Crimen de Tito Roberts: a nueve años del crimen y el dolor de su familia

Hoy se cumplen 9 años del crimen del policía Tito Leandro Roberts. El hecho ocurrió en Corcovado a manos de Cristian “Mai” Bustos, quien junto a sus hermanos ese día se enfrentó a la fuerza de seguridad junto a sus hermanos, resistiendo su detención por la muerte de su pequeño hijo al que había matado. Lamentablemente, una bala alcanzó al joven servidor integrante de la Brigada de Investigaciones, causándole una herida mortal.

Por el resonante caso, en el que también hirieron a otro policía, hubo un juicio. Uno de los Bustos fue condenado y hasta el año pasado estaba alojado en la Comisaría de Gualjaina; otro quedó parapléjico en el tiroteo; y un tercero murió ese 8 de marzo. Mientras que “Mai” se fugó, y recién en septiembre de 2016 lo detuvieron en Chile, donde resistió a la Policía e hirió a un miembro de la Interpol.

La aprehensión de Cristian “Mai” Bustos fue en el pequeño poblado trasandino Villa Santa Lucía donde permaneció oculto durante su fuga, y fue imputado por el delito de “homicidio frustrado en contra de un funcionario de la Policía de Investigaciones”, y también por el de “tenencia ilegal de arma de fuego”. Está purgando una pena de 4 años de prisión.

A horas de que se cumplan los 9 años del asesinato de Tito Roberts, ayer su hermana Thelma recordó el hecho en una entrevista con FM Tiempo Esquel 102.1. Afirmó que “esta es una situación que no se olvida porque fue shockeante. Estuvimos cenando, y al día siguiente nos informaron que mi hermano había muerto”.

Reflexionó que se dice que el tiempo cura todo. “Pero hasta ahora tenemos la mitad cumplido, y estamos esperando por el resto”, que es la extradición de `Mai` Bustos para que sea juzgado y condenado por el crimen.

Aún sin resignarse, Thelma señaló que “están los hijos de Tito (tenía 33 años); está mi mamá, y tenemos que seguir adelante y esperar que haya justicia”.

La mujer aseguró que su madre Mercedes es la que más padece la muerte de su hijo Tito, pero a la vez es la que más fuerte está y espera el momento fundamental que es el juicio a Bustos autor del hecho de sangre.

La familia hace el seguimiento del caso en la Justicia, y el martes Thelma fue a la Fiscalía, para interiorizarse con el fiscal Fidel González de novedades, que no son muchas. Sólo se sabe que “Mai” Bustos fue condenado a 4 años de cárcel en Chile por el atentado contra un policía. “Acá estuvo prófugo muchos años; mató a su hijo, a Tito, no lo encontraban y no pasó nada, y en el otro país rápidamente tuvo el juicio y la condena”, subrayó.

Algún día la extradición

El trámite que llevará el proceso para traerlo a Argentina, es que cumpla la pena y luego someterse a un juicio de extradición, por lo que “tendremos que esperar un tiempo más”.

Thelma Roberts puntualizó que la familia ha pedido que desde Chile envíen el arma con la que Bustos atentó contra el efectivo de Interpol, porque la sospecha que es la misma que utilizó para asesinar a su hermano Tito.

Es difícil lograr que se concrete la remisión del arma, y en el ámbito judicial de Esquel les dicen que no pueden resolver ese aspecto, y que es competencia de Cancillería. “Necesitamos el arma para que se hagan los peritajes que corresponden”, sostuvo la hermana del policía muerto, con el pedido a las autoridades a cargo del hecho que hagan lo que hay que hacer y avancen en el trámite, ya que le sugieren que la familia se dirija a la Cancillería.

Acerca del acompañamiento de la fuerza policial a la familia, la mujer comentó que quienes fueron compañeros de Tito siempre están. Los hijos del joven a la fecha tienen 17 y 16 años respectivamente, Santiago y Benjamín. “Lo recuerdan todo el tiempo y preguntan cosas de su padre”, agregó.

Thelma recordó que la anoche antes de morir en Corcovado, su hermano compartió una cena y tomaron mates, y salió a recorrer la calesita que estaba instalada en la ciudad, porque estaba de guardia.

“Estaba cumpliendo su turno y lo llamaron porque tenían que ir a Corcovado, ya que formaba parte de la Brigada de Investigaciones”.

Una vida no tiene precio. Pero, en el proceso que se llevó adelante por el seguro, los hijos de Tito Roberts cuando cumplan la mayoría de edad, podrán disponer de esa indemnización.

Mientras tanto, los chicos viven con su abuela Mercedes que los asiste con la alimentación, estudio y todo lo que necesitan. Los hermanos de Tito; Thelma, Fabiana, Claudia y Leopoldo junto a su madre, esperan justicia. Sin dudas, un recuerdo doloroso para la familia.