Dos policías de Puerto Madryn fueron parteros
Un llamado alertó al 101 sobre el alumbramiento en curso. Fueron un oficial inspector y un agente de la Policía provincial quienes asistieron el parto.
El oficial inspector Matías Epulef y el agente Héctor Suárez no olvidarán más lo sucedido ayer. En el interior de la vivienda del barrio Presidente Perón dejaron a un lado su rol de efectivos policiales para convertirse en parteros. Los uniformados ayudaron a dar a luz a una niña que a su arribo, aún pendía del cordón umbilical de Anahí Segovia (26), oriunda de Bolivia. La mujer daba a luz cuando los servidores públicos llegaron al lugar donde la parturienta se hallaba en la única compañía de sus otros dos hijos, de corta edad.
Epulef y Suárez llegaron al domicilio de la calle Emilio Jorge y Villarino donde se había requerido la presencia policial ante el cuadro. Al arribar se encontraron con que Segovia estaba tendida en el suelo y con su bebé fuera del seno materno pero aún unido por el cordón umbilical. En forma inmediata solicitaron la presencia de una ambulancia del hospital Isola. No obstante ello, el personal policial tomó la decisión de realizar los primeros auxilios para resguardar la vida de la mujer y del bebé. Allí procedieron a cortar el cordón umbilical resguardando a la criatura y a su madre.
Asistencia
Cuando el personal del hospital legó hasta el domicilio procedió a terminar con la maniobra de extracción de la placenta y posterior traslado de ambas al hospital para continuar con la atención médica aunque la niña y su madre se encuentran fuera de peligro y en óptimo estado.#
El oficial inspector Matías Epulef y el agente Héctor Suárez no olvidarán más lo sucedido ayer. En el interior de la vivienda del barrio Presidente Perón dejaron a un lado su rol de efectivos policiales para convertirse en parteros. Los uniformados ayudaron a dar a luz a una niña que a su arribo, aún pendía del cordón umbilical de Anahí Segovia (26), oriunda de Bolivia. La mujer daba a luz cuando los servidores públicos llegaron al lugar donde la parturienta se hallaba en la única compañía de sus otros dos hijos, de corta edad.
Epulef y Suárez llegaron al domicilio de la calle Emilio Jorge y Villarino donde se había requerido la presencia policial ante el cuadro. Al arribar se encontraron con que Segovia estaba tendida en el suelo y con su bebé fuera del seno materno pero aún unido por el cordón umbilical. En forma inmediata solicitaron la presencia de una ambulancia del hospital Isola. No obstante ello, el personal policial tomó la decisión de realizar los primeros auxilios para resguardar la vida de la mujer y del bebé. Allí procedieron a cortar el cordón umbilical resguardando a la criatura y a su madre.
Asistencia
Cuando el personal del hospital legó hasta el domicilio procedió a terminar con la maniobra de extracción de la placenta y posterior traslado de ambas al hospital para continuar con la atención médica aunque la niña y su madre se encuentran fuera de peligro y en óptimo estado.#