Detenidos por robar en una chacra de Gaiman y liberados por dudas sobre el operativo policial

La jueza González determinó que no había elementos suficientes para dejarlos detenidos, como solicitaba la fiscal Encinas. El defensor Rey cuestionó a la Policía.

Defensor Sergio Rey. Fue clave.
28 NOV 2016 - 21:42 | Actualizado

La jueza de Trelew, Ivana González, dejó en libertad a dos sujetos detenidos el último viernes, presuntamente involucrados en un robo con armas en una chacra de Gaiman porque los indicios por los que se lo acusaban fueron insuficientes.

No obstante autorizar a la apertura de la investigación a la Fiscalía por el caso, la magistrada puso en duda la manera de obtener, por parte de la Policía, algunos elementos (como teléfonos celulares) que tendrían que ver con la causa y que generaron confusión y una fuerte réplica del defensor público, Sergio Rey.

La resolución de González sobrevino en el marco de una audiencia de control llevada adelante en los Tribunales de Trelew y relacionado a un robo doblemente agravado por uso de armas en despoblado y en banda.

El hecho, de confusas aunque graves características –sostuvo un parte de prensa oficial de la Fiscalía de Trelew-, tuvo lugar el viernes 25 de noviembre cerca de las 23,45 en una chacra de Gaiman, cuando su propietario se encontraba durmiendo, mientras dos hijas menores de edad miraban televisión.

El relato de la Fiscalía representada por Griselda Encinas se basó justamente en el testimonio de la víctima principal y en actuaciones que fueron remitidas por la Policía.

Atados y robados

Aquella noche, el hombre dueño de la vivienda fue sorprendido y se despertó cuando era atado con alambre, estimando que habían ingresado entre 5 y 7 personas a su casa. Las niñas fueron llevadas por uno de ellos portando arma también al dormitorio y allí, atadas de pies y manos, mientras se le requería al padre acerca de determinadas armas de fuego y de dinero.

Es así que se alzaron con un botín conformado por aproximadamente siete armas de diversos calibres y municiones, a la vez que se hicieron del dinero que la víctima tenía consigo, y luego se apoderaron también de una camioneta WV Amarok con la que escapan del sitio.

Dos detenidos

De acuerdo a lo informado por la Policía, fueron avisados al 101 cuando la víctima logró deshacerse de sus ataduras, y se inició una persecución de dos autos que salían de la chacra en cuestión, realizándose posteriormente un operativo cerrojo con personal de 28 de Julio, Gaiman y Dolavon.

A raíz de ello, dos personas fueron aprehendidas en sendos vehículos en un lugar cercano a La Angostura.

Es la propia persona afectada quien en sus declaraciones dijo reconocer a uno de ellos por la voz, ya que habrían actuado encapuchados, y cuando los patrulleros circulaban por caminos del lugar, es él mismo quien observó un teléfono celular en el piso y al tomarlo siente un llamado que activa escuchando que le dijeron: “Mono, te estamos esperando en la estación de servicio camino a Comodoro”, procediéndose al secuestro de este elemento.

El día 26 por la tarde se encontró la camioneta robada y se realizaron allanamientos en dos viviendas a partir de la huella dactilar encontrada en uno de los vehículos, y en ellos se incautaron armas y teléfonos. Quienes fueron allanados resultaron ser conocidos de los dos detenidos traídos a la audiencia de control.

Ante ello, la doctora Encinas solicitó la apertura de investigación y de acuerdo a las características graves de lo sucedido y la pena en expectativa pidió dos meses de prisión preventiva.

Defensa

Sin embargo, el defensor ey puso en crisis todo lo informado por la Policía, aludiendo también a que la Defensa no fue notificada debidamente de los hechos, tratándose de una situación grave.

Enfatizó que en todo lo detallado no dan los tiempos ni los espacios, preguntándose cómo pudo la víctima determinar que los intrusos iban en dos autos cuando se encontraba durmiendo, agregando que el resto de las evidencias presentadas no llegan a fundamentarse como elementos de convicción suficientes.

A su vez, puso en duda el hallazgo del teléfono que sonó, dado que era el celular de uno de sus clientes que en realidad se encontraba en su vehículo, una camioneta Ford Eco Sport, al momento de ser detenido.

Esto también fue ratificado por el propio imputado, quien indicó que al momento de la detención se lo requisó y allí habían dos teléfonos, uno de ellos perteneciente a su hija, preguntándose cómo después apareció en la chacra afectada, si ellos fueron detenidos cerca de Dolavon y no a cinco kilómetros del lugar, como informó la Policía.

También el defensor ofreció registros donde podría verse a sus clientes en aquella noche tomando cerveza en un negocio de Trelew, pidiendo la libertad al estimar que no tienen vínculos ni relación con lo sucedido.

Resolución

La doctora Ivana González dijo que el indicio principal es que los vehículos perseguidos salían de la chacra, de acuerdo a la información policial, aunque dejó entrever que la cantidad de elementos presentados puede haber llevado a generar una serie de confusiones, expresando -a la vez- dudas sobre las formas en que fueron encontrados.

De todas formas, el Ministerio Público Fiscal deberá confirmar la relación que guardan esos indicios con los hechos, para lo cual ha solicitado diversas medidas, como ruedas de reconocimiento y las pericias correspondientes para con las armas y los teléfonos secuestrados, como así también el registro de cámaras de seguridad.

Consideró la jueza que las evidencias no son insuficientes para abrir la investigación, procediendo a dejar autorizada su apertura, pero remarcó que sí son insuficientes para resolver medidas gravosas como la prisión, determinando que los dos imputados deberán presentarse a firmar el libro de la Oficina de Ejecución tres veces por semana y disponiendo también la prohibición de acercamiento a la a la zona donde se encuentra el domicilio y a las personas perjudicadas.

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Defensor Sergio Rey. Fue clave.
28 NOV 2016 - 21:42

La jueza de Trelew, Ivana González, dejó en libertad a dos sujetos detenidos el último viernes, presuntamente involucrados en un robo con armas en una chacra de Gaiman porque los indicios por los que se lo acusaban fueron insuficientes.

No obstante autorizar a la apertura de la investigación a la Fiscalía por el caso, la magistrada puso en duda la manera de obtener, por parte de la Policía, algunos elementos (como teléfonos celulares) que tendrían que ver con la causa y que generaron confusión y una fuerte réplica del defensor público, Sergio Rey.

La resolución de González sobrevino en el marco de una audiencia de control llevada adelante en los Tribunales de Trelew y relacionado a un robo doblemente agravado por uso de armas en despoblado y en banda.

El hecho, de confusas aunque graves características –sostuvo un parte de prensa oficial de la Fiscalía de Trelew-, tuvo lugar el viernes 25 de noviembre cerca de las 23,45 en una chacra de Gaiman, cuando su propietario se encontraba durmiendo, mientras dos hijas menores de edad miraban televisión.

El relato de la Fiscalía representada por Griselda Encinas se basó justamente en el testimonio de la víctima principal y en actuaciones que fueron remitidas por la Policía.

Atados y robados

Aquella noche, el hombre dueño de la vivienda fue sorprendido y se despertó cuando era atado con alambre, estimando que habían ingresado entre 5 y 7 personas a su casa. Las niñas fueron llevadas por uno de ellos portando arma también al dormitorio y allí, atadas de pies y manos, mientras se le requería al padre acerca de determinadas armas de fuego y de dinero.

Es así que se alzaron con un botín conformado por aproximadamente siete armas de diversos calibres y municiones, a la vez que se hicieron del dinero que la víctima tenía consigo, y luego se apoderaron también de una camioneta WV Amarok con la que escapan del sitio.

Dos detenidos

De acuerdo a lo informado por la Policía, fueron avisados al 101 cuando la víctima logró deshacerse de sus ataduras, y se inició una persecución de dos autos que salían de la chacra en cuestión, realizándose posteriormente un operativo cerrojo con personal de 28 de Julio, Gaiman y Dolavon.

A raíz de ello, dos personas fueron aprehendidas en sendos vehículos en un lugar cercano a La Angostura.

Es la propia persona afectada quien en sus declaraciones dijo reconocer a uno de ellos por la voz, ya que habrían actuado encapuchados, y cuando los patrulleros circulaban por caminos del lugar, es él mismo quien observó un teléfono celular en el piso y al tomarlo siente un llamado que activa escuchando que le dijeron: “Mono, te estamos esperando en la estación de servicio camino a Comodoro”, procediéndose al secuestro de este elemento.

El día 26 por la tarde se encontró la camioneta robada y se realizaron allanamientos en dos viviendas a partir de la huella dactilar encontrada en uno de los vehículos, y en ellos se incautaron armas y teléfonos. Quienes fueron allanados resultaron ser conocidos de los dos detenidos traídos a la audiencia de control.

Ante ello, la doctora Encinas solicitó la apertura de investigación y de acuerdo a las características graves de lo sucedido y la pena en expectativa pidió dos meses de prisión preventiva.

Defensa

Sin embargo, el defensor ey puso en crisis todo lo informado por la Policía, aludiendo también a que la Defensa no fue notificada debidamente de los hechos, tratándose de una situación grave.

Enfatizó que en todo lo detallado no dan los tiempos ni los espacios, preguntándose cómo pudo la víctima determinar que los intrusos iban en dos autos cuando se encontraba durmiendo, agregando que el resto de las evidencias presentadas no llegan a fundamentarse como elementos de convicción suficientes.

A su vez, puso en duda el hallazgo del teléfono que sonó, dado que era el celular de uno de sus clientes que en realidad se encontraba en su vehículo, una camioneta Ford Eco Sport, al momento de ser detenido.

Esto también fue ratificado por el propio imputado, quien indicó que al momento de la detención se lo requisó y allí habían dos teléfonos, uno de ellos perteneciente a su hija, preguntándose cómo después apareció en la chacra afectada, si ellos fueron detenidos cerca de Dolavon y no a cinco kilómetros del lugar, como informó la Policía.

También el defensor ofreció registros donde podría verse a sus clientes en aquella noche tomando cerveza en un negocio de Trelew, pidiendo la libertad al estimar que no tienen vínculos ni relación con lo sucedido.

Resolución

La doctora Ivana González dijo que el indicio principal es que los vehículos perseguidos salían de la chacra, de acuerdo a la información policial, aunque dejó entrever que la cantidad de elementos presentados puede haber llevado a generar una serie de confusiones, expresando -a la vez- dudas sobre las formas en que fueron encontrados.

De todas formas, el Ministerio Público Fiscal deberá confirmar la relación que guardan esos indicios con los hechos, para lo cual ha solicitado diversas medidas, como ruedas de reconocimiento y las pericias correspondientes para con las armas y los teléfonos secuestrados, como así también el registro de cámaras de seguridad.

Consideró la jueza que las evidencias no son insuficientes para abrir la investigación, procediendo a dejar autorizada su apertura, pero remarcó que sí son insuficientes para resolver medidas gravosas como la prisión, determinando que los dos imputados deberán presentarse a firmar el libro de la Oficina de Ejecución tres veces por semana y disponiendo también la prohibición de acercamiento a la a la zona donde se encuentra el domicilio y a las personas perjudicadas.


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