Secuestraron a exsecretario de Kirchner en Santa Cruz
Un ex secretario de Néstor Kirchner en su gestión como gobernador de Santa Cruz fue hoy herido a golpes luego de haber sido privado de su libertad durante tres horas por al menos dos delincuentes, que luego fueron detenidos y vinculados con una unidad básica del PJ, que se lo llevaron cautivo de su casa a bordo de una camioneta en la ciudad santacruceña de Río Gallegos.
Fuentes policiales confirmaron a Télam que Sosa, de 57 años, trabajó con el fallecido ex presidente cuando estuvo a cargo del Ejecutivo provincial (1991-2003) y que sus dos captores tendrían antecedentes policiales y tienen vinculación con una unidad básica que, según trascendió, sería de la agrupación Kolina, que lidera la actual gobernadora de Santa Cruz, Alicia Kirchner.
El hecho comenzó alrededor de la 1 de esta madrugada en una vivienda situada en Labaké al 100, en el barrio Jardín de Río Gallegos.
De acuerdo a la denuncia de la mujer de Sosa, dos hombres se presentaron en la puerta de la casa, preguntaron por Roberto y cuando éste los atendió se lo llevaron por la fuerza y lo obligaron a subir a una camioneta oscura, a bordo de la cual abandonaron el lugar.
Según las fuentes, poco después de la captura, los delincuentes llamaron a la mujer en varias ocasiones, en una se escucharon ruidos sospechosos, como si estuvieran golpeando a Sosa, y en otra le dijeron que iba a salir "todo bien" y que pronto devolverían a la víctima a su domicilio.
Alertada de lo ocurrido, personal policial de la Unidad Regional Sur comenzó a buscar la camioneta, la cual se determinó luego que se trataba de una Chevrolet S10 color negra, dijeron los informantes.
Las fuentes señalaron que la camioneta fue localizada cerca de las 4, estacionada frente a una vivienda situada en Gobernador Moyano al 500, de Río Gallegos, donde los efectivos montaron una vigilancia encubierta.
En esas circunstancias, los pesquisas advirtieron que tres personas salían de la casa y pretendían abordar la camioneta, por lo que al identificarlas determinaron que se trataba de Sosa, visiblemente golpeado, y dos de sus captores, los cuales fueron detenidos.
Al ser rescatada por la Policía, la víctima se desvaneció, por lo que fue llevada al Hospital Regional de la capital santacruceña donde los médicos constataron que presentaba lesiones por golpes en el cráneo, a raíz de lo cual quedó internado en observación.
Un jefe policial que participa de la investigación explicó a Télam que hasta el momento no está acreditado que durante el cautiverio los delincuentes hayan exigido dinero como rescate, como en un típico caso de secuestro extorsivo, por lo que la causa está caratulada como "privación ilegal de la libertad, amenazas y lesiones graves".
En ese sentido, el vocero consultado indicó que aguardan para las próximas horas que Sosa se recupere y dé su versión de los hechos.
En tanto, los dos detenidos tienen unos 30 años y ya estaban bajo investigación de la Policía y de la Justicia por otros hechos delictivos.
Los pesquisas no descartan que hayan intervenido más personas en la captura y esta tarde continuaban las diligencias en la casa de la calle Gobernador Moyano donde se cree que estuvo cautiva la víctima y que es propiedad de los familiares de los detenidos.
Y si bien tanto en la captura como en el rescate no se observó el uso de armas de fuegos, los investigadores creen que en algún momento de los hechos las emplearon.
La causa quedó a cargo de la jueza de Instrucción 3 de Río Gallegos, Rosana Suárez.
Fuentes policiales confirmaron a Télam que Sosa, de 57 años, trabajó con el fallecido ex presidente cuando estuvo a cargo del Ejecutivo provincial (1991-2003) y que sus dos captores tendrían antecedentes policiales y tienen vinculación con una unidad básica que, según trascendió, sería de la agrupación Kolina, que lidera la actual gobernadora de Santa Cruz, Alicia Kirchner.
El hecho comenzó alrededor de la 1 de esta madrugada en una vivienda situada en Labaké al 100, en el barrio Jardín de Río Gallegos.
De acuerdo a la denuncia de la mujer de Sosa, dos hombres se presentaron en la puerta de la casa, preguntaron por Roberto y cuando éste los atendió se lo llevaron por la fuerza y lo obligaron a subir a una camioneta oscura, a bordo de la cual abandonaron el lugar.
Según las fuentes, poco después de la captura, los delincuentes llamaron a la mujer en varias ocasiones, en una se escucharon ruidos sospechosos, como si estuvieran golpeando a Sosa, y en otra le dijeron que iba a salir "todo bien" y que pronto devolverían a la víctima a su domicilio.
Alertada de lo ocurrido, personal policial de la Unidad Regional Sur comenzó a buscar la camioneta, la cual se determinó luego que se trataba de una Chevrolet S10 color negra, dijeron los informantes.
Las fuentes señalaron que la camioneta fue localizada cerca de las 4, estacionada frente a una vivienda situada en Gobernador Moyano al 500, de Río Gallegos, donde los efectivos montaron una vigilancia encubierta.
En esas circunstancias, los pesquisas advirtieron que tres personas salían de la casa y pretendían abordar la camioneta, por lo que al identificarlas determinaron que se trataba de Sosa, visiblemente golpeado, y dos de sus captores, los cuales fueron detenidos.
Al ser rescatada por la Policía, la víctima se desvaneció, por lo que fue llevada al Hospital Regional de la capital santacruceña donde los médicos constataron que presentaba lesiones por golpes en el cráneo, a raíz de lo cual quedó internado en observación.
Un jefe policial que participa de la investigación explicó a Télam que hasta el momento no está acreditado que durante el cautiverio los delincuentes hayan exigido dinero como rescate, como en un típico caso de secuestro extorsivo, por lo que la causa está caratulada como "privación ilegal de la libertad, amenazas y lesiones graves".
En ese sentido, el vocero consultado indicó que aguardan para las próximas horas que Sosa se recupere y dé su versión de los hechos.
En tanto, los dos detenidos tienen unos 30 años y ya estaban bajo investigación de la Policía y de la Justicia por otros hechos delictivos.
Los pesquisas no descartan que hayan intervenido más personas en la captura y esta tarde continuaban las diligencias en la casa de la calle Gobernador Moyano donde se cree que estuvo cautiva la víctima y que es propiedad de los familiares de los detenidos.
Y si bien tanto en la captura como en el rescate no se observó el uso de armas de fuegos, los investigadores creen que en algún momento de los hechos las emplearon.
La causa quedó a cargo de la jueza de Instrucción 3 de Río Gallegos, Rosana Suárez.