“Nunca me llamó nadie de Portugués”
A más de tres meses de haber sufrido la durísima lesión en su maxilar tras ser golpeado deslealmente por un jugador de Deportivo Portugués, Ezequiel Maldonado, de Bigornia Club, habló de aquel día, su recuperación, el agresor, el club y la Unión a la que pertenece, además de la suspensión del Austral.
Lo peor ya pasó. Ezequiel Maldonado superó la grave lesión que sufrió en su rostro y poco a poco se está reincorporando a la actividad que tanto extrañaba. En diálogo con “Tiempo Deportivo”, por FM Tiempo y Canal 3, el jugador de Bigornia Club expresó las sensaciones y los recuerdos de aquel momento cuando fue golpeado desde atrás por un rival de Deportivo Portugués, en el partido que su equipo finalmente terminó ganando en Comodoro Rivadavia por 29 a 19, escalando a lo más alto del Austral en ese entonces y superando justamente en la tabla al “Lusitano”.
Mejora notable
“Ahora estoy bastante bien, ya empecé a entrenar por suerte porque ya lo necesitaba mentalmente. Desde muy chico que hago deporte, todos los fines de semana estaba acostumbrado a hacer alguna actividad y me costó mucho dejar de jugar al rugby. Además, estoy recuperando los casi diez kilos que había perdido”, manifestó el jugador “bigorniano”.
Posteriormente recordó: “Cuando tuve esta desgracia me trajeron de Comodoro y me hicieron una tomografía y me dijeron que tenía una doble fractura de maxilar inferior. Por suerte cuando ocurre el accidente estaba el Dr. Maza que me salvó de una operación más grave porque me acomodó la mandíbula en el momento”, sostuvo. El tratamiento y la recuperación que llevó a cabo le llevó bastante tiempo: “Me tuve que hacer placas de todo tipo y después de quince días me operaron, el 5 de octubre, así que estuve quince días sin poder comer, solamente tomaba líquido, después estuve otro veinte días comiendo puré”, expresó.
En cuanto a la operación, Ezequiel agregó que “me tuvieron que cortar la encía y me pusieron las placas por adentro. Finalmente me operó en Puerto Madryn el Dr. Calandra, la verdad un genio, yo tenía mis dudas si operarme acá o en Buenos Aires y varios doctores me lo recomendaron y me decidí por él y salió todo perfecto, por ese lado quedé muy contento”.
El día del partido
A pesar del duro golpe que sufrió, el jugador del “Yunque” nunca perdió la memoria y recuerda todo a la perfección, de tal manera que pudo rearmar la historia y contarla personalmente: “Iban diez minutos del segundo tiempo, hubo una jugada cerca de un lateral del otro lado donde estaba yo y de repente siento un golpe en la cara desde atrás, no entendía nada, me saco el protector bucal y me sangraba mucho la boca, no me caí ni me mareé”, relató. Y siguió: “Salí caminando afuera a ver al doctor oficial del partido y ni se bajó de la ambulancia y me tuvo que atender el Dr. Maza que es el el doctor de Bigornia. Cuando vieron que era algo grave, recién ahí se bajó una doctora que era mayor de edad y no estaba apta para ingresar a la cancha en caso de una emergencia”, comentó la situación.
El agresor
Al ser consultado sobre el contrincante que le propinó la trompada, Maldonado explicó que “no puedo decir quién fue pero todos lo sabemos”. Esto se debe a que “la denuncia está hecha, pero Portugués no lo quiere entregar, esa es la cuestión. No puedo dar su nombre porque ya está en manos de la justicia”, continuó.
“Todos vieron al jugador que me pegó porque fue muy cerca de las dos tribunas donde estaba la gente de Bigornia. Lo que me resultó más raro es que yo en ningún momento tuve un enfrentamiento ni un roce con él y de la nada me pegó”, dijo y posteriormente destacó: “Juego al rugby desde muy chiquito, tengo 27 años, y nunca me pasó algo así ni siquiera vi algo parecido”, añadió.
Portugués
En cuanto al club al que pertenece el agresor, Maldonado reflejó que “lo que más me dolió es que nunca me llamó nadie de Portugués, no se hicieron cargo de nada y me duele que por culpa de una persona todos hayan tenido que pagar y se quedaron sin jugar todas las categorías. Si se hubiera hecho cargo el propio jugador o el club, todo se solucionaba fácilmente”, comentó. “Portugués tenía que actuar y la Unión Austral también. ¿Qué garantías me dan que el día de mañana vuelva a jugar a Comodoro y no me pase lo mismo? Esto le pudo pasar a cualquiera, al lado mío tenía un compañero de 18 años ¿y si le pasaba a él?”, enfatizó resignado. Por último sostuvo que “el error es del club y de la URA. Me duele pero creo que estuvo bien la decisión que tomó la URVCh”, concluyó.
Lo peor ya pasó. Ezequiel Maldonado superó la grave lesión que sufrió en su rostro y poco a poco se está reincorporando a la actividad que tanto extrañaba. En diálogo con “Tiempo Deportivo”, por FM Tiempo y Canal 3, el jugador de Bigornia Club expresó las sensaciones y los recuerdos de aquel momento cuando fue golpeado desde atrás por un rival de Deportivo Portugués, en el partido que su equipo finalmente terminó ganando en Comodoro Rivadavia por 29 a 19, escalando a lo más alto del Austral en ese entonces y superando justamente en la tabla al “Lusitano”.
Mejora notable
“Ahora estoy bastante bien, ya empecé a entrenar por suerte porque ya lo necesitaba mentalmente. Desde muy chico que hago deporte, todos los fines de semana estaba acostumbrado a hacer alguna actividad y me costó mucho dejar de jugar al rugby. Además, estoy recuperando los casi diez kilos que había perdido”, manifestó el jugador “bigorniano”.
Posteriormente recordó: “Cuando tuve esta desgracia me trajeron de Comodoro y me hicieron una tomografía y me dijeron que tenía una doble fractura de maxilar inferior. Por suerte cuando ocurre el accidente estaba el Dr. Maza que me salvó de una operación más grave porque me acomodó la mandíbula en el momento”, sostuvo. El tratamiento y la recuperación que llevó a cabo le llevó bastante tiempo: “Me tuve que hacer placas de todo tipo y después de quince días me operaron, el 5 de octubre, así que estuve quince días sin poder comer, solamente tomaba líquido, después estuve otro veinte días comiendo puré”, expresó.
En cuanto a la operación, Ezequiel agregó que “me tuvieron que cortar la encía y me pusieron las placas por adentro. Finalmente me operó en Puerto Madryn el Dr. Calandra, la verdad un genio, yo tenía mis dudas si operarme acá o en Buenos Aires y varios doctores me lo recomendaron y me decidí por él y salió todo perfecto, por ese lado quedé muy contento”.
El día del partido
A pesar del duro golpe que sufrió, el jugador del “Yunque” nunca perdió la memoria y recuerda todo a la perfección, de tal manera que pudo rearmar la historia y contarla personalmente: “Iban diez minutos del segundo tiempo, hubo una jugada cerca de un lateral del otro lado donde estaba yo y de repente siento un golpe en la cara desde atrás, no entendía nada, me saco el protector bucal y me sangraba mucho la boca, no me caí ni me mareé”, relató. Y siguió: “Salí caminando afuera a ver al doctor oficial del partido y ni se bajó de la ambulancia y me tuvo que atender el Dr. Maza que es el el doctor de Bigornia. Cuando vieron que era algo grave, recién ahí se bajó una doctora que era mayor de edad y no estaba apta para ingresar a la cancha en caso de una emergencia”, comentó la situación.
El agresor
Al ser consultado sobre el contrincante que le propinó la trompada, Maldonado explicó que “no puedo decir quién fue pero todos lo sabemos”. Esto se debe a que “la denuncia está hecha, pero Portugués no lo quiere entregar, esa es la cuestión. No puedo dar su nombre porque ya está en manos de la justicia”, continuó.
“Todos vieron al jugador que me pegó porque fue muy cerca de las dos tribunas donde estaba la gente de Bigornia. Lo que me resultó más raro es que yo en ningún momento tuve un enfrentamiento ni un roce con él y de la nada me pegó”, dijo y posteriormente destacó: “Juego al rugby desde muy chiquito, tengo 27 años, y nunca me pasó algo así ni siquiera vi algo parecido”, añadió.
Portugués
En cuanto al club al que pertenece el agresor, Maldonado reflejó que “lo que más me dolió es que nunca me llamó nadie de Portugués, no se hicieron cargo de nada y me duele que por culpa de una persona todos hayan tenido que pagar y se quedaron sin jugar todas las categorías. Si se hubiera hecho cargo el propio jugador o el club, todo se solucionaba fácilmente”, comentó. “Portugués tenía que actuar y la Unión Austral también. ¿Qué garantías me dan que el día de mañana vuelva a jugar a Comodoro y no me pase lo mismo? Esto le pudo pasar a cualquiera, al lado mío tenía un compañero de 18 años ¿y si le pasaba a él?”, enfatizó resignado. Por último sostuvo que “el error es del club y de la URA. Me duele pero creo que estuvo bien la decisión que tomó la URVCh”, concluyó.