Empate con sabor a hiel para la Banda portuaria en Trelew
Guillermo Brown no logró resistir los embates de Villa Dálmine y cedió dos unidades. Tras un primer tiempo anodino, marcó dos goles a través de pelotas paradas. Sin embargo, cedió ante el ímpetu del "Viola" y no pudo sumar la segunda victoria del torneo. El equipo conducido por Luciano Theiler, que sumó ayer el quinto empate consecutivo, visitará el próximo domingo a Gimnasia, en Mendoza.
Por Francisco Caputo
Guillermo Brown resignó otros dos puntos en la Primera B Nacional. No logró sostener una ventaja de dos goles ante Villa Dálmine, que a falta de un minuto para el final concretó el empate y selló el 2-2 en el Cayetano Castro.
Denso primer tiempo
La ausencia de creatividad signó el primer tiempo. Al igual que en el encuentro ante Platense, Guillermo Brown mostró dificultades para crear juego ofensivo.
Luciano Theiler, entrenador de la “Banda”, dispuso un cambio de sistema y de nombres para encontrar claros caminos ofensivos.
Para consumar ese fin, diagramó sobre el campo de juego una línea de tres atacantes, con Jorge Velázquez de eje y Franco Niell y Lautaro Parisi. No rindió los frutos deseados.
Durante el primer tiempo, el club portuario no logró gestar ninguna situación de gol. Villa Dálmine, replegado, con disciplina y orden, anuló al plan de Theiler sin producir situaciones a favor.
Aquello más cercano a una opción de gol fue una sujecion en el área browniana a los 27 minutos, que fue ignorado por Pedro Argañaraz, árbitro del encuentro.
De pelota parada
El segundo período comenzó con una advertencia del “Viola”. A los 9 minutos, Federico Jourdán , al borde del área chica browniana, efectuó un remate desviado que provocó zozobras en Guillermo Brown.
La réplica browniana fue letal. Dos minutos despúes, tras un preciso saque de esquina de Jorge Velázquez, el trelewense Franco Niell, con un atinado remate de cabeza, abrió el marcador.
De balón quieto, la “Banda” amplió la brecha el tanteador a los 17 minutos. Desde el mismo flanco, el izquierda, Velázquez ejecutó un saque de esquina ferozmente conectado de cabeza por Christian Cepeda.
La pelota parada, la herramienta de ataque por excelencia del pasado Mundial, le brindaba a la “Banda” inmensas satisfacciones en el Cayetano Castro.
Agua entre los dedos
Esa misma vía le aportó incertidumbre al cotejo. A los 25, tras un tiro libre frontal, Villa Dálmine conquistó el descuento. Nicolás Sansotre, de cabeza, marcó el tanto tras una respuesta lenta de Giovini, golero portuario.
La incertidumbre se apoderó del cotejo. La tranquilidad tras la anotación de dos goles, se evaporó con rapidez. La visita, sin nitidez pero con insistencia, empezó a ejercer presión en busca de la paridad.
Por su parte, el equipo de Theiler se replegó a la espera de un contragolpe definitorio. En ese contexto, se ingresó en el terreno del toma y daca frenético e incesante.
A los 31, Ijiel Protti, atacante visitante realizó un remate sin precisión que encendió temores. A falta de diez minutos, Juan Doboletta, arquero visitante, detuvo con maestría un remate de Fabián Monserrat, ingresado sesenta segundos antes. A los 44, otro sustituto ingresado, Marcelo Estigarribia arruinó la victoria browniana. El delantero estampó la igualdad con un furibundo remate desde fuera del área que halló otro frágil respuesta de Giovini.
El 2-2 privó a Guillermo Brown de sumar su segunda victoria. Tendrá una nueva oportunidad para hacerlo en Mendoza, cuando visite a Gimnasia, el próximo domingo a partir de las 17;30.
Por Francisco Caputo
Guillermo Brown resignó otros dos puntos en la Primera B Nacional. No logró sostener una ventaja de dos goles ante Villa Dálmine, que a falta de un minuto para el final concretó el empate y selló el 2-2 en el Cayetano Castro.
Denso primer tiempo
La ausencia de creatividad signó el primer tiempo. Al igual que en el encuentro ante Platense, Guillermo Brown mostró dificultades para crear juego ofensivo.
Luciano Theiler, entrenador de la “Banda”, dispuso un cambio de sistema y de nombres para encontrar claros caminos ofensivos.
Para consumar ese fin, diagramó sobre el campo de juego una línea de tres atacantes, con Jorge Velázquez de eje y Franco Niell y Lautaro Parisi. No rindió los frutos deseados.
Durante el primer tiempo, el club portuario no logró gestar ninguna situación de gol. Villa Dálmine, replegado, con disciplina y orden, anuló al plan de Theiler sin producir situaciones a favor.
Aquello más cercano a una opción de gol fue una sujecion en el área browniana a los 27 minutos, que fue ignorado por Pedro Argañaraz, árbitro del encuentro.
De pelota parada
El segundo período comenzó con una advertencia del “Viola”. A los 9 minutos, Federico Jourdán , al borde del área chica browniana, efectuó un remate desviado que provocó zozobras en Guillermo Brown.
La réplica browniana fue letal. Dos minutos despúes, tras un preciso saque de esquina de Jorge Velázquez, el trelewense Franco Niell, con un atinado remate de cabeza, abrió el marcador.
De balón quieto, la “Banda” amplió la brecha el tanteador a los 17 minutos. Desde el mismo flanco, el izquierda, Velázquez ejecutó un saque de esquina ferozmente conectado de cabeza por Christian Cepeda.
La pelota parada, la herramienta de ataque por excelencia del pasado Mundial, le brindaba a la “Banda” inmensas satisfacciones en el Cayetano Castro.
Agua entre los dedos
Esa misma vía le aportó incertidumbre al cotejo. A los 25, tras un tiro libre frontal, Villa Dálmine conquistó el descuento. Nicolás Sansotre, de cabeza, marcó el tanto tras una respuesta lenta de Giovini, golero portuario.
La incertidumbre se apoderó del cotejo. La tranquilidad tras la anotación de dos goles, se evaporó con rapidez. La visita, sin nitidez pero con insistencia, empezó a ejercer presión en busca de la paridad.
Por su parte, el equipo de Theiler se replegó a la espera de un contragolpe definitorio. En ese contexto, se ingresó en el terreno del toma y daca frenético e incesante.
A los 31, Ijiel Protti, atacante visitante realizó un remate sin precisión que encendió temores. A falta de diez minutos, Juan Doboletta, arquero visitante, detuvo con maestría un remate de Fabián Monserrat, ingresado sesenta segundos antes. A los 44, otro sustituto ingresado, Marcelo Estigarribia arruinó la victoria browniana. El delantero estampó la igualdad con un furibundo remate desde fuera del área que halló otro frágil respuesta de Giovini.
El 2-2 privó a Guillermo Brown de sumar su segunda victoria. Tendrá una nueva oportunidad para hacerlo en Mendoza, cuando visite a Gimnasia, el próximo domingo a partir de las 17;30.