El juez de Faltas asegura que no hay conciencia sobre inconductas al volante
Marcelo Gélvez indicó que los infractores están más preocupados por el monto de las multas que por corregir sus acciones.
El juez de Faltas de Trelew, Marcelo Gélvez, dijo ayer que los infractores de tránsito que concurren a la sede de esa repartición suelen estar más preocupados por el valor de la multa que se les impondrá que por la acción por la que fueron penados, incluso en aquellos casos donde fueron identificados conduciendo bajo los efectos del alcohol.
Los accidentes ocurridos en los últimos días han reavivado el debate sobre la seguridad en el tránsito dentro de la ciudad y la conducta de los automovilistas, al punto que el propio intendente Máximo Pérez Catán adelantó que podría enviar un proyecto al Concejo Deliberante para aumentar las penalidades en el caso de las faltas graves, como el exceso de velocidad, pasar semáforos en rojo o correr “picadas”.
Falta de conciencia
En diálogo con el programa “A Tiempo” que se emite por FM Tiempo de Trelew (91.5), Gélvez indicó que “este tipo de infracciones que se consideran graves, se continúan cometiendo y no hay una toma de conciencia”.
El titular del Juzgado de Faltas señaló que “es llamativo que cuando los que incurren en este tipo de infracciones son jóvenes, muchas veces van los padres al Tribunal de Faltas para solucionar el tema de alguna manera y uno no nota una toma de conciencia”, expresó Gélvez.
Afirmó que parece que para muchos “la preocupación es si la multa es muy cara, pero la gravedad que encierra esto es que en un control le hicieron la alcoholemia y les dio positivo, pero si no le hacían el control podrían haber ocasionado un accidente con consecuencias para otros o para sí mismos y ahí veo la gravedad de la situación, no es una cuestión de los chicos, sino que en muchos de los casos que veo, no en todos, lo padres no toman tampoco conciencia”.
El funcionario recordó que en Trelew las penalidades por un caso de alcoholemia positiva van desde 2.600 a 6.500 pesos de multa, dependiendo de la graduación alcohólica que se detecte, además del secuestro del automóvil en el caso de que no haya un acompañante responsable que no haya consumido alcohol y cuente con la licencia habilitante.
Gélvez afirmó que “muchas veces los jóvenes dicen que están bien para manejar, y quizás uno con una graduación que sea 1 siente que puede manejar correctamente. En esos casos y ante una situación imprevista, los reflejos se retardan y esto es lo que provoca un accidente”, y agregó que es necesario “tomar conciencia y empezar a trabajar en esto de que cuando salen los chicos, hay uno que tiene que ser el conductor asignado o designado, así uno de ellos no tiene que consumir bebidas y es el que maneja”.
El juez indicó que existen figuras para penar lo que comúnmente se denomina “picadas” y en ese caso serían infracciones por “exceso de velocidad o maniobra peligrosa”. También aclaró que en los casos como los ocurridos el último fin de semana, la infracción o falta de tránsito queda subsumida por la comisión de un delito.
El abogado se refirió a los hechos acontecidos durante los últimos días y dijo que “en estos casos que ha habido en la avenida Yrigoyen últimamente, tendría que haber justo un inspector. Entonces cuando los inspectores llegan ya ocurrió el accidente y no podrían labrar un acta por los dichos de algún testigo, aunque sí se pueden labrar actas en forma posterior si la alcoholemia o el dosaje da positivo”. En cuanto al retiro de las licencias de conducir, Gélvez dijo que “en las infracciones consideradas leves, como por ejemplo estacionar en lugares indebidos, uno puede tener más de una infracción, no se consideran faltas graves, pero ante el cruce de un semáforo en rojo, o el exceso de velocidad o si la persona está alcoholizada, ante la reiteración de la infracción se le quita el carnet por un tiempo mínimo de 9 meses” y se envían oficios a otros registros de la zona para evitar que se emita la licencia en esos lugares.
El juez de Faltas de Trelew, Marcelo Gélvez, dijo ayer que los infractores de tránsito que concurren a la sede de esa repartición suelen estar más preocupados por el valor de la multa que se les impondrá que por la acción por la que fueron penados, incluso en aquellos casos donde fueron identificados conduciendo bajo los efectos del alcohol.
Los accidentes ocurridos en los últimos días han reavivado el debate sobre la seguridad en el tránsito dentro de la ciudad y la conducta de los automovilistas, al punto que el propio intendente Máximo Pérez Catán adelantó que podría enviar un proyecto al Concejo Deliberante para aumentar las penalidades en el caso de las faltas graves, como el exceso de velocidad, pasar semáforos en rojo o correr “picadas”.
Falta de conciencia
En diálogo con el programa “A Tiempo” que se emite por FM Tiempo de Trelew (91.5), Gélvez indicó que “este tipo de infracciones que se consideran graves, se continúan cometiendo y no hay una toma de conciencia”.
El titular del Juzgado de Faltas señaló que “es llamativo que cuando los que incurren en este tipo de infracciones son jóvenes, muchas veces van los padres al Tribunal de Faltas para solucionar el tema de alguna manera y uno no nota una toma de conciencia”, expresó Gélvez.
Afirmó que parece que para muchos “la preocupación es si la multa es muy cara, pero la gravedad que encierra esto es que en un control le hicieron la alcoholemia y les dio positivo, pero si no le hacían el control podrían haber ocasionado un accidente con consecuencias para otros o para sí mismos y ahí veo la gravedad de la situación, no es una cuestión de los chicos, sino que en muchos de los casos que veo, no en todos, lo padres no toman tampoco conciencia”.
El funcionario recordó que en Trelew las penalidades por un caso de alcoholemia positiva van desde 2.600 a 6.500 pesos de multa, dependiendo de la graduación alcohólica que se detecte, además del secuestro del automóvil en el caso de que no haya un acompañante responsable que no haya consumido alcohol y cuente con la licencia habilitante.
Gélvez afirmó que “muchas veces los jóvenes dicen que están bien para manejar, y quizás uno con una graduación que sea 1 siente que puede manejar correctamente. En esos casos y ante una situación imprevista, los reflejos se retardan y esto es lo que provoca un accidente”, y agregó que es necesario “tomar conciencia y empezar a trabajar en esto de que cuando salen los chicos, hay uno que tiene que ser el conductor asignado o designado, así uno de ellos no tiene que consumir bebidas y es el que maneja”.
El juez indicó que existen figuras para penar lo que comúnmente se denomina “picadas” y en ese caso serían infracciones por “exceso de velocidad o maniobra peligrosa”. También aclaró que en los casos como los ocurridos el último fin de semana, la infracción o falta de tránsito queda subsumida por la comisión de un delito.
El abogado se refirió a los hechos acontecidos durante los últimos días y dijo que “en estos casos que ha habido en la avenida Yrigoyen últimamente, tendría que haber justo un inspector. Entonces cuando los inspectores llegan ya ocurrió el accidente y no podrían labrar un acta por los dichos de algún testigo, aunque sí se pueden labrar actas en forma posterior si la alcoholemia o el dosaje da positivo”. En cuanto al retiro de las licencias de conducir, Gélvez dijo que “en las infracciones consideradas leves, como por ejemplo estacionar en lugares indebidos, uno puede tener más de una infracción, no se consideran faltas graves, pero ante el cruce de un semáforo en rojo, o el exceso de velocidad o si la persona está alcoholizada, ante la reiteración de la infracción se le quita el carnet por un tiempo mínimo de 9 meses” y se envían oficios a otros registros de la zona para evitar que se emita la licencia en esos lugares.