La corrupción en Petrobras llega hasta el ex presidente Cardoso

El escándalo de Petrobras ha llegado a parte de la oposición brasileña, ya que el ex diputado y ex presidente del conservador Partido Progresista (PP), Pedro Correa, preso y condenado por corrupción, acusó al ex presidente Fernando Henrique Cardoso de haber financiado la reforma constitucional en 1997 para su reelección con sobornos a legisladores pagados por el banco Itaú, la entidad financiera privada más grande de Brasil, informó hoy la prensa local.

25 MAR 2016 - 11:55 | Actualizado

El diario Folha de Sao Paulo publicó que Correa, condenado en primera instancia a 20 años de cárcel por el juez Sérgio Moro, que investiga el caso Petrobras, hizo un acuerdo de delación premiada en la cual incluye al ex presidente Cardoso (1995-2002) y al senador Aécio Neves, candidato presidencial en 2014 y titular del Partido de la Social Democracia Brasileña.

De acuerdo con Folha, Correa afirmó que Olavo Setúbal, el dueño ya fallecido del banco Itaú, "enviaba cartas a los parlamentarios que votaban a favor de la reelección para que se dirigieran a un cambista ilegal en Brasilia y recibieran el soborno en dólares americanos", según consta en el escrito.

En la época, dos diputados del derechista Partido del Frente Liberal habían denunciado haber sido beneficiados con dinero en efectivo por votar la enmienda constitucional que le permitió a Cardoso, del PSDB, ser reelecto al año siguiente.

Correa está preso en Curitiba y condujo durante 30 años un partido que fue oficialista en todas las gestiones, tanto de Cardoso, como del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010) y la actual mandataria, Dilma Rousseff.

También fue condenado por el mensalao, un sistema de reparto de dinero por el cual fue sentenciado el exministro José Dirceu, ahora también preso por el "petrolao", la red de corrupción en torno a contratos de Petrobras y financiamiento de campañas.

Los documentos también apuntan al senador Neves, a quien Correa acusa de usar a su hermana, Andrea Neves, como operadora de supuestas transferencias de dinero para el PSDB.

El ex diputado también citó a Lula, quien según dijo en 2004 aceptó durante su presidencia la designación como director de Petrobras de Paulo Roberto Costa a pedido del PP y contra la opinión del Partido de los Trabajadores (PT).

Costa es uno de los directores de Petrobras que confesó a cambio de la prisión domiciliaria otorgada por el juez Moro que ganó millones de dólares en sobornos a cambio de sobrefacturar contratos de la petrolera estatal, respondiendo al Partido Progresista.

La confesión de Correa -negociada con la fiscalía y que espera aprobación del Supremo Tribunal Federal- también acusa al presidente del Tribunal de Cuentas de la Unión, Augusto Nardes, de recibir dinero ilegal de su partido.

Nardes es un nombre clave en este momento porque es quien decidió denunciar a Dilma Rousseff de violar la ley de responsabilidad fiscal, acusación que es el argumento del juicio político que realiza contra la mandataria en el Congreso.

Correa es el segundo político que decide por la delación premiada en el escándalo Petrobras. El otro fue Delcidio Amaral, senador del PT, quien está acusado de ayudar a escapar a un corrupto confeso de Petrobras, Nestor Cerveró.

La tensión política en el país en torno al juicio político de la presidenta ganó las calles ayer por la noche en San Pablo, donde unos 30.000 manifestantes protestaron contra la TV Globo, opositora al gobierno.

25 MAR 2016 - 11:55

El diario Folha de Sao Paulo publicó que Correa, condenado en primera instancia a 20 años de cárcel por el juez Sérgio Moro, que investiga el caso Petrobras, hizo un acuerdo de delación premiada en la cual incluye al ex presidente Cardoso (1995-2002) y al senador Aécio Neves, candidato presidencial en 2014 y titular del Partido de la Social Democracia Brasileña.

De acuerdo con Folha, Correa afirmó que Olavo Setúbal, el dueño ya fallecido del banco Itaú, "enviaba cartas a los parlamentarios que votaban a favor de la reelección para que se dirigieran a un cambista ilegal en Brasilia y recibieran el soborno en dólares americanos", según consta en el escrito.

En la época, dos diputados del derechista Partido del Frente Liberal habían denunciado haber sido beneficiados con dinero en efectivo por votar la enmienda constitucional que le permitió a Cardoso, del PSDB, ser reelecto al año siguiente.

Correa está preso en Curitiba y condujo durante 30 años un partido que fue oficialista en todas las gestiones, tanto de Cardoso, como del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010) y la actual mandataria, Dilma Rousseff.

También fue condenado por el mensalao, un sistema de reparto de dinero por el cual fue sentenciado el exministro José Dirceu, ahora también preso por el "petrolao", la red de corrupción en torno a contratos de Petrobras y financiamiento de campañas.

Los documentos también apuntan al senador Neves, a quien Correa acusa de usar a su hermana, Andrea Neves, como operadora de supuestas transferencias de dinero para el PSDB.

El ex diputado también citó a Lula, quien según dijo en 2004 aceptó durante su presidencia la designación como director de Petrobras de Paulo Roberto Costa a pedido del PP y contra la opinión del Partido de los Trabajadores (PT).

Costa es uno de los directores de Petrobras que confesó a cambio de la prisión domiciliaria otorgada por el juez Moro que ganó millones de dólares en sobornos a cambio de sobrefacturar contratos de la petrolera estatal, respondiendo al Partido Progresista.

La confesión de Correa -negociada con la fiscalía y que espera aprobación del Supremo Tribunal Federal- también acusa al presidente del Tribunal de Cuentas de la Unión, Augusto Nardes, de recibir dinero ilegal de su partido.

Nardes es un nombre clave en este momento porque es quien decidió denunciar a Dilma Rousseff de violar la ley de responsabilidad fiscal, acusación que es el argumento del juicio político que realiza contra la mandataria en el Congreso.

Correa es el segundo político que decide por la delación premiada en el escándalo Petrobras. El otro fue Delcidio Amaral, senador del PT, quien está acusado de ayudar a escapar a un corrupto confeso de Petrobras, Nestor Cerveró.

La tensión política en el país en torno al juicio político de la presidenta ganó las calles ayer por la noche en San Pablo, donde unos 30.000 manifestantes protestaron contra la TV Globo, opositora al gobierno.


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