Brutal humillación a una chica: la trompeó, la orinó y luego la filmó

Un joven de 23 años fue detenido acusado de golpear salvajemente a su pareja de 19 a la que además, filmó mientras la orinaba, en una casa del Barrio Centro de Santiago del Estero.

El incidente que investiga la Comisaría 41, excedería los patrones convencionales de la violencia de género y trasuntaría destellos inequívocos de perversidad. (Archivo).
26 MAY 2017 - 19:12 | Actualizado

El incidente que investiga la Comisaría 41, excedería los patrones convencionales de la violencia de género y trasuntaría destellos inequívocos de perversidad, de acuerdo con quienes llevan adelante la instrucción de la denuncia.
Según la investigación que impulsa la fiscal Carola Olivera, la policía acudió a un hogar del Barrio Centro y detuvo a un muchacho de 23 años a quien minutos antes, su pareja lo había denunciado, acusándolo de someterla a un cruel castigo y humillaciones.
El disparador habría sido un incidente por celos.
Siempre en función de la investigación, el joven la habría acusado de infidelidad y le exigía que le revelara la clave del celular para indagar en los whatsApp.
Como la adolescente se negó, el agresor la derribó a trompadas y ya en el piso, la orinó y acto seguido, encendió el celular y la filmó, publica el diario El Liberal.
"Ya vas a ver, todo esto lo subiré a internet y también se lo pasaré a tus amigos por WhatsApp", la amenazó.
"No es la primera vez que me pega; ya lo hizo antes, pero nunca así", habría subrayado la adolescente a las autoridades policiales.
Después de la presentación, la Fiscalía condujo a la adolescente ante los médicos Mamaní y Mitoni, quienes habrían confirmado las agresiones físicas.
La denunciante manifestó que tiempo atrás el agresor la alejó de su madre: "Es más, me amenazó que donde la vea le va a prender fuego a ella también", ahondó en su declaración testimonial.
Ahora, la Fiscalía pidió un informe socioambiental y pericias psicológicas.
"Lesiones agravadas por el vínculo", serían los cargos por los cuales el individuo afronta un proceso de imprevisible final.
Generaría interés en los investigadores el empecinamiento en humillarla, orinándola y filmándola.
Allí se focaliza la impronta de la investigación, ante la posibilidad de que la crisis solo fuese el disparador para liberar la real personalidad del supuesto agresor.
Hasta tanto sean elevados los informes, el hombre permanecerá detenido en un organismo de seguridad, bien lejos de la adolescente apaleada.
(Noticias Argentinas).

Enterate de las noticias de POLICIALES a través de nuestro newsletter

Anotate para recibir las noticias más importantes de esta sección.

Te podés dar de baja en cualquier momento con un solo clic.
El incidente que investiga la Comisaría 41, excedería los patrones convencionales de la violencia de género y trasuntaría destellos inequívocos de perversidad. (Archivo).
26 MAY 2017 - 19:12

El incidente que investiga la Comisaría 41, excedería los patrones convencionales de la violencia de género y trasuntaría destellos inequívocos de perversidad, de acuerdo con quienes llevan adelante la instrucción de la denuncia.
Según la investigación que impulsa la fiscal Carola Olivera, la policía acudió a un hogar del Barrio Centro y detuvo a un muchacho de 23 años a quien minutos antes, su pareja lo había denunciado, acusándolo de someterla a un cruel castigo y humillaciones.
El disparador habría sido un incidente por celos.
Siempre en función de la investigación, el joven la habría acusado de infidelidad y le exigía que le revelara la clave del celular para indagar en los whatsApp.
Como la adolescente se negó, el agresor la derribó a trompadas y ya en el piso, la orinó y acto seguido, encendió el celular y la filmó, publica el diario El Liberal.
"Ya vas a ver, todo esto lo subiré a internet y también se lo pasaré a tus amigos por WhatsApp", la amenazó.
"No es la primera vez que me pega; ya lo hizo antes, pero nunca así", habría subrayado la adolescente a las autoridades policiales.
Después de la presentación, la Fiscalía condujo a la adolescente ante los médicos Mamaní y Mitoni, quienes habrían confirmado las agresiones físicas.
La denunciante manifestó que tiempo atrás el agresor la alejó de su madre: "Es más, me amenazó que donde la vea le va a prender fuego a ella también", ahondó en su declaración testimonial.
Ahora, la Fiscalía pidió un informe socioambiental y pericias psicológicas.
"Lesiones agravadas por el vínculo", serían los cargos por los cuales el individuo afronta un proceso de imprevisible final.
Generaría interés en los investigadores el empecinamiento en humillarla, orinándola y filmándola.
Allí se focaliza la impronta de la investigación, ante la posibilidad de que la crisis solo fuese el disparador para liberar la real personalidad del supuesto agresor.
Hasta tanto sean elevados los informes, el hombre permanecerá detenido en un organismo de seguridad, bien lejos de la adolescente apaleada.
(Noticias Argentinas).


NOTICIAS RELACIONADAS