Naciones Unidas propone diversificar las economías latinoamericanas

América Latina debe aprovechar los próximos años para diversificar su economía y mejorar la calidad de sus mercados laborales, advirtió hoy el Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).

12 MAR 2018 - 15:04 | Actualizado


"Debería ser la ventana de oportunidad, ahora que hay dinamismo, de empujar a una diversificación productiva mucho más agresiva", sostuvo George Gray Molina, economista jefe para América Latina y el Caribe del programa de las Naciones Unidas (ONU).

La transformación económica "es fundamental para seguir avanzando en la lucha contra la pobreza y contra la exclusión, tras los progresos logrados en la primera década de este siglo", dijo a la agencia EFE en vísperas del Foro Económico Mundial de Sao Paulo.

Latinoamérica "consiguió sacar de la pobreza a 74 millones de personas, pero la desaceleración posterior devolvió a unos 18 millones a esa situación", explicó.

"El mayor peligro sería pensar que más de lo mismo va a resultar en mayor logro social y económico", subrayó.

Señaló que durante la década pasada se premió la inserción laboral de baja calificación, lo que contribuyó a aumentar los ingresos de muchas personas y a sacarlas de la pobreza, pero sostuvo que ese modelo tiene limitaciones claras.

"La productividad de la economía tiene que cambiar", apuntó y destacó que "ahora mismo se está poniendo 'el dedo en la llaga' y varios países están desarrollando estrategias positivas en este sentido".

Según el PNUD, junto a las políticas de diversificación económica se necesitan además "políticas sociales que acompañen ese proceso".

El momento para esa transformación es propicio, a ojos de la ONU, pues se aprecia el inicio de un ciclo económico positivo en el continente tras varios años de desaceleración, incluidos dos de contracción.

El crecimiento, sin embargo, no volverá a los niveles de la década pasada, por lo que es clave centrarse en su "calidad" si se quiere seguir avanzando en una región donde 130 millones de personas siguen por debajo de la línea de la pobreza, apuntó Gray.

"La baja calificación laboral fue buena para crear trabajos rápidos que generaron ingreso en la base de la pirámide, pero es mala porque más de lo mismo no va a rendir", recordó.

Un asunto central en ese ámbito es impulsar la inserción laboral de la mujer, cuya participación en el mercado latino es actualmente del 53%, 27 puntos porcentuales por debajo de la de los hombres, lo que para Gray supone una "brecha enorme".

"Nosotros creemos que la política social latinoamericana podría hacer mucho más por trabajar la inserción laboral de la mujer", apuntó.

Las estimaciones apuntan a que Latinoamérica y el Caribe crecerán este año entre un 2,2 y un 2,4%, casi el doble que el año pasado, apoyadas sobre todo en Brasil y México y en un repunte del precio de las materias primas.

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12 MAR 2018 - 15:04


"Debería ser la ventana de oportunidad, ahora que hay dinamismo, de empujar a una diversificación productiva mucho más agresiva", sostuvo George Gray Molina, economista jefe para América Latina y el Caribe del programa de las Naciones Unidas (ONU).

La transformación económica "es fundamental para seguir avanzando en la lucha contra la pobreza y contra la exclusión, tras los progresos logrados en la primera década de este siglo", dijo a la agencia EFE en vísperas del Foro Económico Mundial de Sao Paulo.

Latinoamérica "consiguió sacar de la pobreza a 74 millones de personas, pero la desaceleración posterior devolvió a unos 18 millones a esa situación", explicó.

"El mayor peligro sería pensar que más de lo mismo va a resultar en mayor logro social y económico", subrayó.

Señaló que durante la década pasada se premió la inserción laboral de baja calificación, lo que contribuyó a aumentar los ingresos de muchas personas y a sacarlas de la pobreza, pero sostuvo que ese modelo tiene limitaciones claras.

"La productividad de la economía tiene que cambiar", apuntó y destacó que "ahora mismo se está poniendo 'el dedo en la llaga' y varios países están desarrollando estrategias positivas en este sentido".

Según el PNUD, junto a las políticas de diversificación económica se necesitan además "políticas sociales que acompañen ese proceso".

El momento para esa transformación es propicio, a ojos de la ONU, pues se aprecia el inicio de un ciclo económico positivo en el continente tras varios años de desaceleración, incluidos dos de contracción.

El crecimiento, sin embargo, no volverá a los niveles de la década pasada, por lo que es clave centrarse en su "calidad" si se quiere seguir avanzando en una región donde 130 millones de personas siguen por debajo de la línea de la pobreza, apuntó Gray.

"La baja calificación laboral fue buena para crear trabajos rápidos que generaron ingreso en la base de la pirámide, pero es mala porque más de lo mismo no va a rendir", recordó.

Un asunto central en ese ámbito es impulsar la inserción laboral de la mujer, cuya participación en el mercado latino es actualmente del 53%, 27 puntos porcentuales por debajo de la de los hombres, lo que para Gray supone una "brecha enorme".

"Nosotros creemos que la política social latinoamericana podría hacer mucho más por trabajar la inserción laboral de la mujer", apuntó.

Las estimaciones apuntan a que Latinoamérica y el Caribe crecerán este año entre un 2,2 y un 2,4%, casi el doble que el año pasado, apoyadas sobre todo en Brasil y México y en un repunte del precio de las materias primas.


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