Aún no saben qué pasó en la confitería del cerro La Hoya

Fiscalía de Esquel investiga de oficio el origen del incendio que destruyó la confitería La Piedra en el cerro La Hoya. Se conjeturó desde un cortocircuito en la instalación eléctrica de la confitería en la cota 1.650, hasta un fogón o algún artefacto que hubiera quedado encendido cuando finalizaron las tareas.
No hubo denuncia. Intervino un perito ígneo que establecerá si fue intencional o incidieron otros factores. El fiscal jefe, Marcelo Crettón, indicó que la Fiscalía está obligada a comenzar su trabajo con la hipótesis de máxima, para evitar que se pierdan elementos valiosos de la investigación, cuando se establezca si se está ante un delito. Ayer por la tarde posiblemente mantendría una reunión con el perito, que le acercaría un informe preliminar.

La intervención se decidió de oficio por la urgencia que requiere un siniestro así. El lugar debe ser relevado por especialistas antes de que la escena se modifique y se “contamine la escena del hecho”. Si el perito determina que el incendio fue intencional, sería un delito de acción pública, lo que habilita al inicio de la investigación, aún sin contar con una denuncia previa.

Crettón precisó que la Fiscalía en estos casos debe necesariamente trabajar con la hipótesis de máxima, del mismo modo que cuando se encuentra un cuerpo y se presume un suicidio. “Siempre se trabaja como si fuera un homicidio, luego la pericia médica forense dirá efectivamente qué ocurrió, pero no podemos perder evidencias de los primeros momentos desde el hallazgo”, indicó. “En este caso se trabaja como si se tratara de un incendio intencional, y si no lo fue lo sabremos con la pericia. Pero si el perito confirmara la hipótesis de máxima, cobrará valor el trabajo que ya hayamos realizado”.
Crettón puntualizó que si fuese un delito de acción pública, serían tres hipótesis: un incendio intencional, culposo, o una cuestión de fuerza mayor, la menos probable.

Al iniciar por la hipótesis de máxima, es decir la intencionalidad, se designó un perito con una importante trayectoria. Si confirmara la teoría de la Fiscalía, “la intencionalidad va de la mano de la autoría”, definió el fiscal, indicando que en paralelo a la pericia, se debe buscar esa autoría.

El ministro de la Producción y presidente de Corfo, Hernán Alonso, desmintió la renuncia del director del Centro de Esquí La Hoya, Gabriel Cabrera. Sí admitió que por el incendio hubo mucho nerviosismo y discusiones. Pero ya un poco más en frío se superó la tensión, y el gerente Diego Alonso se reuniría con “Pichuco” Cabrera y los demás integrantes del equipo de trabajo con distintas responsabilidades en el CAM.
Sobre la investigación, Alonso sostuvo que las pericias determinarán las causas, y no abonó ninguna hipótesis de que algún grupo haya estado involucrado.

En tanto, el jefe del cuerpo activo de Bomberos Voluntarios de Esquel, Carlos Carrasco, relató cómo fue la tarea en el centro de esquí, tras recibir la llamada el lunes. Por las dificultades para llegar con autobomba, se trasladaron motobombas en vehículos livianos.

Intervinieron 14 bomberos que trabajaron de 8.30 a 17 hs. Acerca de algún foco ígneo que se habría reactivado el martes, el jefe explicó que fueron voluntarios y era humo que salía de un sector, sin riesgo de propagación. De todas maneras la Fiscalía había pedido no remover nada, por las pericias.
Carrasco explicó en tal sentido que desconoce si La Hoya tiene un sistema de ataque inicial a incendios, y que sabe que hay matafuegos, con los que es imposible aplacar un fuego de tal magnitud.  

Sugirió que existen varias formas de disponer un equipamiento para el primer ataque, necesario en un lugar como el CAM, al que es difícil acceder. “Se puede tener un sistema al menos para ir aplacando las llamas hasta la llegada de los bomberos”. También sería conveniente contar con una brigada de cinco hombres preparados.#