Grave descompensación de una abuela en huelga de hambre en Trelew

Una mujer reclama ante una jueza y acusa que su nieto es tratado salvajemente por la madre en Trelew.

Dramático. La abuela de un nene golpeado y una peligrosa descompensación frente al Juzgado de Familia.
17 DIC 2016 - 21:33 | Actualizado

Una joven abuela de 54 años sufrió esta semana una grave descompensación. Fue en el marco de una huelga de hambre que determinó iniciar pese al intenso calor, frente al Juzgado de Familia de la calle Paraguay de Trelew.

El grave reclamo obligó a la mujer a instalarse frente a esa dependencia judicial, ya que reclamó en varias instancias por la seguridad e integridad física de su nieto de 10 años. Hay denuncias que aseguran que al nene le pega su madre y ha presentado signos de violencia, le contó la señora Demichelis a Jornada, mientras se recomponía en el suelo. La Policía la auxilió ante un severo cuadro de deshidratación. No tenía buen pulso y su aspecto generó una enorme preocupación.

Minutos después, una ambulancia con un equipo de médicos y enfermeros la asistió cerca de las 17 cuando Trelew era azotado por una temperatura que a esa hora trepaba a los 36 grados centígrados.

Antes de que los médicos procedieran, la mujer llegó a decirle a este diario que “no voy a parar hasta que a mi nietito lo restituyan al padre. Que la jueza sepa lo que pasa”. #
 

Las más leídas

Dramático. La abuela de un nene golpeado y una peligrosa descompensación frente al Juzgado de Familia.
17 DIC 2016 - 21:33

Una joven abuela de 54 años sufrió esta semana una grave descompensación. Fue en el marco de una huelga de hambre que determinó iniciar pese al intenso calor, frente al Juzgado de Familia de la calle Paraguay de Trelew.

El grave reclamo obligó a la mujer a instalarse frente a esa dependencia judicial, ya que reclamó en varias instancias por la seguridad e integridad física de su nieto de 10 años. Hay denuncias que aseguran que al nene le pega su madre y ha presentado signos de violencia, le contó la señora Demichelis a Jornada, mientras se recomponía en el suelo. La Policía la auxilió ante un severo cuadro de deshidratación. No tenía buen pulso y su aspecto generó una enorme preocupación.

Minutos después, una ambulancia con un equipo de médicos y enfermeros la asistió cerca de las 17 cuando Trelew era azotado por una temperatura que a esa hora trepaba a los 36 grados centígrados.

Antes de que los médicos procedieran, la mujer llegó a decirle a este diario que “no voy a parar hasta que a mi nietito lo restituyan al padre. Que la jueza sepa lo que pasa”. #
 


NOTICIAS RELACIONADAS