Las "Valletanas", con los ovarios bien puestos

A 24 horas de haber sido afectada por un cuadro masivo de intoxicación alimentaria, la selección femenina de la Liga del Valle jugó el partido definitorio ante Paraná. La derrota por 4-2 privó al equipo de su primera clasificación a semifinales en el Nacional femenino del Interior. Sin embargo, no logró opacar el despliegue actitudinal de las futbolistas chubutenses. Las causas de la intoxicación no están claras.

29 NOV 2018 - 20:54 | Actualizado

Como Artemisia en la guerra del Pelopenso, las “Valletanas” desplegaron ayer un inmenso coraje ante la adversidad que no fue suficiente para consumar el objetivo deseado. Pese a haber realizado un esfuerzo titánico, el seleccionado femenino de la Liga del Valle recibió un 4-2 de parte de Paraná, en el último partido de la Zona B del Nacional femenino del Interior que se disputa en Mendoza.

Esta derrota implicó que el anhelo de clasificar a semifinales por primera vez, sigue siendo un objetivo a consumar.

La derrota no logra ensombrecer el despliegue actitudinal de las futbolistas chubutenses. El miércoles, siete titulares sufrieron una intoxicación alimentaria, cuyas causas no han sido determinadas con claridad. Ese episodio motivó la postergación del cotejo, que se disputó ayer.

Rocío Argáñaraz, Nuria Lamela, Victoria Cayo, Mariana Riveros, Luisina Bossio, Julia Segundo y Eva Schmid fueron víctimas de una situación que afectó a la mayoría de las delegaciones. A 24 horas de aquel percance médico, dichas futbolistas se alinearon en la cancha de Godoy Cruz para intentar lograr el pase de fase.

La intoxicación

Magdalena Suraci, encargada del comité organizador del torneo, indicó que el agua corriente mendocina, potabilizada con un agresivo proceso, fue la responsable.

Sin embargo, no se descarta que la comida proporcionada por la organización haya sido la causa de la intoxicación.

Deberán determinarse con claridad el origen y la responsabilidad de los sucesos descriptos, dado que condicionaron indudablemente el desarrollo del encuentro. La comitiva de Paraná también tuvo futbolistas afectadas, que además sufrieron desmayos por este hecho.

Vale resaltar que La Plata, otra de las selecciones damnificadas, remitió una queja al Consejo Federal, donde manifiesta malestar por la alimentación y los lugares de alojamiento. Eliminada, pidió suspender el torneo.

Breve esperanza

En los albores del partido, se encendió la esperanza para las “Valletanas”. Yuliana Enrique, delantera de Alumni y segunda máxima goleadora del pasado Apertura, abrió el marcador.Con ese resultado, el combinado liguista clasificaba a semifinales.

Sin embargo, Paraná, en un abrir y cerrar de ojos, fulminó los anhelos chubutenses. En un breve lapso, conquistó tres goles a favor, un cimbronazo para el ánimo del seleccionado liguista.

Al inicio del segundo tiempo, Schmid logró el descuento. Con esa anotación, la artillera de Huracán, de 43 años, se convirtió en la máxima goleadora chubutense en torneos del Consejo Federal. Suma tres.

Ese gol abrió una nueva puerta a la clasificación, dado que el tiempo era un aliado para revertir el marcador y soñar con la utopía. Solo la victoria permitía el acceso a las semifinales del certamen. Pero a falta de ocho minutos para el final, el elenco entrerriano anotó su cuarto tanto y selló el destino del cotejo.

Era una ocasión ideal para conquistar el primer pase a semifinales. El azar había ubicado a las “Valletanas” en una zona sin los máximos favoritos.

Pero no debe haber reproches para ellas. Las futbolistas no se amilanaron, al igual que en el Nacional 2017. Con la intoxicación aún fresca, enaltecieron al máximo la práctica de este deporte. Han vuelto a demostrar que para ellas el corazón es innegociable.

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29 NOV 2018 - 20:54

Como Artemisia en la guerra del Pelopenso, las “Valletanas” desplegaron ayer un inmenso coraje ante la adversidad que no fue suficiente para consumar el objetivo deseado. Pese a haber realizado un esfuerzo titánico, el seleccionado femenino de la Liga del Valle recibió un 4-2 de parte de Paraná, en el último partido de la Zona B del Nacional femenino del Interior que se disputa en Mendoza.

Esta derrota implicó que el anhelo de clasificar a semifinales por primera vez, sigue siendo un objetivo a consumar.

La derrota no logra ensombrecer el despliegue actitudinal de las futbolistas chubutenses. El miércoles, siete titulares sufrieron una intoxicación alimentaria, cuyas causas no han sido determinadas con claridad. Ese episodio motivó la postergación del cotejo, que se disputó ayer.

Rocío Argáñaraz, Nuria Lamela, Victoria Cayo, Mariana Riveros, Luisina Bossio, Julia Segundo y Eva Schmid fueron víctimas de una situación que afectó a la mayoría de las delegaciones. A 24 horas de aquel percance médico, dichas futbolistas se alinearon en la cancha de Godoy Cruz para intentar lograr el pase de fase.

La intoxicación

Magdalena Suraci, encargada del comité organizador del torneo, indicó que el agua corriente mendocina, potabilizada con un agresivo proceso, fue la responsable.

Sin embargo, no se descarta que la comida proporcionada por la organización haya sido la causa de la intoxicación.

Deberán determinarse con claridad el origen y la responsabilidad de los sucesos descriptos, dado que condicionaron indudablemente el desarrollo del encuentro. La comitiva de Paraná también tuvo futbolistas afectadas, que además sufrieron desmayos por este hecho.

Vale resaltar que La Plata, otra de las selecciones damnificadas, remitió una queja al Consejo Federal, donde manifiesta malestar por la alimentación y los lugares de alojamiento. Eliminada, pidió suspender el torneo.

Breve esperanza

En los albores del partido, se encendió la esperanza para las “Valletanas”. Yuliana Enrique, delantera de Alumni y segunda máxima goleadora del pasado Apertura, abrió el marcador.Con ese resultado, el combinado liguista clasificaba a semifinales.

Sin embargo, Paraná, en un abrir y cerrar de ojos, fulminó los anhelos chubutenses. En un breve lapso, conquistó tres goles a favor, un cimbronazo para el ánimo del seleccionado liguista.

Al inicio del segundo tiempo, Schmid logró el descuento. Con esa anotación, la artillera de Huracán, de 43 años, se convirtió en la máxima goleadora chubutense en torneos del Consejo Federal. Suma tres.

Ese gol abrió una nueva puerta a la clasificación, dado que el tiempo era un aliado para revertir el marcador y soñar con la utopía. Solo la victoria permitía el acceso a las semifinales del certamen. Pero a falta de ocho minutos para el final, el elenco entrerriano anotó su cuarto tanto y selló el destino del cotejo.

Era una ocasión ideal para conquistar el primer pase a semifinales. El azar había ubicado a las “Valletanas” en una zona sin los máximos favoritos.

Pero no debe haber reproches para ellas. Las futbolistas no se amilanaron, al igual que en el Nacional 2017. Con la intoxicación aún fresca, enaltecieron al máximo la práctica de este deporte. Han vuelto a demostrar que para ellas el corazón es innegociable.


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