría de Blanco en el asesinato. La Defensa aseguró que el imputado es inocente y pidió la libertad.

La jornada en el día de ayer, empezó a las 9.50 para culminar a las 14. Hizo uso de la palabra en primer lugar, el fiscal que interviene en la causa, Omar Rodríguez. “Dije en la apertura de este juicio, que se iba a poder demostrar que Blanco es el autor de la muerte de Matías y Sergio Aballay. No tengo dudas que la promesa fue cumplida”, indicó.

Luego de hacer un raconto cronológico de la fatídica noche, el fiscal reiteró no tener duda alguna que Horacio Blanco es el autor de la muerte de los hermanos Aballay. Consignó que la principal prueba es la testigo presencial (Débora Alcucero, esposa de Sergio) que dio cuenta con detalles las circunstancias en las que ocurrieron los hechos. “En cuanto a esa credibilidad no hay ningún motivo para dudar. Ni siquiera se percibió ninguna animosidad contra el imputado. Es más, pudiendo y hay que resaltarlo, haber evitado este juicio oral porque ya había declarado, eligió venir y someterse en presencia de los jueces. Qué mejor garantía para el imputado que la información salga de la boca del testigo de frente a los jueces”, remarcó.

Remarcó el fiscal que la testigo fue persistente desde el inicio. “Siempre dijo lo mismo, nunca se contradijo. Reconoció , dijo y confirmó que Blanco fue el autor. Esa circunstancia hace a la coherencia y credibilidad del testimonio de Débora Alcucero. Además de esta coherencia, consigna dónde estaba, cómo tiró, de quién era el arma y de dónde lo conocía. Su testimonio se abona con otros elementos de prueba, coincide con todas las conclusiones de la pericia del licenciado Costa”, agregó.

Rodríguez aseguró además que el perito citado a declarar confirmó los dichos de la testigo: que existió un tirador, dónde estaba, el tipo de bala, etéctera y que es compatible al que usó Blanco, pero también –remarcó- “la presencia de Juan Johnson (quien iba con Blanco en el auto) en el primer y segundo lugar es un elemento que cobra valor. Además de reconocer a Horacio Blanco como autor, lo pone a Johnson que es el cuñado. Este, no concurrió. Tenía tres posibilidades: venir y contar la verdad e incriminar a su cuñado, arriesgarse a falso testimonio o permanecer oculto: permaneció oculto”, aseveró.

Resaltó el fiscal que los dichos de Débora fueron confirmados por las hermanas Erica y Fernanda Medina. “Ellas confirmaron que lo conocían a Blanco. El primer indicio es el vehículo que fue luego acreditado por el mismo amigo de Blanco, Elías Hughes y la documentación”. Se refirió además a la declaración de la periodista de LU20 Radio Chubut Ángela Álvarez quien entrevistó a Blanco luego de la audiencia de control detención en donde el imputado admitió la culpabilidad. “La manifestación a la periodista tiene relevancia. Lo hizo en ámbito de libertad, voluntariedad. Le manifestó a la periodista que no era un ambiente coercitivo. No hay ninguna duda que la única intención del imputado era terminar con la vida de Sergio y Matías Aballay”, manifestó.

“Entiendo que todas las pruebas ventiladas no hacen más que confirmar la autoría de Blanco en el hecho. No hay ninguna prueba a favor de él”, agregó Rodríguez indicando que “el examen mental que le hizo el doctor Heredia y habiéndose probado la materialidad como autoría en cabeza de Blanco, la pretensión es que se lo declare autor materialmente responsable en el homicidio agravado por el uso de arma de fuego cometido en la persona de Matías Aballay en concurso real con el homicidio cometido en abuso de armas en la persona de Sergio Aballay. Que se lo declare responsable por el hecho cometido de abuso de arma en perjuicio de Debora Alcucero y su pequeña hija”, remarcó.

Apuntó para finalizar: “Entiendo que todas las pruebas ventiladas no hacen más que confirmar la autoría de Blanco en el hecho. No hay ninguna prueba a favor”.

“Soy inocente”

Tal como estaba previsto, declaró Blanco. Invitado por el juez Barrios a dirigirse al tribunal, manifestó que es “inocente”, que no mató a los hermanos Aballay. Disparó que se auto incriminó en una entrevista radial ante dos periodistas, porque estaba amenazado por policías. Contó que si no lo hacía corrían riesgo sus hijas. Dijo que “el día del hecho estaba en mi casa. Hughes (Leonardo, uno de los testigos en el juicio) fue a mi casa esa mañana a pedirme prestado el auto porque tenía que ir con su familia al velorio de un amigo. Allí le dije que había pedido permiso en el trabajo para ir a visitar a mi abuela enferma que vive sola cerca de Sierra Grande. Siempre iba con mi familia a verla. Además yo nunca en mi vida vi a Alcucero (Débora, otra de las testigos clave). En el año 1996 tuve un error con la justicia y lo pagué. De ahí en más no hice otra cosa que trabajar y trabajar para alimentar a mis hijos. Soy totalmente inocente y no tengo nada que ver con lo que se me acusa”.

Inmediatamente se dirigió al Tribunal Miguel Aballay y luego de su intervención, Blanco pidió nuevamente hablar. Agregó que “policías de civil me detuvieron en Sierra Grande, entraron de golpe a la casa de mi abuela y me recagaron a palos. Todo el tiempo me decían que me tenía que hacer cargo. ´Si no te hacés cargo le va a pasar algo a tus hijas´, me decían. Entonces más vale que cuando la periodista me hizo la nota me hice cargo, porque tenía miedo por mi familia. Por eso tuve que mentirle a la periodista”, indicó en alusión al reportaje que le realizó Ángela Álvarez de LU 20 Radio Chubut tras la audiencia de control de detenidos, en el que admite su culpabilidad y que “la policía no tiene nada que ver”, tal como indicó en esa oportunidad.#

“Tenemos confirmada la materialidad del hecho”

“Tenemos confirmada la materialidad del hecho. Conocemos la escena, tenemos exactitud que Matías y Sergio fueron asesinados por una serie de disparos realizada con un arma de fuego. Y que fue víctima de la agresión Débora Alcucero. Es un único agresor. Y Débora lo conocía”, expresó el abogado querellante Martín Castro, representante de Norma y Miguel Aballay.

Luego de coincidir con la Fiscalía en el relato del hecho, desplegando incluso en la sala un mapa en el que se consigna el lugar del hecho ubicando el barrio y las viviendas en donde se realizaron allanamientos, Castro apuntó: “el agresor, sube a su vehículo y huye. Hasta el 14 de marzo que se lo encontró en una provincia cercana. Se encuentra corroborada su autoría por los siguientes elementos: la declaración de la testigo, por la declaración de los padres que se constituyeron en el lugar, vieron cómo estaban sus hijos tendidos y al advertir que Matías presentaba un signo vital lo llevaron al nosocomio”, relató.

Castro resaltó la importancia de la declaración como testigos, de los policías que intervinieron en el hecho. “Se advirtieron elementos secuestrados; ojota, vaina, visera y recolección de manchas hemáticas. Es importante la declaración de los oficiales que tomaron contacto con el Comando para determinar las llamadas al 101”, indicó. No fue un dato menor para Castro, haberse determinado la posición del tirador y la cantidad de disparos. “Hubo coherencia del relato de Débora Alcucero. El agresor se coloca del lado del conductor y dispara. El perito determina las distancias y coinciden. Fueron dos disparos contra el cuerpo de Matías, lo que demuestra la intención del imputado para terminar con su vida. También, el proyectil que cayó en la puerta trasera. Los dichos del perito Costa, que iban dirigidos a Débora y su hija. La intención de lesionar a las dos personas”, agregó.

“No investigaron a Policía”

El abogado defensor de Horacio Blanco, Carlos Conti, negó la participación en el hecho de su defendido y criticó a la investigación por no haber seguido la hipótesis de “un crimen por encargo” de la muerte de los hermanos Matías y Sergio Aballay, basándose en dichos de los padres. “Los señores Miguel Aballay y su esposa refirieron tiernamente la memoria de sus hijos. Con respeto. Dijeron que los únicos enemigos de sus hijos era un sector de la policía enfrentado en el conocido caso Aballay. La investigación policial jamás ahondó una posible pista referida a lo que los señores siempre coherentemente dijeron que podría ser un crimen por encargo. Lo infirió el defensor oficial, el mismo Aballay. Fueron muy claros al decir que los únicos enemigos era la policía y que derrotaron en la Justicia”.

Sostuvo en la etapa de alegatos en el día de ayer que “en mi rol de abogado defensor del señor Horacio Blanco, voy a contestar a todos los cargos inferidos por la parte acusadora: el fiscal y querella. Voy a postular lo que en su oportunidad esbocé que es la falta de autoría de mi defendido el señor Blanco”, remarcó.

Apuntó que “la fiscalía acusa a Blanco y esboza su teoría de cómo, cuándo y por qué. La divergencia nunca puso en duda la materialidad del grave y luctuoso hecho: quién produjo la muerte”, sostuvo.

Reiteró el defensor que “esta parte afirma y reafirma la inocencia de Blanco por todos los elementos que coayuvan en demostrar su no culpabilidad”, dijo, citando el testimonio de un oficial que llegó al lugar del hecho. “Refirió que al llegar al lugar había mucha gente, que recibió golpes de puño, cólera de la gente y dijo que se tuvo que replegar. Seguían los ataques a la policía. Elabora un acta que firma otro policía. Llama la atención que 30 personas o más como refiere el oficial Carranza estuvieran dedicadas a golpear y disparar como confirmaron otros oficiales a la policía. ¿Cuál era el interés de los concurrentes para enfrentar a la policía cuando iban a auxiliar a los heridos o ya fallecidos?” se cuestionó.

Refirió además el testimonio de Dante García, otro policía. “Dijo que no lo dejaron intervenir, a la segunda y tercera vez tiraban con armas de fuego, nos agredían, era batalla campal. La muerte se produjo en ese espacio. Nunca quedó claro el lugar de los hechos. Nunca quedó claro que de todos los testigos aportados, uno solo fue presencial: la víctima Débora Alcucero. Como víctima no la contradigo pero es parte interesada del relato”, agregó. Apuntó que “el oficial habla de 30 personas que se enfrentan dos o tres veces a la policía y arrojan piedras. Irigoyen Esteban dijo que eran disparos también. ¿Qué pasó esa noche en la calle Saavedra? No lo sabemos aún. No se pudo preservar el lugar sino hasta las 3.50 de la mañana. Ocurrió a la 01.32 hora del 9 de marzo”, remarcó. “La reconstrucción es a partir del único relato de Débora Alcucero. La investigación no pudo aportar ninguna persona que nos pudiese arrojar luz sobre esa balacera. ¿Qué hacían todos peleándose con la policía a las 2 de la mañana? No lo sabemos. Sí que para esa hora, yacía sin vida el señor Sergio Aballay y disparaban sobre la humanidad de Matías”, manifestó.


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