Schiaretti reconoció la derrota en Córdoba, donde se impone Cambiemos
Cambiemos le ganaría al peronismo cordobés por alrededor de 10 puntos, en un resultado que ratifica el acompañamiento de los votantes a Macri. En 2015 la diferencia obtenida en el segundo distrito del país lo convirtió en Presidente. En un gesto inédito, 90 minutos antes de que se empezaran a dar los resultados oficiales, el gobernador Juan Schiaretti admitió la derrota.
Con la habitual campera roja que usa en las elecciones, el cordobés -uno de los impulsores y vocero de la "liga de gobernadores"- adjudicó la derrota a que "evidentemente la polarización planteada por el gobierno nacional entre el presidente Macri y el kirchnerismo le ha dado resultado".
Para no hablar de diferencias de porcentajes, optó por decir que el peronismo mantendría las tres bancas que tiene en el Congreso si el resultado de hoy se repite en octubre mientras que el kirchnerismo resignaría una de las dos a manos de Cambiemos.
"Seguiremos siempre defendiendo a nuestra provincia. Vienen desde la provincia de Buenos Aires a querer llevarnos 7.000 millones de pesos para ponerlos en el conurbano", insistió con el que fue uno de sus latiguillos de campaña. "Son los mismos que reciben 79.000 millones de pesos de subsidios junto con la Capital Federal y esto es absolutamente injusto".
Reiteró la necesidad de un "acuerdo social, político y económico" después de octubre y pidió a los votantes que "comprendan" que en las legislativas no se plebiscitan las gestiones nacional o provincial.
El ex gobernador José Manuel de la Sota no estuvo en el búnker del peronismo, de la misma manera que apenas se lo vio durante la campaña pese a su promesa de que trabajaría con los candidatos.
En el hotel donde Cambiemos espera los resultados, el más eufórico es el intendente Ramón Mestre -quien junto a su hermano Diego, quinto en la lista- ya piensa en el 2019 y la elección a gobernador.
"Córdoba apuesta al cambio y aporta para que el presidente Macri siga llevándolo adelante. Este es un claro mensaje de lo que viene en la provincia, creemos que este resultado se va a mantener, estamos expectantes", dijo.
Fuente: diarioLa Nación.
Con la habitual campera roja que usa en las elecciones, el cordobés -uno de los impulsores y vocero de la "liga de gobernadores"- adjudicó la derrota a que "evidentemente la polarización planteada por el gobierno nacional entre el presidente Macri y el kirchnerismo le ha dado resultado".
Para no hablar de diferencias de porcentajes, optó por decir que el peronismo mantendría las tres bancas que tiene en el Congreso si el resultado de hoy se repite en octubre mientras que el kirchnerismo resignaría una de las dos a manos de Cambiemos.
"Seguiremos siempre defendiendo a nuestra provincia. Vienen desde la provincia de Buenos Aires a querer llevarnos 7.000 millones de pesos para ponerlos en el conurbano", insistió con el que fue uno de sus latiguillos de campaña. "Son los mismos que reciben 79.000 millones de pesos de subsidios junto con la Capital Federal y esto es absolutamente injusto".
Reiteró la necesidad de un "acuerdo social, político y económico" después de octubre y pidió a los votantes que "comprendan" que en las legislativas no se plebiscitan las gestiones nacional o provincial.
El ex gobernador José Manuel de la Sota no estuvo en el búnker del peronismo, de la misma manera que apenas se lo vio durante la campaña pese a su promesa de que trabajaría con los candidatos.
En el hotel donde Cambiemos espera los resultados, el más eufórico es el intendente Ramón Mestre -quien junto a su hermano Diego, quinto en la lista- ya piensa en el 2019 y la elección a gobernador.
"Córdoba apuesta al cambio y aporta para que el presidente Macri siga llevándolo adelante. Este es un claro mensaje de lo que viene en la provincia, creemos que este resultado se va a mantener, estamos expectantes", dijo.
Fuente: diarioLa Nación.