La consultora Ecolatina prevé una recuperación del consumo

Un informe de Ecolatina prevé para el 2017 una recuperación del consumo, y considera que su magnitud dependerá del resultado de las paritarias y la relación de los sueldos y la inflación.

20 FEB 2017 - 13:43 | Actualizado

"Tras la contracción observada el año pasado, esperamos una recuperación del consumo en 2017. La magnitud de dicha mejora va a depender principalmente del resultado de la carrera entre precios y salarios. La desaceleración de la inflación está afectada por dos fuerzas contrapuestas: la fuerte suba de precios regulados y la apreciación cambiaria", sostiene el informe.

Señala el estudio que a lo largo de 2016 "el gasto de las familias mostró un importante deterioro: conforme a los datos del Indec, en los primeros nueve meses el consumo privado acumuló una baja de 1,2%".

Al respecto, menciona que "esta contracción se explica por la aceleración inflacionaria que no pudo ser acompañada por el salario, y por el deterioro del mercado laboral (destrucción de empleo privado formal, reducción de horas extras y suspensiones)".

Cita que "en lo que respecta a los rubros, de acuerdo al relevamiento de Kantar Worldpanel el consumo masivo exhibió una contracción de 4% el año pasado".

A la hora de racionalizar el consumo, las familias priorizaron los bienes de mayor necesidad, y así fue como, de acuerdo con la información de CAME de locales minoristas, las ventas de alimentos y bebidas (2,6% anual) o de farmacias (3%) mostraron bajas más moderadas que otros productos de menor necesidad como, por ejemplo, los de bijouterie (12,4% en el año), cosmética (10%).

En bienes durables hubo comportamientos totalmente opuestos. Por un lado, las ventas de productos de electrodomésticos estuvieron entre las que más cayeron (14% anual, según datos de comercios tradicionales de CAME) y, por el otro, el patentamiento de automóviles fue uno de los pocos rubros que mostraron un incremento durante 2016 (10,2% en el año, de acuerdo con las estadísticas de ACARA).

Mientras que los hogares de ingreso alto no disminuyeron su consumo masivo en relación con el nivel de 2015, los sectores más vulnerables registraron una contracción del orden del 8% anual en el volumen de compras realizado, y del 5% en el caso de aquellos de ingreso medio.

"Las expectativas sobre el consumo para este año son más alentadoras respecto del 2016. Por un lado, hay sectores cuyos ingresos están atados a la inflación pasada, como son las jubilaciones y las asignaciones familiares. Así, en la medida en que los precios desaceleren su ritmo de crecimiento, dichos hogares exhibirán una mejora real en su haber. Dado que se trata de los sectores de menores ingresos, es probable que gran parte de estas ganancias se destinen al consumo", estima el informe de Ecolatina.

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20 FEB 2017 - 13:43

"Tras la contracción observada el año pasado, esperamos una recuperación del consumo en 2017. La magnitud de dicha mejora va a depender principalmente del resultado de la carrera entre precios y salarios. La desaceleración de la inflación está afectada por dos fuerzas contrapuestas: la fuerte suba de precios regulados y la apreciación cambiaria", sostiene el informe.

Señala el estudio que a lo largo de 2016 "el gasto de las familias mostró un importante deterioro: conforme a los datos del Indec, en los primeros nueve meses el consumo privado acumuló una baja de 1,2%".

Al respecto, menciona que "esta contracción se explica por la aceleración inflacionaria que no pudo ser acompañada por el salario, y por el deterioro del mercado laboral (destrucción de empleo privado formal, reducción de horas extras y suspensiones)".

Cita que "en lo que respecta a los rubros, de acuerdo al relevamiento de Kantar Worldpanel el consumo masivo exhibió una contracción de 4% el año pasado".

A la hora de racionalizar el consumo, las familias priorizaron los bienes de mayor necesidad, y así fue como, de acuerdo con la información de CAME de locales minoristas, las ventas de alimentos y bebidas (2,6% anual) o de farmacias (3%) mostraron bajas más moderadas que otros productos de menor necesidad como, por ejemplo, los de bijouterie (12,4% en el año), cosmética (10%).

En bienes durables hubo comportamientos totalmente opuestos. Por un lado, las ventas de productos de electrodomésticos estuvieron entre las que más cayeron (14% anual, según datos de comercios tradicionales de CAME) y, por el otro, el patentamiento de automóviles fue uno de los pocos rubros que mostraron un incremento durante 2016 (10,2% en el año, de acuerdo con las estadísticas de ACARA).

Mientras que los hogares de ingreso alto no disminuyeron su consumo masivo en relación con el nivel de 2015, los sectores más vulnerables registraron una contracción del orden del 8% anual en el volumen de compras realizado, y del 5% en el caso de aquellos de ingreso medio.

"Las expectativas sobre el consumo para este año son más alentadoras respecto del 2016. Por un lado, hay sectores cuyos ingresos están atados a la inflación pasada, como son las jubilaciones y las asignaciones familiares. Así, en la medida en que los precios desaceleren su ritmo de crecimiento, dichos hogares exhibirán una mejora real en su haber. Dado que se trata de los sectores de menores ingresos, es probable que gran parte de estas ganancias se destinen al consumo", estima el informe de Ecolatina.


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