El cuñado del rey implica a la Casa Real en sus negocios
Iñaki Urdangarin, cuñado del rey Felipe VI, implicó a la Casa Real española en sus negocios al declarar en el marco de juicio por corrupción en el que está imputado y por el que enfrenta un pedido de pena de 19 años y medio de prisión solicitado por la Fiscalía.
"No daba un paso en mi vida sin consultar a Carlos García Revenga", aseguró Urdangarin, en relación al ex secretario de la infanta Cristina, quien estuvo procesado durante varios meses de investigación pero finalmente fue sobreseído.
En su tetimonio, Urdangarin coincidió con su ex socio, Diego Torres, quien también declaró que la Corona supervisaba las actividades de la Fundación Nóos y Aizoon, las empresas de la trama corrupta bajo investigación.
El ex duque de Palma dejó claro ante preguntas del fiscal anticorrupción, Pedro Horrach, que García Revenga, quien era miembro de la Junta directiva de Nóos, estaba informado "de todo".
Por el contrario, sostuvo que su esposa, Cristina de Borbón, también integrante de la junta de la citada fundación, no tenía "ninguna" función y sólo figuraba allí por ser una de las personas de "confianza" que siempre estaba a su lado.
En cuanto a la implicación de la Casa Real, el marido de la hermana del rey también confirmó que fue el ex asesor de su suegro José Manuel Moreno Romero, conde de Fontao, quien le "recomendó" que debía abandonar la presidencia de Nóos y su junta cuando salieron a luz los convenios de colaboración con el gobierno balear de Jaume Matas, entonces ya salpicado por corrupción.
Fue en ese momento cuando la infanta y Revenga se desvincularon de Nóos.
Mientras que Revenga no está imputado, la hermana del rey Felipe VI está acusada de cooperar con dos delitos fiscales cometidos presuntamente por Urdangarin, con quien comparte el 50% de la sociedad Aizoon.
"La recomendación era que me centrase en la asesoría de empresa privadas", explicó Urgangarin, sobre su posterior decisión de vender la mitad de Nóos a Torres.
La ex estrella de handball en el FC Barcelona y la selección española y Torres son considerados los cerebros de una trama de corrupción que se apropió indebidamente de más de seis millones de euros de fondos públicos de las administraciones balear, madrileña y valenciana, entre 2004 y 2007, cuando estaba en manos del Partido Popular (PP).
Parte del dinero fue a parar a Aizoon, una empresa que según el juez instructor del caso era una "pantalla" frente a la Hacienda Pública.
Interrogado por el fiscal, Urdangarin explicó como nació Aizoon: "Fue una idea de Miguel Tejeiro para canalizar mis honorarios, y la constituí junto con mi señora que iba a ser solo socia y no iba a tener implicación en el día a día", dijo.
"Siempre he seguido las recomendaciones de Miguel Tejeiro", remarcó, atribuyendo la responsabilidad a su asesor fiscal.
En ese sentido, Urdangarin reconoció que "uno de los grandes clientes de Aizoon era Nóos".
No obstante, exculpó a la infanta Cristina del delito fiscal que se le imputa: "Las declaraciones de impuestos de mi señora las hacía Federico Rubio que era asesor de la Casa Real", aseguró, señalando una vez más a la Casa Real.
Esta previsto que la infanta Cristina declare en el juicio después de que lo haga su esposo.
A la hermana del rey únicamente la acusa Manos Limpias, que ejerce como acusación popular, y pide para ella una pena de ocho años de prisión multa de 2 millones de euros. La Fiscalía, en cambio, pide su absolución.
"No daba un paso en mi vida sin consultar a Carlos García Revenga", aseguró Urdangarin, en relación al ex secretario de la infanta Cristina, quien estuvo procesado durante varios meses de investigación pero finalmente fue sobreseído.
En su tetimonio, Urdangarin coincidió con su ex socio, Diego Torres, quien también declaró que la Corona supervisaba las actividades de la Fundación Nóos y Aizoon, las empresas de la trama corrupta bajo investigación.
El ex duque de Palma dejó claro ante preguntas del fiscal anticorrupción, Pedro Horrach, que García Revenga, quien era miembro de la Junta directiva de Nóos, estaba informado "de todo".
Por el contrario, sostuvo que su esposa, Cristina de Borbón, también integrante de la junta de la citada fundación, no tenía "ninguna" función y sólo figuraba allí por ser una de las personas de "confianza" que siempre estaba a su lado.
En cuanto a la implicación de la Casa Real, el marido de la hermana del rey también confirmó que fue el ex asesor de su suegro José Manuel Moreno Romero, conde de Fontao, quien le "recomendó" que debía abandonar la presidencia de Nóos y su junta cuando salieron a luz los convenios de colaboración con el gobierno balear de Jaume Matas, entonces ya salpicado por corrupción.
Fue en ese momento cuando la infanta y Revenga se desvincularon de Nóos.
Mientras que Revenga no está imputado, la hermana del rey Felipe VI está acusada de cooperar con dos delitos fiscales cometidos presuntamente por Urdangarin, con quien comparte el 50% de la sociedad Aizoon.
"La recomendación era que me centrase en la asesoría de empresa privadas", explicó Urgangarin, sobre su posterior decisión de vender la mitad de Nóos a Torres.
La ex estrella de handball en el FC Barcelona y la selección española y Torres son considerados los cerebros de una trama de corrupción que se apropió indebidamente de más de seis millones de euros de fondos públicos de las administraciones balear, madrileña y valenciana, entre 2004 y 2007, cuando estaba en manos del Partido Popular (PP).
Parte del dinero fue a parar a Aizoon, una empresa que según el juez instructor del caso era una "pantalla" frente a la Hacienda Pública.
Interrogado por el fiscal, Urdangarin explicó como nació Aizoon: "Fue una idea de Miguel Tejeiro para canalizar mis honorarios, y la constituí junto con mi señora que iba a ser solo socia y no iba a tener implicación en el día a día", dijo.
"Siempre he seguido las recomendaciones de Miguel Tejeiro", remarcó, atribuyendo la responsabilidad a su asesor fiscal.
En ese sentido, Urdangarin reconoció que "uno de los grandes clientes de Aizoon era Nóos".
No obstante, exculpó a la infanta Cristina del delito fiscal que se le imputa: "Las declaraciones de impuestos de mi señora las hacía Federico Rubio que era asesor de la Casa Real", aseguró, señalando una vez más a la Casa Real.
Esta previsto que la infanta Cristina declare en el juicio después de que lo haga su esposo.
A la hermana del rey únicamente la acusa Manos Limpias, que ejerce como acusación popular, y pide para ella una pena de ocho años de prisión multa de 2 millones de euros. La Fiscalía, en cambio, pide su absolución.