Me quedo con lo mejor del peronismo, acá en mi corazón. Y no con este peronismo que es espantoso y fue responsable de la decadencia de la provincia en los últimos cuatro años.”
La frase que Mario Das Neves pronunció ayer no sólo le cierra la puerta a cualquier especulación sobre su “regreso” a las fuentes partidarias sino que significa una inyección de energía para Chubut Somos Todos, el partido con el que ganó su tercera gobernación y con el que espera hacer perdurar su línea de pensamiento en las próximas décadas.
Das Neves eligió un Plenario partidario en Trelew para marcarle la cancha a muchos sectores del peronismo que seguían abriéndole las puertas del Partido Justicialista de par en par. Y también fue un tiro por elevación para los peronistas que jugaron del lado de Chubut Somos Todos en las últimas elecciones y que vienen coqueteando con el dasnevismo. Para ellos, el mensaje también parece haber sido claro, conciso y contundente: allá o acá. En las dos ventanillas, no.
“Vino para quedarse”
Fue lo que les dijo Das Neves a sus dirigentes y militantes ayer sobre su novel partido: “Somos una fuerza nueva, con un apoyo muy importante porque los ciudadanos nos hicieron ganar en toda la provincia. Por lo tanto, hay que organizarse”.
El gobernador, por ejemplo, anunció que seguirá abriendo las “Casas Locales”, como se llaman las “unidades básicas” dasnevistas. Y piensa tener al menos una en cada rincón de la provincia.
Dejar en claro que Chubut Somos Todos no fue el resultado de una coyuntura electoral fue toda una definición. Esta divisoria de aguas marca un antes y un después en la política chubutense. Das Neves no dejará nunca de ser peronista pero, está claro, dejó atrás al Partido Justicialista.
Objetivo: inflación
No es verdad que el combate contra la inflación sólo se puede librar desde las oficinas del Ministerio de Economía de la Nación, a pocos metros de la Casa Rosada y de la Plaza de Mayo.
Cuando el gobernador recibió hace pocas semanas una encuesta de la consultora Aresco, algunos a su alrededor se alegraron porque el 72% de los chubutenses tenía una buena imagen de su gestión.
Das Neves, en cambio, miró otro cuadro: la inflación y el empleo son hoy la mayor preocupación de los chubutenses, por encima de la inseguridad, ese flagelo que siempre parece estar por encima de todo.
Esta semana, Chubut dio un primer paso para que el sector empresario que hace negocios en la provincia entienda que aunque la economía está liberada, hay un Estado presente que puede marcar límites o crear condiciones para que los consumidores no se vean avasallados.
Desde el próximo jueves, dos frigoríficos (Pilotti y La Granja Porcina), con presencia en Comodoro Rivadavia, Trelew, Rawson y Puerto Madryn, comenzarán a vender cortes de carnes con rebajas de hasta 20%. Desde esta semana, además, se intentará avanzar con acuerdo similar para la zona cordillerana, y se viene otro con el sector de los lácteos.
La decisión del gobernador Das Neves de hacer valer el poder adquisitivo de los consumidores no es un dato menor. Una parte importante de los consumidores de esta provincia son empleados públicos que se vieron beneficiados con los aumentos salariales acordados en las últimas paritarias. Lo que el Gobierno quiere es que ese dinero que ingresa a los bolsillos de la gente no se vaya por la cañería de los comerciantes y empresarios que desde que asumió el presidente Mauricio Macri están gastando el lápiz con el que remarcan los precios.
Más acuerdos
La estrategia de Gobierno no se agotará en dos o tres acuerdos: Defensa del Consumidor ya está trabajando para ampliar el programa de Precios Cuidados con una “lista chubutense” que será más amplia que la que hay a nivel nacional.
Los empresarios que se empiezan a sumar a esta propuesta del Gobierno no son zonzos. No lo hacen sólo para quedar bien con el poder de turno ni porque son benefactores de la sociedad. En el caso de la carne, por ejemplo, el consumo ha venido cayendo en el último tiempo, acentuado desde la devaluación, la ola de despidos y la pérdida de confianza de la gente.
Los empresarios –algunos, al menos- saben que sería un sacrilegio matar a la gallina de los huevos de oro que significó el boom del consumo que dejó el kirchnerismo. Se le puede achacar muchas cosas a la década kirchnerista, pero no la expansión del consumo que generó y que benefició, principalmente, a los empresarios de diversos sectores.
Fondos frescos
Un día después de haber firmado el decreto autorizando al Ministerio de Economía a llevar a cabo las operaciones crediticias necesarias para obtener créditos en el mercado internacional de hasta 650 millones de dólares, el gobernador ya se puso a definir con su equipo el plan de obras públicas que se financiará con fondos de este endeudamiento: “La prioridad serán las obras de servicios”, le dijo a su funcionarios.
Redes de agua potable, provisión de energía eléctrica, cloacas y mejoramientos barriales, serán las obras que el Gobierno lanzará en el corto plazo, una vez que comiencen a ingresar los fondos que Chubut salió a buscar al mercado financiero internacional, en las mejores condiciones que se podría en este momento, tras el acuerdo con los buitres y el pago formal realizado el viernes por el Gobierno nacional.
Das Neves quiere que estas soluciones para la gente también ayuden a poner en marcha al sector productivo. “Si apostamos a la producción, apostamos al trabajo”, sostiene.
En el Gobierno se entusiasman con tener un segundo semestre con obras a full, miles de obreros de la construcción trabajando y muchos otros sectores beneficiándose con la provisión de materiales para el plan de obras.
Una especie de “teoría del derrame” que beneficie a muchos sectores y le permita al Gobierno articular más políticas sociales focalizadas y eficaces. Eso es lo que pretende Das Neves para la segunda mitad del año, además de sentar las bases para los próximos tres años que completarán su gestión.
El frente político
El inicio de las reuniones de Gabinete conjuntos entre el Gobierno provincial y los municipios no podría haber sido mejor. No sólo porque el resultado –según los propios protagonistas- fue alentador, sino porque durante el encuentro con los representantes políticos de Comodoro Rivadavia también se acordó la necesidad de trabajar en conjunto con uno de los intendentes que ya está pensando en 2019.
A Das Neves no le importa que Carlos Linares ya se haya comenzado a mover como el candidato a gobernador del peronismo, lo que le importa es que a los comodorenses les quede claro que este Gobierno va hacer todo lo que tenga que hacer para ayudar a paliar el enorme déficit de infraestructura que aún tiene la ciudad petrolera.
Das Neves no se olvida que Comodoro Rivadavia siempre fue su talón de Aquiles en términos electorales. Y aunque ese electorado lo hizo ganar la elección de 2003 ante el radical José Luis Lizurume, después siempre fue un escollo para sus aspiraciones y la de los suyos.
Pero, ya se sabe, este es otro Das Neves. Entiende, más que nunca, que el Chenque y la gente que habita en sus alrededores seguirán estando en su lugar, trabajando todos los días para forjarse un destino digno. Y que él y su impronta, esa que lo viene ayudando a superar los límites cada día que se levanta, también seguirán perdurando, pase lo que pase.
La política podrá seguir generando desencuentros entre políticos. Pero no entre Das Neves y la gente.
Me quedo con lo mejor del peronismo, acá en mi corazón. Y no con este peronismo que es espantoso y fue responsable de la decadencia de la provincia en los últimos cuatro años.”
La frase que Mario Das Neves pronunció ayer no sólo le cierra la puerta a cualquier especulación sobre su “regreso” a las fuentes partidarias sino que significa una inyección de energía para Chubut Somos Todos, el partido con el que ganó su tercera gobernación y con el que espera hacer perdurar su línea de pensamiento en las próximas décadas.
Das Neves eligió un Plenario partidario en Trelew para marcarle la cancha a muchos sectores del peronismo que seguían abriéndole las puertas del Partido Justicialista de par en par. Y también fue un tiro por elevación para los peronistas que jugaron del lado de Chubut Somos Todos en las últimas elecciones y que vienen coqueteando con el dasnevismo. Para ellos, el mensaje también parece haber sido claro, conciso y contundente: allá o acá. En las dos ventanillas, no.
“Vino para quedarse”
Fue lo que les dijo Das Neves a sus dirigentes y militantes ayer sobre su novel partido: “Somos una fuerza nueva, con un apoyo muy importante porque los ciudadanos nos hicieron ganar en toda la provincia. Por lo tanto, hay que organizarse”.
El gobernador, por ejemplo, anunció que seguirá abriendo las “Casas Locales”, como se llaman las “unidades básicas” dasnevistas. Y piensa tener al menos una en cada rincón de la provincia.
Dejar en claro que Chubut Somos Todos no fue el resultado de una coyuntura electoral fue toda una definición. Esta divisoria de aguas marca un antes y un después en la política chubutense. Das Neves no dejará nunca de ser peronista pero, está claro, dejó atrás al Partido Justicialista.
Objetivo: inflación
No es verdad que el combate contra la inflación sólo se puede librar desde las oficinas del Ministerio de Economía de la Nación, a pocos metros de la Casa Rosada y de la Plaza de Mayo.
Cuando el gobernador recibió hace pocas semanas una encuesta de la consultora Aresco, algunos a su alrededor se alegraron porque el 72% de los chubutenses tenía una buena imagen de su gestión.
Das Neves, en cambio, miró otro cuadro: la inflación y el empleo son hoy la mayor preocupación de los chubutenses, por encima de la inseguridad, ese flagelo que siempre parece estar por encima de todo.
Esta semana, Chubut dio un primer paso para que el sector empresario que hace negocios en la provincia entienda que aunque la economía está liberada, hay un Estado presente que puede marcar límites o crear condiciones para que los consumidores no se vean avasallados.
Desde el próximo jueves, dos frigoríficos (Pilotti y La Granja Porcina), con presencia en Comodoro Rivadavia, Trelew, Rawson y Puerto Madryn, comenzarán a vender cortes de carnes con rebajas de hasta 20%. Desde esta semana, además, se intentará avanzar con acuerdo similar para la zona cordillerana, y se viene otro con el sector de los lácteos.
La decisión del gobernador Das Neves de hacer valer el poder adquisitivo de los consumidores no es un dato menor. Una parte importante de los consumidores de esta provincia son empleados públicos que se vieron beneficiados con los aumentos salariales acordados en las últimas paritarias. Lo que el Gobierno quiere es que ese dinero que ingresa a los bolsillos de la gente no se vaya por la cañería de los comerciantes y empresarios que desde que asumió el presidente Mauricio Macri están gastando el lápiz con el que remarcan los precios.
Más acuerdos
La estrategia de Gobierno no se agotará en dos o tres acuerdos: Defensa del Consumidor ya está trabajando para ampliar el programa de Precios Cuidados con una “lista chubutense” que será más amplia que la que hay a nivel nacional.
Los empresarios que se empiezan a sumar a esta propuesta del Gobierno no son zonzos. No lo hacen sólo para quedar bien con el poder de turno ni porque son benefactores de la sociedad. En el caso de la carne, por ejemplo, el consumo ha venido cayendo en el último tiempo, acentuado desde la devaluación, la ola de despidos y la pérdida de confianza de la gente.
Los empresarios –algunos, al menos- saben que sería un sacrilegio matar a la gallina de los huevos de oro que significó el boom del consumo que dejó el kirchnerismo. Se le puede achacar muchas cosas a la década kirchnerista, pero no la expansión del consumo que generó y que benefició, principalmente, a los empresarios de diversos sectores.
Fondos frescos
Un día después de haber firmado el decreto autorizando al Ministerio de Economía a llevar a cabo las operaciones crediticias necesarias para obtener créditos en el mercado internacional de hasta 650 millones de dólares, el gobernador ya se puso a definir con su equipo el plan de obras públicas que se financiará con fondos de este endeudamiento: “La prioridad serán las obras de servicios”, le dijo a su funcionarios.
Redes de agua potable, provisión de energía eléctrica, cloacas y mejoramientos barriales, serán las obras que el Gobierno lanzará en el corto plazo, una vez que comiencen a ingresar los fondos que Chubut salió a buscar al mercado financiero internacional, en las mejores condiciones que se podría en este momento, tras el acuerdo con los buitres y el pago formal realizado el viernes por el Gobierno nacional.
Das Neves quiere que estas soluciones para la gente también ayuden a poner en marcha al sector productivo. “Si apostamos a la producción, apostamos al trabajo”, sostiene.
En el Gobierno se entusiasman con tener un segundo semestre con obras a full, miles de obreros de la construcción trabajando y muchos otros sectores beneficiándose con la provisión de materiales para el plan de obras.
Una especie de “teoría del derrame” que beneficie a muchos sectores y le permita al Gobierno articular más políticas sociales focalizadas y eficaces. Eso es lo que pretende Das Neves para la segunda mitad del año, además de sentar las bases para los próximos tres años que completarán su gestión.
El frente político
El inicio de las reuniones de Gabinete conjuntos entre el Gobierno provincial y los municipios no podría haber sido mejor. No sólo porque el resultado –según los propios protagonistas- fue alentador, sino porque durante el encuentro con los representantes políticos de Comodoro Rivadavia también se acordó la necesidad de trabajar en conjunto con uno de los intendentes que ya está pensando en 2019.
A Das Neves no le importa que Carlos Linares ya se haya comenzado a mover como el candidato a gobernador del peronismo, lo que le importa es que a los comodorenses les quede claro que este Gobierno va hacer todo lo que tenga que hacer para ayudar a paliar el enorme déficit de infraestructura que aún tiene la ciudad petrolera.
Das Neves no se olvida que Comodoro Rivadavia siempre fue su talón de Aquiles en términos electorales. Y aunque ese electorado lo hizo ganar la elección de 2003 ante el radical José Luis Lizurume, después siempre fue un escollo para sus aspiraciones y la de los suyos.
Pero, ya se sabe, este es otro Das Neves. Entiende, más que nunca, que el Chenque y la gente que habita en sus alrededores seguirán estando en su lugar, trabajando todos los días para forjarse un destino digno. Y que él y su impronta, esa que lo viene ayudando a superar los límites cada día que se levanta, también seguirán perdurando, pase lo que pase.
La política podrá seguir generando desencuentros entre políticos. Pero no entre Das Neves y la gente.