Un grupo de cuatro encapuchados ingresaron anoche a la casa del exsenador Mario Cimadevilla, ubicada en Marconi al 500 de Trelew. Revisaron sobren con ducmentación, una computadora y buscaban una caja fuerte que no existe, pero no se llevaron elementos de valor que había en la vivienda.
Ocurrió este sábado por la noche cuando el exsenador y extitular de la Unidad AMIA estaba junto a su familia en una cena familiar en la localidad de 28 de Julio. Los delincuentes ingresaron por un paredón lateral de la vivienda, amedrentaron a una empleada doméstica y la maniataron para proceder a revisar toda la documentación que había en la casa, además de una computadora.
"Quiero que esto quede muy claro: no se trató de un robo, acá estamos hablando de otra cosa", le aseguró Cimadevilla a Jornada. "Hace años que vengo denunciando la corrupción dasnevista, hace años que hablo de los vínculos de la droga en Cuubut y últimamente también he denunciado al ministro de Justicia, Germán Garavano, por el encubrimiento en la investigación del Caso AMIA. Hay que investigar de dónde puede provenir este hecho", dijo Cimadevilla.
Los encapuchados se manejaron con suma tranquilidad dentro de la vivienda, y según detalló Cimadevilla, buscaban documentación y algo en la computadora. "Sinceramente, no tengo más que papeles como títulos de propiedad de mi casa, y después la computadora la uso para leer el diario, no sé que creían que podría haber. Lo que más lamento es que me llevaron un viejo rifle Winchester que era de mi abuelo, una reliquia, y dos armas que tengo registrada: una 38 y una 9 milímetros".
Los intrusos también se llevaron una mochila en la que había un iPad, y un monto de dinero propiedad de uno de los hijos del ex senador.
Un grupo de cuatro encapuchados ingresaron anoche a la casa del exsenador Mario Cimadevilla, ubicada en Marconi al 500 de Trelew. Revisaron sobren con ducmentación, una computadora y buscaban una caja fuerte que no existe, pero no se llevaron elementos de valor que había en la vivienda.
Ocurrió este sábado por la noche cuando el exsenador y extitular de la Unidad AMIA estaba junto a su familia en una cena familiar en la localidad de 28 de Julio. Los delincuentes ingresaron por un paredón lateral de la vivienda, amedrentaron a una empleada doméstica y la maniataron para proceder a revisar toda la documentación que había en la casa, además de una computadora.
"Quiero que esto quede muy claro: no se trató de un robo, acá estamos hablando de otra cosa", le aseguró Cimadevilla a Jornada. "Hace años que vengo denunciando la corrupción dasnevista, hace años que hablo de los vínculos de la droga en Cuubut y últimamente también he denunciado al ministro de Justicia, Germán Garavano, por el encubrimiento en la investigación del Caso AMIA. Hay que investigar de dónde puede provenir este hecho", dijo Cimadevilla.
Los encapuchados se manejaron con suma tranquilidad dentro de la vivienda, y según detalló Cimadevilla, buscaban documentación y algo en la computadora. "Sinceramente, no tengo más que papeles como títulos de propiedad de mi casa, y después la computadora la uso para leer el diario, no sé que creían que podría haber. Lo que más lamento es que me llevaron un viejo rifle Winchester que era de mi abuelo, una reliquia, y dos armas que tengo registrada: una 38 y una 9 milímetros".
Los intrusos también se llevaron una mochila en la que había un iPad, y un monto de dinero propiedad de uno de los hijos del ex senador.