Así le pasó a Martín y Lucas, dos amigos de 33 años cada uno que llegaron a Nizhni Novgorod para ver el partido entre Uruguay y Francia, casualmente el camino que tenía que seguir la selección de Jorge Sampaoli si hubiera vencido a los "Galos" en octavos de final.
"En Rusia no hicimos nada con la Selección argentina, confiamos que iba a seguir en el Mundial, teníamos las entradas, y nos vinimos, pero ellos se fueron antes", expresó Martín Schapiro, quien se tomó vacaciones de su programa en "Futurock", de los domingos de 12 a 14 horas "Un mundo de sensaciones".
En diálogo con NA expresó que la idea era seguir al conjunto de Lionel Messi en cuartos de final y eventualmente en una semifinal.
"Vinimos a ver a la Argentina en la segunda fase. Pero directamente para cuartos de final, una vez que estaba el pase a octavos definida. Directamente de Buenos Aires a Nizhni Novgorod.
Pero terminamos viendo a Uruguay. Es lo que hay", agregó Lucas, quien es médico.
Los dos amigos se rieron de su suerte, porque fueron a ver el partido de octavos de Dinamarca y Croacia, en la plaza que Argentina iba a disputar si es que terminaba primero en su grupo, que dirigía el árbitro Néstor Pitana.
La casualidad hizo que el partido de cuartos de final entre Uruguay y Francia también lo dirigiera el misionero de 43 años, por lo que para Martín y Lucas el Mundial "era seguir a Pitana".
"Fuimos más hinchas de Dinamarca y de Uruguay, antes que Pitana, pero tampoco tuvimos suerte", expresó Martín, quien junto a su amigo comparten el primer mundial.
El hecho de que el torneo se haya disputado en Rusia hizo que ellos tuvieran la intención de visitar este destino tan distinto a los otros lugares europeos, por la historia y la cultura, que esta vez tuvo al fútbol como "excusa".
"Muchas veces las noticias que llegan de Rusia están un poco distorsionadas y la verdad que la gente es muy amable y está más allá de cualquier tipo de propagando que hagan para recibir a los turistas", expresó Martín.
Los dos amigos saben que tal vez Qatar no sea lo mismo en cuanto a la magia que puede tener Rusia a nivel país, y coincidieron en señalar que "las ciudades estaban preparadas para un Mundial, más allá del pulido lógico para el torneo".
El viaje "trascendía" el fútbol, indicó Lucas, quien sin embargo y más allá "de Sampaoli y los otros 10", confiaban "en (Lionel) Messi, pero bueno, no se pudo".
Así le pasó a Martín y Lucas, dos amigos de 33 años cada uno que llegaron a Nizhni Novgorod para ver el partido entre Uruguay y Francia, casualmente el camino que tenía que seguir la selección de Jorge Sampaoli si hubiera vencido a los "Galos" en octavos de final.
"En Rusia no hicimos nada con la Selección argentina, confiamos que iba a seguir en el Mundial, teníamos las entradas, y nos vinimos, pero ellos se fueron antes", expresó Martín Schapiro, quien se tomó vacaciones de su programa en "Futurock", de los domingos de 12 a 14 horas "Un mundo de sensaciones".
En diálogo con NA expresó que la idea era seguir al conjunto de Lionel Messi en cuartos de final y eventualmente en una semifinal.
"Vinimos a ver a la Argentina en la segunda fase. Pero directamente para cuartos de final, una vez que estaba el pase a octavos definida. Directamente de Buenos Aires a Nizhni Novgorod.
Pero terminamos viendo a Uruguay. Es lo que hay", agregó Lucas, quien es médico.
Los dos amigos se rieron de su suerte, porque fueron a ver el partido de octavos de Dinamarca y Croacia, en la plaza que Argentina iba a disputar si es que terminaba primero en su grupo, que dirigía el árbitro Néstor Pitana.
La casualidad hizo que el partido de cuartos de final entre Uruguay y Francia también lo dirigiera el misionero de 43 años, por lo que para Martín y Lucas el Mundial "era seguir a Pitana".
"Fuimos más hinchas de Dinamarca y de Uruguay, antes que Pitana, pero tampoco tuvimos suerte", expresó Martín, quien junto a su amigo comparten el primer mundial.
El hecho de que el torneo se haya disputado en Rusia hizo que ellos tuvieran la intención de visitar este destino tan distinto a los otros lugares europeos, por la historia y la cultura, que esta vez tuvo al fútbol como "excusa".
"Muchas veces las noticias que llegan de Rusia están un poco distorsionadas y la verdad que la gente es muy amable y está más allá de cualquier tipo de propagando que hagan para recibir a los turistas", expresó Martín.
Los dos amigos saben que tal vez Qatar no sea lo mismo en cuanto a la magia que puede tener Rusia a nivel país, y coincidieron en señalar que "las ciudades estaban preparadas para un Mundial, más allá del pulido lógico para el torneo".
El viaje "trascendía" el fútbol, indicó Lucas, quien sin embargo y más allá "de Sampaoli y los otros 10", confiaban "en (Lionel) Messi, pero bueno, no se pudo".