Copa Argentina: Una difícil misión para seguir

Jorge Newbery de Comodoro Rivadavia se juega sus chances de pasar de fase, obligado por las circunstancias y con una dura realidad: levantar un 0-3 y evitar que Sol de Mayo le convierta. El valor adicional del gol de visitante le juega a favor tanto o más que el resultado puesto en Viedma.

En la ida, jugada en Viedma, el “Aeronauta” fue goleado. El ganador de la llave jugará ante Bella Vista.
04 MAR 2017 - 20:28 | Actualizado

El juego revancha no tiene demasiados caminos para elegir: se debe ganar o ganar. Y por una diferencia que ya se plantea como difícil. Pero no imposible. El “Lobo” ha dado muestras sobradas de su capacidad de recuperación ante la adversidad y la presión que es capaz de generar en su cancha.

Luis Murúa y sus jugadores no tienen un plan “B”. Debe ganar primero por 4 goles de luz y clausurar su arco para que una eventual conquista visitante, no lo termine de frustrar. Seguir en la Copa Argentina es lo único que cuenta para un Newbery que se cree capaz de la hazaña.

Suspendido Rodrigo Cárcamo, la alternativa más firme es la de cambiar el dibujo táctico. Y en la necesidad, un trío defensivo parece ser lo que cuenta. Un defensor menos permitirá sumar volantes con llegada; copar el territorio y buscar el arco casi como una obsesión desde el primer minuto y hasta el último.

El equipo comodorense no mostró en la ida, su mejor versión; sufrió ausencias obligadas y terminó superado en cuanto a lo territorial, hundido por un gol tempranero; la inferioridad numérica y por una marea de tarjetas amarillas que dejaron en capilla a medio equipo.

Inexpresivo en ataque y desbordado por un rival práctico en ofensiva, el “Lobo” sufrió más allá de los mismos números y llega a la revancha, conciente de lo que se debe corregir. La apuesta será atacar con inteligencia, utilizar los espacios y hacer valer la casi segura supremacía en ataque. Con Villegas y Videla comprometidos más Eric Castro y la muy posible inclusión de Jorge Aynol puede haber lugar para el milagro. Los 32avos. de final de la Copa Argentina, segunda fase regional; admiten solamente a uno. Y desde las 17 será el neuquino Javier Obreque quien imparta justicia en noventa minutos determinantes, irreversibles para la suerte de ambos conjuntos.

Sol de Mayo es un rival que le sienta bien. Newbery ya lo dejó afuera en cuartos de final del Federal B con un triunfo en la capital rionegrina incluído.

Y hoy el equipo de Adán Valdebenito asume que tiene medio boleto y deberá cederle el peso del protagonismo a su rival, pero siempre dispuesto a aprovechar las oportunidades que se presenten sin replegarse, atento a la contra y listo para cerrar el círculo.

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En la ida, jugada en Viedma, el “Aeronauta” fue goleado. El ganador de la llave jugará ante Bella Vista.
04 MAR 2017 - 20:28

El juego revancha no tiene demasiados caminos para elegir: se debe ganar o ganar. Y por una diferencia que ya se plantea como difícil. Pero no imposible. El “Lobo” ha dado muestras sobradas de su capacidad de recuperación ante la adversidad y la presión que es capaz de generar en su cancha.

Luis Murúa y sus jugadores no tienen un plan “B”. Debe ganar primero por 4 goles de luz y clausurar su arco para que una eventual conquista visitante, no lo termine de frustrar. Seguir en la Copa Argentina es lo único que cuenta para un Newbery que se cree capaz de la hazaña.

Suspendido Rodrigo Cárcamo, la alternativa más firme es la de cambiar el dibujo táctico. Y en la necesidad, un trío defensivo parece ser lo que cuenta. Un defensor menos permitirá sumar volantes con llegada; copar el territorio y buscar el arco casi como una obsesión desde el primer minuto y hasta el último.

El equipo comodorense no mostró en la ida, su mejor versión; sufrió ausencias obligadas y terminó superado en cuanto a lo territorial, hundido por un gol tempranero; la inferioridad numérica y por una marea de tarjetas amarillas que dejaron en capilla a medio equipo.

Inexpresivo en ataque y desbordado por un rival práctico en ofensiva, el “Lobo” sufrió más allá de los mismos números y llega a la revancha, conciente de lo que se debe corregir. La apuesta será atacar con inteligencia, utilizar los espacios y hacer valer la casi segura supremacía en ataque. Con Villegas y Videla comprometidos más Eric Castro y la muy posible inclusión de Jorge Aynol puede haber lugar para el milagro. Los 32avos. de final de la Copa Argentina, segunda fase regional; admiten solamente a uno. Y desde las 17 será el neuquino Javier Obreque quien imparta justicia en noventa minutos determinantes, irreversibles para la suerte de ambos conjuntos.

Sol de Mayo es un rival que le sienta bien. Newbery ya lo dejó afuera en cuartos de final del Federal B con un triunfo en la capital rionegrina incluído.

Y hoy el equipo de Adán Valdebenito asume que tiene medio boleto y deberá cederle el peso del protagonismo a su rival, pero siempre dispuesto a aprovechar las oportunidades que se presenten sin replegarse, atento a la contra y listo para cerrar el círculo.


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