Fallo obliga al personal de Educación a hacer cursos para incluir a chicos con discapacidad

Eliot es un chico de Pirámides con retraso madurativo. Tuvo una auxiliar y logró progresar pero el Ministerio le dio de baja. La jueza revocó esa decisión y advirtió que Provincia tuvo “prejuicios, ignorancia, maltrato, violencia institucional y una lisa y llana discriminación” con el reclamo de la madre.

21 OCT 2018 - 20:35 | Actualizado

Por Rolando Tobarez / @rtobarez.Eliot tiene 11 años. Nació prematuro y con bajo peso. Una lesión cerebral le causó retraso madurativo y problemas de motricidad. Posee autismo moderado y se le hace difícil conectar con extraños. Habla muy poco.

A sus tres años ingresó al Jardín de Infantes de la Escuela 87 de Puerto Pirámides. Su mamá, Alexa Efftimoff, logró que el Ministerio de Educación designara a Florencia como su auxiliar de apoyo para su inclusión. Era 2013. Trabajó tanto y tan bien en su rehabilitación que logró que Eliot caminara. Lo acompañaba de lunes a viernes, de 8 a 15.

El año pasado, con la excusa del ajuste económico, el Ministerio dio de baja a los auxiliares. En el mejor de los casos Florencia trabajaría de 8 a 12 y como monotributista. Eliot se quedó sin apoyo clave para su integración. Alexa reclamó a la Dirección General de Educación Inclusiva por nota, en persona y por teléfono. La ministro Graciela Cigudosa rechazó la petición.

La mamá presentó el amparo. La jueza de Familia de Puerto Madryn, Delma Viani, en un duro fallo le ordenó a la Provincia que garantice la escolarización de inclusión del niño como era hasta 2017, en jornada completa en la Escuela 87. Florencia deberá poseer estabilidad laboral con aguinaldo, asignaciones y antigüedad, con 30 horas cátedra.

La jueza Viani también le encomendó al gobernador Mariano Arcioni que disponga para todo el personal y funcionarios del Ministerio capacitaciones obligatorias sobre las normas provinciales, nacionales e internacionales que otorgan garantía constitucional al Derecho a la Educación Inclusiva a las Personas con Discapacidades. También sobre el efecto de dictar resoluciones, disposiciones, circulares y todo acto administrativo que minimicen o desconozcan esos derechos.

Según el fallo, la negativa del Ministerio para garantizar la inclusión de Eliot “restringe derechos constitucionales” ya que no hay docentes en Pirámides que puedan trabajar como auxiliares. Es urgente que siga con su acompañante terapéutico para que su evolución no retroceda.

Docentes y médicos que declararon reconocieron la necesidad de Florencia y destacaron su compromiso. Gracias a la auxiliar “estaba muy bien en lo psicomotriz, se lava las manos y comía solo”. Ella lo recibe en la vereda de la escuela cada mañana y lo despide cuando sus padres lo buscan por la tarde. Lo contiene y acompaña en todo momento en lo pedagógico, emocional y motriz.

Según otro testimonio, Florencia “es un referente en el aula, construyó con ella un vínculo afectivo significativo estable”. La reconoce, la respeta y acude a ella. “Hay muchos cambios en él, mucho más conectado y comunicado, teniendo más en cuenta al otro, contento, se lo nota socializado. Es muy beneficioso mantener a las personas que lo acompañan cuando lograron formar un lazo de afecto”. Si su auxiliar falta “la Escuela no cuenta con conocimientos para incluirlo y está apartado y segregado”. Eliot hasta puede reaccionar mal con una persona extraña. “Si lo acompañara otra persona no lo favorecería porque sería empezar de cero”.

Según la sentencia de Viani, “queda claro que lo único que pretende Provincia es la renuncia de Eliot a su derecho a una verdadera educación inclusiva”. La actitud oficial “creó un escenario de conflicto innecesario y desgastante para los padres”.

La “negativa y resistencia” del Ministerio a “colaborar me permiten entender que podríamos estar frente a una discriminación por condición física. Hay una manifiesta actitud expulsiva y no inclusiva pues es innegable que si al niño le resulta altamente gratificante y satisfactorio para su desarrollo asistir a jornada completa, la actitud de la demandada de que se retire a las 12 tiene como única finalidad descolarizarlo”.

El recorte “implica que Eliot debe diferenciarse de sus compañeros porque debe retirarse más temprano y es retrógrado a la política inclusiva escolar a la que están obligados los estados. Hay una manifiesta discriminación y expulsión de los derechos”.

“En todo el proceso el Estado le puso siempre barreras al niño para que pueda ser escolarizado”. Los padres “son los únicos encargados de los trámites interminables pero es inexplicable todo su periplo reclamando al Ministerio que su hijo no pierda a la auxiliar”. Alexa lloraba en las audiencias. “Los padres lamentablemente deben lidiar con actitudes discriminatorias o cargadas de prejuicios e ignorancia. La posición desaprensiva del Ministerio encuadra perfectamente en una lisa y llana discriminación”.

Que Provincia obligue a Florencia a ser monotributista “es una medida regresiva, disfrazada con argumentos persuasivos que en nada se condicen con su obligación”. Por crisis económica que haya, “Provincia nada hizo. Tomó una posición reprochable, deshumanizada. Nada concreto puso a disposición de los padres”.

En este escenario “viendo el sufrimiento de los progenitores y de sólo pensar que a otro niño le pueda estar sucediendo lo mismo en otra escuela de Chubut por ignorancia del Ministerio, desmereciendo y menospreciando los derechos de los niños especiales, pretendo evitar casos similares derivados del maltrato y la violencia institucional del Ministerio, sugeriré a la ministro y al gobernador que arbitren los medios para profundizar como política de Estado el cese de toda barrera que intente violentar derechos”. Según Viani, “no noté empatía de los funcionarios y empleados que intervinieron (…) Frente a una violencia institucional la madre debió atravesar un largo peregrinar”. #

Alexa Efftimoff, la madre de Eliot:“nunca padecí esta falta de sensibilidad”

-¿Cómo llega Eliot a tener una auxiliar de apoyo?

-En salita de 3 y 4 años la maestra nos decía que necesitaba ayuda porque no caminaba. Con el papá nos dábamos cuenta. Gestionamos la ayudante y en salita de 5 conseguimos a Florencia. Cuando lo empieza a asistir, con la maestra de Educación Física lo largan y lo animan. Me llaman a mi trabajo y me dicen que está caminando. Cuando voy fue increíble.

-¿Ella cómo trabaja?

-Es muy completa y no sólo lo asistió en lo motriz sino que hace las veces de maestra para las adaptaciones en el aula. Si estudian el sistema solar todos los chicos pueden dibujarlo pero él no, entonces ella hace el sistema solar para que participe en lo que puede. Eso es mucho más que su función, pero como es muy dedicada y tiene compromiso le interesa el bienestar de Eliot. Siempre hizo mucho más de lo que estaba en su función.

-¿En Pirámides se complica conseguir auxiliares?

-Es muy difícil que vengan maestros integradores porque deben venir de Puerto Madryn y los sueldos son magros. Florencia es de Pirámides y está buenísimo porque 200 kilómetros todos los días es imposible sostener. Lo llevamos dos veces por semana a kinesiología, psicomotricidad y terapia a Madryn. Pero llega fin de año y terminamos locos, imagináte todos los días 200 kilómetros, venir y trabajar 7 horas más dos horas de viaje por un sueldo de 15 mil pesos. Tuvimos mucha suerte de que esté acá.

-¿Se notó progreso con ella?

-Aprendió a caminar en la escuela. Es lo más notable porque la kinesióloga decía que no tenía limitación pero no caminaba, se desplazaba de rodillas. Florencia y su profesora de Educación Física idearon colgarlo de una bufanda debajo de las axilas y lo arengaban a la marcha. Él en mi casa se apoyaba en la pared, tiraba unos pasitos y lo veía pero no me di cuenta de lo que cerca que estaba de caminar. Con nosotros es remolón pero en la escuela tiene otro tipo de estímulo.

-El fallo destaca el vínculo que crearon…

-Él creó todo un vínculo porque por su autismo no podés tener una conversación fluida. Cada maestro nuevo que viene, integrador, de Educación Física, Plástica, Música, establece la relación a través de Florencia, que lo conoce, lo interpreta y llega a él más rápido. Si no está, deben empezar todos de nuevo a conocerlo. Los maestros especiales vienen de Madryn y no duran mucho. Los que viven en el pueblo son los docentes de grado y el director, los otros vienen de afuera, cambian y no es fácil establecer un vínculo con él de una. No se comunica enseguida. Florencia sabe qué le pasa y trabaja mucho con una fonoaudióloga, una psicóloga y una kinesióloga para acordar y lo que logre afuera se aplique en la Escuela.

-¿Cómo se generó el amparo?

-La echaron en diciembre. Esto pasó otras veces pero Das Neves y Buzzi fueron mejor gente que éste (por Arcioni) y cuando le daban de baja la indemnizaban porque tiene recibo de sueldo. El secretario de la ministro Cigudosa, Diego Dopazo, que supuestamente es abogado, me dijo en la cara que un recibo no es un derecho adquirido. Soy abogada y le dije: “No me podés decir esto”. Fui al Ministerio y no podía creer que en una provincia donde hay un Departamento de Educación Inclusiva, me atendió una señora Vilches y literalmente me soplaba en la cara cuando le exponía mi problema. Nunca me pasó una cosa así. Peleo por la figura de Florencia desde Jardín. Siempre me habían tratado bien. Pero ahora tengo problemas con un hijo discapacitado y quien me atiende tiene el tupé de decirme: “No estoy hablando con vos”, ignorándome. Nunca padecí esta falta de sensibilidad y las cosas que debí soportar que me dijeran, como que mi hijo no tiene derechos. Vilches me decía que no tenía poder de resolución pero atendía el teléfono y estaba cuando me iba a quejar.

-¿No había solución alguna?

-Cuando la echan Dopazo me dice que era un error y la iban a indemnizar. No lo hicieron y la solución que daban era que se hiciera monotributista. Me tomaban el pelo. El recibo de sueldo era de 20 mil pesos, el monotributo era de 15 mil y de ahí debe pagar el tributo, Ingresos Brutos y un seguro de vida. Le hubieran quedado 10 mil pesos. La echan, no la indemnizan, le bajan el sueldo a la mitad y la precarizan cuando antes tenía antigüedad, obra social y jubilación. Le dije a la auxiliar que no iba a permitir eso y que ella no tenía que aceptarlo. Educación Inclusiva no es una unión vecinal ni un centro de jubilados: es un Ministerio, pero me atendían peor que el almacén de la esquina. Es indescriptible, de Kafka o Almodóvar. No tiene nombre. Lo lamento por la Provincia pero voy a hacer un juicio por daños y perjuicios. Es inaudito lo mal que me trataron. Lo peor es que tengo recursos, puedo ponerle nafta a un auto y llegar a Rawson porque vivo a 180 kilómetros. Si viviera en Paso del Sapo me c… de infeliz y mi hijo también. Estoy indignada. No puede ser el padecimiento y maltrato que nos hicieron pasar.

-¿Te sorprendió?

-Sí. Con Das Neves y Buzzi a veces le daban de baja y la reintegraban pero había respeto. Y éste que tengo de gobernador tira todo abajo sin preguntar. El decreto de las horas cátedra dice que las saca todas porque hay actividades ilegales encubiertas. Investigá pero no eches a los trabajadores. Nunca jamás me insultaron la inteligencia de esta manera. No me quieran decir una cosa por otra porque por suerte algún librito leí.

-¿Cómo está el caso ahora?

-Tuvieron la caradurez de apelar mientras en el juicio tuvieron una conducta despreciable: negaron el certificado de nacimiento, el de discapacidad, no se presentaron a las audiencias, no presentaron testigos ni llevaron ninguna prueba. Pero apelan, mantienen una conducta exclusiva y de maltrato. Lo único que quieren es molestarnos, excluirnos y dañarnos, no me cabe ninguna duda.

-¿Eliot hoy trabaja con Florencia?

-Si. Pero pese a que la jueza ordenó devolverles las 30 horas cátedra, Provincia no le hace caso y le da 18 horas. Desde mayo trabaja 30 horas y le pagan 18. Le devolvieron lo que les dio la gana.

Enterate de las noticias de PROVINCIA a través de nuestro newsletter

Anotate para recibir las noticias más importantes de esta sección.

Te podés dar de baja en cualquier momento con un solo clic.

Las más leídas

21 OCT 2018 - 20:35

Por Rolando Tobarez / @rtobarez.Eliot tiene 11 años. Nació prematuro y con bajo peso. Una lesión cerebral le causó retraso madurativo y problemas de motricidad. Posee autismo moderado y se le hace difícil conectar con extraños. Habla muy poco.

A sus tres años ingresó al Jardín de Infantes de la Escuela 87 de Puerto Pirámides. Su mamá, Alexa Efftimoff, logró que el Ministerio de Educación designara a Florencia como su auxiliar de apoyo para su inclusión. Era 2013. Trabajó tanto y tan bien en su rehabilitación que logró que Eliot caminara. Lo acompañaba de lunes a viernes, de 8 a 15.

El año pasado, con la excusa del ajuste económico, el Ministerio dio de baja a los auxiliares. En el mejor de los casos Florencia trabajaría de 8 a 12 y como monotributista. Eliot se quedó sin apoyo clave para su integración. Alexa reclamó a la Dirección General de Educación Inclusiva por nota, en persona y por teléfono. La ministro Graciela Cigudosa rechazó la petición.

La mamá presentó el amparo. La jueza de Familia de Puerto Madryn, Delma Viani, en un duro fallo le ordenó a la Provincia que garantice la escolarización de inclusión del niño como era hasta 2017, en jornada completa en la Escuela 87. Florencia deberá poseer estabilidad laboral con aguinaldo, asignaciones y antigüedad, con 30 horas cátedra.

La jueza Viani también le encomendó al gobernador Mariano Arcioni que disponga para todo el personal y funcionarios del Ministerio capacitaciones obligatorias sobre las normas provinciales, nacionales e internacionales que otorgan garantía constitucional al Derecho a la Educación Inclusiva a las Personas con Discapacidades. También sobre el efecto de dictar resoluciones, disposiciones, circulares y todo acto administrativo que minimicen o desconozcan esos derechos.

Según el fallo, la negativa del Ministerio para garantizar la inclusión de Eliot “restringe derechos constitucionales” ya que no hay docentes en Pirámides que puedan trabajar como auxiliares. Es urgente que siga con su acompañante terapéutico para que su evolución no retroceda.

Docentes y médicos que declararon reconocieron la necesidad de Florencia y destacaron su compromiso. Gracias a la auxiliar “estaba muy bien en lo psicomotriz, se lava las manos y comía solo”. Ella lo recibe en la vereda de la escuela cada mañana y lo despide cuando sus padres lo buscan por la tarde. Lo contiene y acompaña en todo momento en lo pedagógico, emocional y motriz.

Según otro testimonio, Florencia “es un referente en el aula, construyó con ella un vínculo afectivo significativo estable”. La reconoce, la respeta y acude a ella. “Hay muchos cambios en él, mucho más conectado y comunicado, teniendo más en cuenta al otro, contento, se lo nota socializado. Es muy beneficioso mantener a las personas que lo acompañan cuando lograron formar un lazo de afecto”. Si su auxiliar falta “la Escuela no cuenta con conocimientos para incluirlo y está apartado y segregado”. Eliot hasta puede reaccionar mal con una persona extraña. “Si lo acompañara otra persona no lo favorecería porque sería empezar de cero”.

Según la sentencia de Viani, “queda claro que lo único que pretende Provincia es la renuncia de Eliot a su derecho a una verdadera educación inclusiva”. La actitud oficial “creó un escenario de conflicto innecesario y desgastante para los padres”.

La “negativa y resistencia” del Ministerio a “colaborar me permiten entender que podríamos estar frente a una discriminación por condición física. Hay una manifiesta actitud expulsiva y no inclusiva pues es innegable que si al niño le resulta altamente gratificante y satisfactorio para su desarrollo asistir a jornada completa, la actitud de la demandada de que se retire a las 12 tiene como única finalidad descolarizarlo”.

El recorte “implica que Eliot debe diferenciarse de sus compañeros porque debe retirarse más temprano y es retrógrado a la política inclusiva escolar a la que están obligados los estados. Hay una manifiesta discriminación y expulsión de los derechos”.

“En todo el proceso el Estado le puso siempre barreras al niño para que pueda ser escolarizado”. Los padres “son los únicos encargados de los trámites interminables pero es inexplicable todo su periplo reclamando al Ministerio que su hijo no pierda a la auxiliar”. Alexa lloraba en las audiencias. “Los padres lamentablemente deben lidiar con actitudes discriminatorias o cargadas de prejuicios e ignorancia. La posición desaprensiva del Ministerio encuadra perfectamente en una lisa y llana discriminación”.

Que Provincia obligue a Florencia a ser monotributista “es una medida regresiva, disfrazada con argumentos persuasivos que en nada se condicen con su obligación”. Por crisis económica que haya, “Provincia nada hizo. Tomó una posición reprochable, deshumanizada. Nada concreto puso a disposición de los padres”.

En este escenario “viendo el sufrimiento de los progenitores y de sólo pensar que a otro niño le pueda estar sucediendo lo mismo en otra escuela de Chubut por ignorancia del Ministerio, desmereciendo y menospreciando los derechos de los niños especiales, pretendo evitar casos similares derivados del maltrato y la violencia institucional del Ministerio, sugeriré a la ministro y al gobernador que arbitren los medios para profundizar como política de Estado el cese de toda barrera que intente violentar derechos”. Según Viani, “no noté empatía de los funcionarios y empleados que intervinieron (…) Frente a una violencia institucional la madre debió atravesar un largo peregrinar”. #

Alexa Efftimoff, la madre de Eliot:“nunca padecí esta falta de sensibilidad”

-¿Cómo llega Eliot a tener una auxiliar de apoyo?

-En salita de 3 y 4 años la maestra nos decía que necesitaba ayuda porque no caminaba. Con el papá nos dábamos cuenta. Gestionamos la ayudante y en salita de 5 conseguimos a Florencia. Cuando lo empieza a asistir, con la maestra de Educación Física lo largan y lo animan. Me llaman a mi trabajo y me dicen que está caminando. Cuando voy fue increíble.

-¿Ella cómo trabaja?

-Es muy completa y no sólo lo asistió en lo motriz sino que hace las veces de maestra para las adaptaciones en el aula. Si estudian el sistema solar todos los chicos pueden dibujarlo pero él no, entonces ella hace el sistema solar para que participe en lo que puede. Eso es mucho más que su función, pero como es muy dedicada y tiene compromiso le interesa el bienestar de Eliot. Siempre hizo mucho más de lo que estaba en su función.

-¿En Pirámides se complica conseguir auxiliares?

-Es muy difícil que vengan maestros integradores porque deben venir de Puerto Madryn y los sueldos son magros. Florencia es de Pirámides y está buenísimo porque 200 kilómetros todos los días es imposible sostener. Lo llevamos dos veces por semana a kinesiología, psicomotricidad y terapia a Madryn. Pero llega fin de año y terminamos locos, imagináte todos los días 200 kilómetros, venir y trabajar 7 horas más dos horas de viaje por un sueldo de 15 mil pesos. Tuvimos mucha suerte de que esté acá.

-¿Se notó progreso con ella?

-Aprendió a caminar en la escuela. Es lo más notable porque la kinesióloga decía que no tenía limitación pero no caminaba, se desplazaba de rodillas. Florencia y su profesora de Educación Física idearon colgarlo de una bufanda debajo de las axilas y lo arengaban a la marcha. Él en mi casa se apoyaba en la pared, tiraba unos pasitos y lo veía pero no me di cuenta de lo que cerca que estaba de caminar. Con nosotros es remolón pero en la escuela tiene otro tipo de estímulo.

-El fallo destaca el vínculo que crearon…

-Él creó todo un vínculo porque por su autismo no podés tener una conversación fluida. Cada maestro nuevo que viene, integrador, de Educación Física, Plástica, Música, establece la relación a través de Florencia, que lo conoce, lo interpreta y llega a él más rápido. Si no está, deben empezar todos de nuevo a conocerlo. Los maestros especiales vienen de Madryn y no duran mucho. Los que viven en el pueblo son los docentes de grado y el director, los otros vienen de afuera, cambian y no es fácil establecer un vínculo con él de una. No se comunica enseguida. Florencia sabe qué le pasa y trabaja mucho con una fonoaudióloga, una psicóloga y una kinesióloga para acordar y lo que logre afuera se aplique en la Escuela.

-¿Cómo se generó el amparo?

-La echaron en diciembre. Esto pasó otras veces pero Das Neves y Buzzi fueron mejor gente que éste (por Arcioni) y cuando le daban de baja la indemnizaban porque tiene recibo de sueldo. El secretario de la ministro Cigudosa, Diego Dopazo, que supuestamente es abogado, me dijo en la cara que un recibo no es un derecho adquirido. Soy abogada y le dije: “No me podés decir esto”. Fui al Ministerio y no podía creer que en una provincia donde hay un Departamento de Educación Inclusiva, me atendió una señora Vilches y literalmente me soplaba en la cara cuando le exponía mi problema. Nunca me pasó una cosa así. Peleo por la figura de Florencia desde Jardín. Siempre me habían tratado bien. Pero ahora tengo problemas con un hijo discapacitado y quien me atiende tiene el tupé de decirme: “No estoy hablando con vos”, ignorándome. Nunca padecí esta falta de sensibilidad y las cosas que debí soportar que me dijeran, como que mi hijo no tiene derechos. Vilches me decía que no tenía poder de resolución pero atendía el teléfono y estaba cuando me iba a quejar.

-¿No había solución alguna?

-Cuando la echan Dopazo me dice que era un error y la iban a indemnizar. No lo hicieron y la solución que daban era que se hiciera monotributista. Me tomaban el pelo. El recibo de sueldo era de 20 mil pesos, el monotributo era de 15 mil y de ahí debe pagar el tributo, Ingresos Brutos y un seguro de vida. Le hubieran quedado 10 mil pesos. La echan, no la indemnizan, le bajan el sueldo a la mitad y la precarizan cuando antes tenía antigüedad, obra social y jubilación. Le dije a la auxiliar que no iba a permitir eso y que ella no tenía que aceptarlo. Educación Inclusiva no es una unión vecinal ni un centro de jubilados: es un Ministerio, pero me atendían peor que el almacén de la esquina. Es indescriptible, de Kafka o Almodóvar. No tiene nombre. Lo lamento por la Provincia pero voy a hacer un juicio por daños y perjuicios. Es inaudito lo mal que me trataron. Lo peor es que tengo recursos, puedo ponerle nafta a un auto y llegar a Rawson porque vivo a 180 kilómetros. Si viviera en Paso del Sapo me c… de infeliz y mi hijo también. Estoy indignada. No puede ser el padecimiento y maltrato que nos hicieron pasar.

-¿Te sorprendió?

-Sí. Con Das Neves y Buzzi a veces le daban de baja y la reintegraban pero había respeto. Y éste que tengo de gobernador tira todo abajo sin preguntar. El decreto de las horas cátedra dice que las saca todas porque hay actividades ilegales encubiertas. Investigá pero no eches a los trabajadores. Nunca jamás me insultaron la inteligencia de esta manera. No me quieran decir una cosa por otra porque por suerte algún librito leí.

-¿Cómo está el caso ahora?

-Tuvieron la caradurez de apelar mientras en el juicio tuvieron una conducta despreciable: negaron el certificado de nacimiento, el de discapacidad, no se presentaron a las audiencias, no presentaron testigos ni llevaron ninguna prueba. Pero apelan, mantienen una conducta exclusiva y de maltrato. Lo único que quieren es molestarnos, excluirnos y dañarnos, no me cabe ninguna duda.

-¿Eliot hoy trabaja con Florencia?

-Si. Pero pese a que la jueza ordenó devolverles las 30 horas cátedra, Provincia no le hace caso y le da 18 horas. Desde mayo trabaja 30 horas y le pagan 18. Le devolvieron lo que les dio la gana.


NOTICIAS RELACIONADAS