Brasil: también Cardoso está sospechado por caso Odebrecht

El ex presidente Fernando Henrique Cardoso (1995-2002) será investigado por recibir supuestamente dinero sucio de la empresa Odebrecht para sus campañas presidenciales, determinó el Supremo Tribunal Federal (STF), informaron hoy fuentes judiciales.

12 ABR 2017 - 10:21 | Actualizado

Cardoso se suma así a otros ex mandatarios que deben ser investigados o ya lo están en el ámbito de la Operación Lava Jato, en distintos niveles, como Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010), Dilma Rousseff (2010-2016), Fernando Collor de Mello (1990-1992) y José Sarney (1985-1990).
Emilio Odebrecht, patriarca del grupo de ingeniería que admitió haber corrompido al sistema político de Brasil desde hace seis décadas, dijo en su delación premiada que hubo "ventajas indebidas" para Cardoso en las campañas vencedoras de 1994 y 1998 del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB).
El juez de la corte Edson Fachin envió anoche el mayor pedido de investigaciones a la dirigencia política hecho en la historia de Brasil en base a la delación de 77 ejecutivos de Odebrecht, la empresa que se transformó en el eje del escándalo del Petrolao descubierto por la Operación Lava Jato con casos de corrupción en Petrobras.
El ex presidente Cardoso, quien había hecho recientemente un intento por separar corrupción personal de la tradicional "caja 2" de recaudación de campaña electoral, será investigado por un juez de San Pablo, donde tiene su residencia.
Collor de Mello es senador y fue destituido de la jefatura del Estado en 1992 al cabo de un juicio político por un escándalo de corrupción.
El caso de Lula, el único de los ex presidentes que tiene intenciones de ser candidato en 2018, se amplió: a las cinco causas abiertas, fue remitido por el ministro Fachin la apertura de una investigación para determinar nuevas delaciones de Odebrecht.
Una de ellas habla de negociaciones para beneficiar en los negocios para uno de los hijos del ex mandatario, creador de una liga de fútbol americano en Brasil, y otra es la refacción que hizo Odebrecht de una quinta propiedad de amigos de Lula en Atibaia, interior del estado de San Pablo.
Lula también será investigado por sus negociaciones para viabilizar la construcción del Puerto de Mariel, en Cuba, realizado por Odebrecht con fondos del banco de fomento brasileño BNDES.
Todos estos casos fueron remitidos al juez de primera instancia Sergio Moro, que tramita los casos de personas sin fueros.
Rousseff fue citada por un ejecutivo de Odebrecht en forma indirecta, ya que uno de sus colaboradores más cercanos habría recibido unos 100 mil dólares de sobornos de la empresa de ingeniería.
Sarney ya estaba siendo investigado por supuestamente participar de una trama para derrocar a Rousseff e instalar a Michel Temer en el poder, en el marco de escuchas telefónicas hechas por un arrepentido del Partido del Movimiento de la Democracia del Brasil (PMDB), Sergio Machado ex titular de la estatal Transpetro.
Temer, si bien está citado por pedir 3 millones de dólares a Odebrecht para financiar campañas en forma clandestina, no será investigado porque el juez de la corte Fachin entendió que no puede someterse a una causa de un episodio anterior a su mandato presidencial.
Será investigado cuando deje el cargo, que vence el 31 de diciembre de 2018.
Doce gobernadores, 8 ministros del gobierno y más de 70 parlamentarios comenzaron a ser investigados a raíz de la delación de Odebrecht.
La empresa hizo un acuerdo para reducir daños económicos y permitir la liberación de Marcelo Odebrecht, condenado a 19 años de prisión en primera instancia por Moro, cuya pena podría cumplirse en libertad a partir de diciembre próximo.

12 ABR 2017 - 10:21

Cardoso se suma así a otros ex mandatarios que deben ser investigados o ya lo están en el ámbito de la Operación Lava Jato, en distintos niveles, como Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010), Dilma Rousseff (2010-2016), Fernando Collor de Mello (1990-1992) y José Sarney (1985-1990).
Emilio Odebrecht, patriarca del grupo de ingeniería que admitió haber corrompido al sistema político de Brasil desde hace seis décadas, dijo en su delación premiada que hubo "ventajas indebidas" para Cardoso en las campañas vencedoras de 1994 y 1998 del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB).
El juez de la corte Edson Fachin envió anoche el mayor pedido de investigaciones a la dirigencia política hecho en la historia de Brasil en base a la delación de 77 ejecutivos de Odebrecht, la empresa que se transformó en el eje del escándalo del Petrolao descubierto por la Operación Lava Jato con casos de corrupción en Petrobras.
El ex presidente Cardoso, quien había hecho recientemente un intento por separar corrupción personal de la tradicional "caja 2" de recaudación de campaña electoral, será investigado por un juez de San Pablo, donde tiene su residencia.
Collor de Mello es senador y fue destituido de la jefatura del Estado en 1992 al cabo de un juicio político por un escándalo de corrupción.
El caso de Lula, el único de los ex presidentes que tiene intenciones de ser candidato en 2018, se amplió: a las cinco causas abiertas, fue remitido por el ministro Fachin la apertura de una investigación para determinar nuevas delaciones de Odebrecht.
Una de ellas habla de negociaciones para beneficiar en los negocios para uno de los hijos del ex mandatario, creador de una liga de fútbol americano en Brasil, y otra es la refacción que hizo Odebrecht de una quinta propiedad de amigos de Lula en Atibaia, interior del estado de San Pablo.
Lula también será investigado por sus negociaciones para viabilizar la construcción del Puerto de Mariel, en Cuba, realizado por Odebrecht con fondos del banco de fomento brasileño BNDES.
Todos estos casos fueron remitidos al juez de primera instancia Sergio Moro, que tramita los casos de personas sin fueros.
Rousseff fue citada por un ejecutivo de Odebrecht en forma indirecta, ya que uno de sus colaboradores más cercanos habría recibido unos 100 mil dólares de sobornos de la empresa de ingeniería.
Sarney ya estaba siendo investigado por supuestamente participar de una trama para derrocar a Rousseff e instalar a Michel Temer en el poder, en el marco de escuchas telefónicas hechas por un arrepentido del Partido del Movimiento de la Democracia del Brasil (PMDB), Sergio Machado ex titular de la estatal Transpetro.
Temer, si bien está citado por pedir 3 millones de dólares a Odebrecht para financiar campañas en forma clandestina, no será investigado porque el juez de la corte Fachin entendió que no puede someterse a una causa de un episodio anterior a su mandato presidencial.
Será investigado cuando deje el cargo, que vence el 31 de diciembre de 2018.
Doce gobernadores, 8 ministros del gobierno y más de 70 parlamentarios comenzaron a ser investigados a raíz de la delación de Odebrecht.
La empresa hizo un acuerdo para reducir daños económicos y permitir la liberación de Marcelo Odebrecht, condenado a 19 años de prisión en primera instancia por Moro, cuya pena podría cumplirse en libertad a partir de diciembre próximo.


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