Sardá señaló que “pedimos a los ediles que se trate en la próxima sesión sobre tablas”, y detalló que se trata de “un plan corto de 60 días y tiene una reducción de intereses por pago contado”, que abarca “el débito y la tarjeta de crédito” y se estima que será “en el caso del impuesto inmobiliario hasta el 80% con un sistema de cuotas”. Además, los impuestos “con reducciones de intereses en otros porcentajes”.
Esta aplicación “entraría en vigencia a partir de la sanción expedida por el Concejo Deliberante”.
El secretario de Hacienda del Municipio destacó que “esta iniciativa es una buena oportunidad para que los vecinos regularicen su situación”, y recalcó que “el proyecto contempla una extensión en las cuotas en el caso de contribuyentes que tengan una situación económica complicada”. Además expresó que “en caso que el contribuyente no se acerque a regularizar su situación, el municipio seguirá el circuito correspondiente y en última instancia se transferirá cada caso al área de la asesoría legal”.
Deuda
“Hay una gran deuda histórica que viene de arrastre”, indicó Sardá y aclaró que “la deuda de los contribuyentes hacia el municipio por todo los conceptos: Patente, Ingresos Brutos, Inmobiliario, Tasas de Seguridad e Higiene es de más de 200 millones de pesos”.
El funcionario municipal manifestó que “es importante remarcar que muchos contribuyentes se han acercado con la intención de regularizar o de querer volver al circuito de pago; por ahí quieren y no pueden”, sin embargo “hay otras personas que pueden pero no quieren” y esto se puede observar “en el relevamiento que hemos realizado”, en el cual “hay barrios que tienen entre el 40 y 50 por ciento de morosidad, y son los barrios que tienen capacidad de pago”. Lo mismo pasa con lo referido al automotor “cuando se observa la antigüedad de la deuda de los vehículos que van desde el 2011 al 2015 y tienen una deuda significativa”, además “es importante la deuda de los autos de alta gama o nuevos y entonces esto da la pauta que hay gente que puede y no quiere”.
Sardá señaló que “pedimos a los ediles que se trate en la próxima sesión sobre tablas”, y detalló que se trata de “un plan corto de 60 días y tiene una reducción de intereses por pago contado”, que abarca “el débito y la tarjeta de crédito” y se estima que será “en el caso del impuesto inmobiliario hasta el 80% con un sistema de cuotas”. Además, los impuestos “con reducciones de intereses en otros porcentajes”.
Esta aplicación “entraría en vigencia a partir de la sanción expedida por el Concejo Deliberante”.
El secretario de Hacienda del Municipio destacó que “esta iniciativa es una buena oportunidad para que los vecinos regularicen su situación”, y recalcó que “el proyecto contempla una extensión en las cuotas en el caso de contribuyentes que tengan una situación económica complicada”. Además expresó que “en caso que el contribuyente no se acerque a regularizar su situación, el municipio seguirá el circuito correspondiente y en última instancia se transferirá cada caso al área de la asesoría legal”.
Deuda
“Hay una gran deuda histórica que viene de arrastre”, indicó Sardá y aclaró que “la deuda de los contribuyentes hacia el municipio por todo los conceptos: Patente, Ingresos Brutos, Inmobiliario, Tasas de Seguridad e Higiene es de más de 200 millones de pesos”.
El funcionario municipal manifestó que “es importante remarcar que muchos contribuyentes se han acercado con la intención de regularizar o de querer volver al circuito de pago; por ahí quieren y no pueden”, sin embargo “hay otras personas que pueden pero no quieren” y esto se puede observar “en el relevamiento que hemos realizado”, en el cual “hay barrios que tienen entre el 40 y 50 por ciento de morosidad, y son los barrios que tienen capacidad de pago”. Lo mismo pasa con lo referido al automotor “cuando se observa la antigüedad de la deuda de los vehículos que van desde el 2011 al 2015 y tienen una deuda significativa”, además “es importante la deuda de los autos de alta gama o nuevos y entonces esto da la pauta que hay gente que puede y no quiere”.