Hasta el lugar, ubicado en la calle San Martín al 1.000, casi esquina Ramón y Cajal, llegó un solitario delincuente con su rostro descubierto, con gorra y una pistola. Con ella, amenazó a quien atendía para que le diera el dinero de la caja registradora. Al momento del episodio, había dos jóvenes, una de ellos de sexo femenino.
Afortunadamente, el heladero no resultó lesionado. Tras las amenazas el delincuente se alzó con la suma de 3 mil pesos, según confirmaron fuentes de la Policía.
Intervino personal policial de la Seccional Distrito Tercera. Los investigadores recababan información respecto de las características físicas del delincuente, quien habría actuado con anteojos con aumento.
Hasta el lugar, ubicado en la calle San Martín al 1.000, casi esquina Ramón y Cajal, llegó un solitario delincuente con su rostro descubierto, con gorra y una pistola. Con ella, amenazó a quien atendía para que le diera el dinero de la caja registradora. Al momento del episodio, había dos jóvenes, una de ellos de sexo femenino.
Afortunadamente, el heladero no resultó lesionado. Tras las amenazas el delincuente se alzó con la suma de 3 mil pesos, según confirmaron fuentes de la Policía.
Intervino personal policial de la Seccional Distrito Tercera. Los investigadores recababan información respecto de las características físicas del delincuente, quien habría actuado con anteojos con aumento.