Darío Roa da pequeños grandes pasos en San Lorenzo

El futbolista más joven en haber jugado un partido organizado por AFA, tuvo su primera práctica con el plantel profesional del “Cuervo”. “Fue un día lindo e inolvidable para mí”, le comentó a Jornada el adolescente de 16 años. “El año que viene, sueño con poder llegar a Reserva”, señaló.

Darío Roa (der.) el día de la primera práctica. Posa con Agustín Barrenechea.
15 NOV 2018 - 21:01 | Actualizado

El 24 de abril del 2016, el chubutense Darío Roa hizo historia en el fútbol argentino.

A sus 13 años, el adolescente debutó con los colores de Racing Club de Trelew, en el triunfo por 1-0 ante Cruz del Sur, por la última fecha de la fase inicial del Federal B 2016 de transición.

“Cachete” se convirtió así, sin evidencia que pruebe lo contrario, en el futbolista más joven en disputar un partido organizado por la Asociación del Fútbol Argentino.

Primera práctica

A dos años y medio de aquel suceso, Darío milita en las Inferiores de San Lorenzo de Almagro, club que lo fichó a finales del 2016.

El pasado 3 de noviembre, el joven chubutense, que habitualmente juega en la Séptima división del “Cuervo”, se entrenó por primera vez con el plantel profesional del club presidido por Matías Lammens y Marcelo Tinelli.

“Terminamos de entrenar y estaba en la pensión acostado. Nos dice Diego Monarriz (NdR: técnico interino de San Lorenzo) que tengo que ir a entrenar con Primera”, le comentó Roa a Jornada.

En ese entrenamiento, también fue citado Agustín Barrenechea, otro de los jóvenes surgidos de la “Academia” trelewense.

“La primera práctica fue muy buena. Hicimos fútbol táctico en el estadio; fue un día muy lindo e inolvidable para mí y para Agustín, que es un gran jugador”, dijo el joven del modesto barrio Planta de Gas.

Con Coloccini

En el Nuevo Gasómetro, “Cachete” compartió entrenamiento, por ejemplo, con Fabricio Coloccini, exfutbolista de la Selección Argentina, Boca, Atlético de Madrid, Newcastle y Milan. “Estaban todos los titulares porque San Lorenzo jugaba al otro día por la Superliga. Me impresionaron todos. No les dije nada, me daba vergüenza hablar”, comentó sonriente.

“En Trelew, todos en mi familia están muy contentos. Dicen que disfrute esto al máximo y que siempre tengo que ser la misma persona. Ellos me van a acompañar en todo”, comentó.

Su presente

Tímido al momento de dialogar, en el césped desata su talento y su fuerza de voluntad. Esos dos atributos le han permitido abrirse camino en las formativas sanlorencistas.

“Me está yendo bien, gracias a Dios. Estoy jugando de titular por suerte y trato de disfrutar al máximo”, reseñó.

“Aprendo y aprendí muchas cosas en lo individual y colectivo. Me enseñaron cosas nuevas y lo mejor es que hay que trabajar duro y aprender para no quedarse”, remarcó Roa, que en San Lorenzo fue reconvertido a delantero.

“Siempre fui volante. Pero Gastón Rojas, el técnico de Octava, apenas arranqué a jugar en 2016, me dijo que en esa posición iba andar bien y gracias a Dios está todo más que bien”, detalló el atacante, que también mantiene el nivel académico que tenía en Trelew.

“Estoy en tercer año. Me va bastante bien en el colegio. San Lorenzo tiene una escuela para los chicos del club, a donde van también pibes de la villa que está cerca del estadio”, comentó Roa, que fue abanderado de la escuela del Codepro, la 122.

Tal como se observa, su debut récord en el Cayetano Castro aquel 24 de abril de 2016, no es un tema central y recurrente en la conversación desde la pensión “Azulgrana”.

“Me lo tomo como algo lindo que me pasó desde que juego al fútbol y una linda experiencia”, resaltó Roa, una incubadora permanente de sueños.

Sus nuevos sueños

Tras la primera práctica con el plantel profesional de San Lorenzo de Almagro, “Cachete” se ha trazado nuevas metas.

“Mi objetivo es seguir en San Lorenzo y el año que viene ya apuntar a Reserva y si Dios quiere intentar meterme en la Selección Argentina”, concluyó.

Darío Roa, el joven nacido para soñar que sigue dando pequeños pasos de gigante sin perder la brújula.#

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Darío Roa (der.) el día de la primera práctica. Posa con Agustín Barrenechea.
15 NOV 2018 - 21:01

El 24 de abril del 2016, el chubutense Darío Roa hizo historia en el fútbol argentino.

A sus 13 años, el adolescente debutó con los colores de Racing Club de Trelew, en el triunfo por 1-0 ante Cruz del Sur, por la última fecha de la fase inicial del Federal B 2016 de transición.

“Cachete” se convirtió así, sin evidencia que pruebe lo contrario, en el futbolista más joven en disputar un partido organizado por la Asociación del Fútbol Argentino.

Primera práctica

A dos años y medio de aquel suceso, Darío milita en las Inferiores de San Lorenzo de Almagro, club que lo fichó a finales del 2016.

El pasado 3 de noviembre, el joven chubutense, que habitualmente juega en la Séptima división del “Cuervo”, se entrenó por primera vez con el plantel profesional del club presidido por Matías Lammens y Marcelo Tinelli.

“Terminamos de entrenar y estaba en la pensión acostado. Nos dice Diego Monarriz (NdR: técnico interino de San Lorenzo) que tengo que ir a entrenar con Primera”, le comentó Roa a Jornada.

En ese entrenamiento, también fue citado Agustín Barrenechea, otro de los jóvenes surgidos de la “Academia” trelewense.

“La primera práctica fue muy buena. Hicimos fútbol táctico en el estadio; fue un día muy lindo e inolvidable para mí y para Agustín, que es un gran jugador”, dijo el joven del modesto barrio Planta de Gas.

Con Coloccini

En el Nuevo Gasómetro, “Cachete” compartió entrenamiento, por ejemplo, con Fabricio Coloccini, exfutbolista de la Selección Argentina, Boca, Atlético de Madrid, Newcastle y Milan. “Estaban todos los titulares porque San Lorenzo jugaba al otro día por la Superliga. Me impresionaron todos. No les dije nada, me daba vergüenza hablar”, comentó sonriente.

“En Trelew, todos en mi familia están muy contentos. Dicen que disfrute esto al máximo y que siempre tengo que ser la misma persona. Ellos me van a acompañar en todo”, comentó.

Su presente

Tímido al momento de dialogar, en el césped desata su talento y su fuerza de voluntad. Esos dos atributos le han permitido abrirse camino en las formativas sanlorencistas.

“Me está yendo bien, gracias a Dios. Estoy jugando de titular por suerte y trato de disfrutar al máximo”, reseñó.

“Aprendo y aprendí muchas cosas en lo individual y colectivo. Me enseñaron cosas nuevas y lo mejor es que hay que trabajar duro y aprender para no quedarse”, remarcó Roa, que en San Lorenzo fue reconvertido a delantero.

“Siempre fui volante. Pero Gastón Rojas, el técnico de Octava, apenas arranqué a jugar en 2016, me dijo que en esa posición iba andar bien y gracias a Dios está todo más que bien”, detalló el atacante, que también mantiene el nivel académico que tenía en Trelew.

“Estoy en tercer año. Me va bastante bien en el colegio. San Lorenzo tiene una escuela para los chicos del club, a donde van también pibes de la villa que está cerca del estadio”, comentó Roa, que fue abanderado de la escuela del Codepro, la 122.

Tal como se observa, su debut récord en el Cayetano Castro aquel 24 de abril de 2016, no es un tema central y recurrente en la conversación desde la pensión “Azulgrana”.

“Me lo tomo como algo lindo que me pasó desde que juego al fútbol y una linda experiencia”, resaltó Roa, una incubadora permanente de sueños.

Sus nuevos sueños

Tras la primera práctica con el plantel profesional de San Lorenzo de Almagro, “Cachete” se ha trazado nuevas metas.

“Mi objetivo es seguir en San Lorenzo y el año que viene ya apuntar a Reserva y si Dios quiere intentar meterme en la Selección Argentina”, concluyó.

Darío Roa, el joven nacido para soñar que sigue dando pequeños pasos de gigante sin perder la brújula.#


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