Trump aprueba asentamientos israelíes en Cisjordania
El futuro presidente de Estados Unidos, Donald Trump, trasladará la embajada de Tel Aviv a Jerusalén y no considera que los asentamientos israelíes en territorios palestinos sean un obstáculo para la paz, declaró hoy uno de sus asesores al canal del Ejército israelí.
"Trump no cree que haya que condenar las actividades de los asentamientos", dijo Jason Greenblatt en una entrevista difundida parcialmente por la agencia de noticias DPA.
"No son un obstáculo para la paz", agregó Greenblatt, y argumentó que el retiro de los asentamientos israelíes en la Franja de Gaza en 2005 no impidió que milicianos palestinos lanzaran desde allí cohetes contra la zona israelí, incluso aunque Israel sigue controlando las fronteras.
En los territorios palestinos viven más de medio millón de colonos judíos. Hasta ahora Estados Unidos consideraba que seguir construyendo asentamientos israelíes, que la comunidad internacional considera ilegales, era uno de los principales obstáculos a la búsqueda de una solución pacífica en Cercano Oriente.
Según Greenblatt, Trump "cree que Israel se encuentra en una situación muy difícil y que debe defenderse".
"No impondrá ninguna solución a Israel. La paz debe venir de las partes en conflicto", añadió. El republicano está dispuesto a ayudar, "pero no es su objetivo dictar la paz".
El asesor cree que Trump cumplirá con su promesa electoral de trasladar la embajada estadounidense de Tel Aviv a Jerusalén: "Lo dijo, así que lo hará".
"Él será diferente para Israel que todos los presidentes anteriores", afirmó Greenblatt, asesor de Trump en cuestiones relacionadas con ese país.
"Trump no cree que haya que condenar las actividades de los asentamientos", dijo Jason Greenblatt en una entrevista difundida parcialmente por la agencia de noticias DPA.
"No son un obstáculo para la paz", agregó Greenblatt, y argumentó que el retiro de los asentamientos israelíes en la Franja de Gaza en 2005 no impidió que milicianos palestinos lanzaran desde allí cohetes contra la zona israelí, incluso aunque Israel sigue controlando las fronteras.
En los territorios palestinos viven más de medio millón de colonos judíos. Hasta ahora Estados Unidos consideraba que seguir construyendo asentamientos israelíes, que la comunidad internacional considera ilegales, era uno de los principales obstáculos a la búsqueda de una solución pacífica en Cercano Oriente.
Según Greenblatt, Trump "cree que Israel se encuentra en una situación muy difícil y que debe defenderse".
"No impondrá ninguna solución a Israel. La paz debe venir de las partes en conflicto", añadió. El republicano está dispuesto a ayudar, "pero no es su objetivo dictar la paz".
El asesor cree que Trump cumplirá con su promesa electoral de trasladar la embajada estadounidense de Tel Aviv a Jerusalén: "Lo dijo, así que lo hará".
"Él será diferente para Israel que todos los presidentes anteriores", afirmó Greenblatt, asesor de Trump en cuestiones relacionadas con ese país.