El “Naranja” ganó y metió presión arriba
El equipo de Javier Roda venció ayer al “Albiceleste” en el arranque de la segunda rueda y alcanzó a su vencido en la cima de la tabla aunque transitoriamente, ya que hoy juega Independiente. Bilbao y Garino anotaron para el local y Lobato hizo el de la visita. Pésimo arbitraje de Antillanca.
Por Javier García
Es imposible obviar el mal desempeño de Adrián Antillanca, árbitro del juego de ayer entre dos serios candidatos a clasificar en el grupo.
Excedido de peso, dirige a distancia, dejó que el partido se ensuciara y se jugara al límite, y como si su tarea necesitara de algo más para redondear una tarde olvidable del juez, obvió un clarísimo penal a favor de Sol de Mayo en el último minuto adicionado. Resulta inexplicable que el Consejo Federal designe para el partido más importante de la fecha a este juez.
La introducción no debería hacerse con el árbitro, pero fue absolutamente responsable de lo que pasó adentro y de no ser por los futbolistas podría haber terminado en una batahola.
Dicho eso, el juego entre el “Naranja” y Sol de Mayo fue intenso desde el pitazo inicial, y fue el local quien tomó las riendas del partido no permitiéndole al equipo de Murúa tomar el balón para crear juego.
Las primeras chances del partido fueron del local y tuvo un par de aproximaciones sobre el arquero Astutti. A los 9’ Giménez guapeó en el área y cedió para Bilbao que aprovechó la falla de Lobato y desniveló.
El gol tranquilizó al local porque lo conquistó rápido y obligó al rival a tomar riesgos. Así fue que Sol de Mayo se metió un par de veces dentro del área local aunque las dos que tuvo Galván fueron anuladas por posición adelantada.
Tunessi llegó otra vez y cuando se disponía a rematar apareció Aciar (la figura) para interponerse y evitar el empate.
A los 41’ con el partido un poco más equilibrado, Moreno volvió a meterse en tierra rival y Bilbao sacó una volea fulminante que el ángulo devolvió a los pies de Garino y éste, con remate bajo estampó el 2-0. Otra vez el local hizo alarde de su contundencia y efectividad.
En el complemento, la postura visitante cambió y eso surtió efecto, porque a los 11’ descontó a través de Lobato, que aprovechó una pelota sucia en el área y la empujó al fondo del arco.
El partido, caliente de principio a fin y jugado con mucho roce y muy físico, tuvo otras acciones para modificar el resultado. Aumentar la diferencia en el caso de Moreno o llegar a la igualdad para el equipo rionegrino aunque, en un ping pong Moreno fue más que su rival y el resultado terminó siendo justo con lo que ocurrió dentro del campo de juego.
En el final, ya con Antillanca habiendo adicionado 4 minutos, expulsó por una protesta a García, defensor visitante que había sido reemplazado, luego que obvió un claro penal a favor de Sol de Mayo de Viedma que le cometieron a Reyes ingresando al área.
Al local poco le importó y festejó esta victoria que lo pone en lo más alto de la tabla aunque debe esperar resultado de hoy cuando se presente Independiente de Río Colorado.
Por Javier García
Es imposible obviar el mal desempeño de Adrián Antillanca, árbitro del juego de ayer entre dos serios candidatos a clasificar en el grupo.
Excedido de peso, dirige a distancia, dejó que el partido se ensuciara y se jugara al límite, y como si su tarea necesitara de algo más para redondear una tarde olvidable del juez, obvió un clarísimo penal a favor de Sol de Mayo en el último minuto adicionado. Resulta inexplicable que el Consejo Federal designe para el partido más importante de la fecha a este juez.
La introducción no debería hacerse con el árbitro, pero fue absolutamente responsable de lo que pasó adentro y de no ser por los futbolistas podría haber terminado en una batahola.
Dicho eso, el juego entre el “Naranja” y Sol de Mayo fue intenso desde el pitazo inicial, y fue el local quien tomó las riendas del partido no permitiéndole al equipo de Murúa tomar el balón para crear juego.
Las primeras chances del partido fueron del local y tuvo un par de aproximaciones sobre el arquero Astutti. A los 9’ Giménez guapeó en el área y cedió para Bilbao que aprovechó la falla de Lobato y desniveló.
El gol tranquilizó al local porque lo conquistó rápido y obligó al rival a tomar riesgos. Así fue que Sol de Mayo se metió un par de veces dentro del área local aunque las dos que tuvo Galván fueron anuladas por posición adelantada.
Tunessi llegó otra vez y cuando se disponía a rematar apareció Aciar (la figura) para interponerse y evitar el empate.
A los 41’ con el partido un poco más equilibrado, Moreno volvió a meterse en tierra rival y Bilbao sacó una volea fulminante que el ángulo devolvió a los pies de Garino y éste, con remate bajo estampó el 2-0. Otra vez el local hizo alarde de su contundencia y efectividad.
En el complemento, la postura visitante cambió y eso surtió efecto, porque a los 11’ descontó a través de Lobato, que aprovechó una pelota sucia en el área y la empujó al fondo del arco.
El partido, caliente de principio a fin y jugado con mucho roce y muy físico, tuvo otras acciones para modificar el resultado. Aumentar la diferencia en el caso de Moreno o llegar a la igualdad para el equipo rionegrino aunque, en un ping pong Moreno fue más que su rival y el resultado terminó siendo justo con lo que ocurrió dentro del campo de juego.
En el final, ya con Antillanca habiendo adicionado 4 minutos, expulsó por una protesta a García, defensor visitante que había sido reemplazado, luego que obvió un claro penal a favor de Sol de Mayo de Viedma que le cometieron a Reyes ingresando al área.
Al local poco le importó y festejó esta victoria que lo pone en lo más alto de la tabla aunque debe esperar resultado de hoy cuando se presente Independiente de Río Colorado.