Proyecto “¿Quién soy?”: el trabajo de la Escuela 795
Para cumplir con la actividad invitaron a profesionales de diferentes áreas para que los alumnos puedan escuchar distintas experiencias y hacer consultas sobre la profesión y sus trabajos.
La Escuela N° 795 de Rawson, a través de las profesoras Vanesa Evans, Natalia Romero Francia y Rosa Susana Mansilla, trabajaron con los alumnos de 5° y 6° año en el proyecto denominado “¿Quién soy?”.
Esta propuesta pretende desarrollar una experiencia pedagógica, donde se plantea una forma de relacionarse con saberes, incentivando a los jóvenes a participar activamente.
Lo que se busca es que puedan incorporar saberes desde lo vivencial y siendo protagonistas, pudiendo llevarlos a una reflexión de su proyecto profesional, como así también más importante, su proyecto de vida.
Por eso, fueron invitados 6 profesionales (una abogada, una maestra mayor de obras, una docente, un licenciado en Informática, un periodista y locutor, y un ingeniero civil), para poder transmitir su experiencia a los jóvenes que están próximos a terminar el secundario.
Los profesionales respondieron a 8 preguntas, que habían armado previamente los alumnos, sin decir qué profesión tenían. Una vez respondidas las preguntas, los alumnos debían adivinar qué especialidad tenía cada uno.
Los estudiantes pudieron preguntar sobre sus dudas; la universidad, la profesión, y las etapas de la vida que los profesionales ya vivenciaron y que ellos están próximos a hacerlo.
Este proyecto se llevó a cabo con el objetivo de incentivar a los jóvenes a participar activamente de este tipo de actividades para que a través de vivencias y experiencias tengan herramientas para su proyecto de vida, puedan comprender y reconocer distintos escenarios laborales y profesionales.
La Escuela N° 795 de Rawson, a través de las profesoras Vanesa Evans, Natalia Romero Francia y Rosa Susana Mansilla, trabajaron con los alumnos de 5° y 6° año en el proyecto denominado “¿Quién soy?”.
Esta propuesta pretende desarrollar una experiencia pedagógica, donde se plantea una forma de relacionarse con saberes, incentivando a los jóvenes a participar activamente.
Lo que se busca es que puedan incorporar saberes desde lo vivencial y siendo protagonistas, pudiendo llevarlos a una reflexión de su proyecto profesional, como así también más importante, su proyecto de vida.
Por eso, fueron invitados 6 profesionales (una abogada, una maestra mayor de obras, una docente, un licenciado en Informática, un periodista y locutor, y un ingeniero civil), para poder transmitir su experiencia a los jóvenes que están próximos a terminar el secundario.
Los profesionales respondieron a 8 preguntas, que habían armado previamente los alumnos, sin decir qué profesión tenían. Una vez respondidas las preguntas, los alumnos debían adivinar qué especialidad tenía cada uno.
Los estudiantes pudieron preguntar sobre sus dudas; la universidad, la profesión, y las etapas de la vida que los profesionales ya vivenciaron y que ellos están próximos a hacerlo.
Este proyecto se llevó a cabo con el objetivo de incentivar a los jóvenes a participar activamente de este tipo de actividades para que a través de vivencias y experiencias tengan herramientas para su proyecto de vida, puedan comprender y reconocer distintos escenarios laborales y profesionales.