Los mata-billeteras dieron otra función y sueñan con el pase a la siguiente ronda
Racing Club de Trelew, equipo de presupuesto muy limitado, vapuleó por 4-0 a USMA y mantuvo la segunda posición de la Zona 3 de la Patagonia. Con autoridad, demolió al "Patricio" y quedó en el umbral de la segunda fase del torneo. Con nueve puntos en juego, le sacó seis a la CAI, el cuarto posicionado, a quien visita en la próxima fecha.
Con sus modestas pero eficientes herramientas, Racing Club de Trelew volvió a hacerse oír en el sur del país.
Sin presupuesto abultado pero con un sólido funcionamiento colectivo, conquistó una victoria imponente.
Sin miedo escénico, tras vapulear por 4-0 a USMA, retuvo el segundo puesto de la Zona 3 de la Patagonia que lo ubicó en los umbrales de la clasificación.
Dominio indiscutible
La diferencia entre el segundo y el último de la tabla de posiciones quedó en evidencia desde el silbatazo inicial.
Racing Club sacó ventaja de las falencias defensivas de USMA, cuya herramienta recurrente para frenar los ataques rivales fue el foul violento. Los huecos ofrecidos por el “Patricio” comodorense eran sumamente evidentes.
Por ende, el pelotazo largo cruzado a espalda de los zagueros, por lo general lanzado por Oscar Chiquichano, fue el recurso preponderante de ataque del “Albirrojo”. A eso se sumó la floja y lenta transición defensiva de la vista tras efectuar un ataque.
Pese a la superioridad sobre el césped, Racing Club conquistó el gol después de la primera media hora de partido.
Anteriormente, había gestado únicamente dos ocasiones de gol. Al minuto de juego, un disparo de Brian Castillo fue despejado en la línea de gol. A los dieciocho, envió por encima del travesaño una volea realizada en el área chica.
No abrir el marcador ante un oponente inferior puede causar dolores de cabeza. De hecho, hubo zozobra en el área racinguista a los once minutos. Un tiro libre frontal fue providencialmente desviado al saque de esquina. Además, la intención comodorense de incursionar por izquierda a través de Eric Castro era permanente.
La superioridad en la red
Por ende plasmar la hegemonía en el campo de juego en la red no admitía demoras. Eso sucedió a los treinta minutos, cuando Martín Bataller inauguró el tanteador en el Cayetano Castro, tras una maniobra por derecha de Kevin Garay y Castillo..
Tras esa sucesión de toques, la pelota le quedó servida al “Piojo” en el sector izquierdo, quien doblegó a Lucas Pierrasteguy con un remate en las cercanías del vértice del área. Sin mucha potencia, el balón ingresó al primer palo del golero, que no logró reaccionar eficazmente.
A los 44, el dueño de casa logró superior tranquilidad. Un minuto antes, Nehuén Pereyra asistió a Rodrigo Béliz desde el flanco izquierdo, quien encontró una sólida respuesta de Pierrasteguy. Pero el artillero disfrutó de su revancha personal inmediatamente, cuando incrementó la diferencia, de cabeza, luego de una asistencia de Bataller.
Historia sentenciada
En la etapa final, Racing Club sepultó con prontitud cualquier intento de resurrección del frágil visitante, desmoronado por el tanto de Béliz cerca del entretiempo..
Chiquichano, a los 13 minutos, transformó la victoria len goleada. Tras un despeje fallido de Pierrasteguy, el mediocampista central derrotó desde fuera del área al arquero del elenco comodorense, que se quedó petrificado. La victoria estaba sellada.
La disputa del tiempo restante fue una formalidad, donde Racing aumentó el marcador sin encontrar firme resistencia de su oponente. Garay, en su partido afista número 100 con la camiseta “Albirroja”, trocó un penal por el 4-0 a los 39 minutos.
Los mata-billeteras, al poder
Antes del inicio de la temporada , un poderío económico inexistente limitaba las aspiraciones de Racing Club. Sin embargo, el plantel "Albirrojo" no se dejó intimidar por los nombres propios de los clubes de Comodoro Rivadavia y de J.J, Moreno. El presente es distinto.
En la Zona 3 avanzan tres equipos a los cruces. El triunfo le permitió a Racing aventajar a la CAI, el cuarto, en seis puntos, cuando restan por jugarse nueve. El "Azzurro" es el próximo rival del "Albirrojo", de visitante.
La leyenda de los jugadores mata-billeteras de la "Academia" continúa y sueña con aterrizar en la segunda fase.
Con sus modestas pero eficientes herramientas, Racing Club de Trelew volvió a hacerse oír en el sur del país.
Sin presupuesto abultado pero con un sólido funcionamiento colectivo, conquistó una victoria imponente.
Sin miedo escénico, tras vapulear por 4-0 a USMA, retuvo el segundo puesto de la Zona 3 de la Patagonia que lo ubicó en los umbrales de la clasificación.
Dominio indiscutible
La diferencia entre el segundo y el último de la tabla de posiciones quedó en evidencia desde el silbatazo inicial.
Racing Club sacó ventaja de las falencias defensivas de USMA, cuya herramienta recurrente para frenar los ataques rivales fue el foul violento. Los huecos ofrecidos por el “Patricio” comodorense eran sumamente evidentes.
Por ende, el pelotazo largo cruzado a espalda de los zagueros, por lo general lanzado por Oscar Chiquichano, fue el recurso preponderante de ataque del “Albirrojo”. A eso se sumó la floja y lenta transición defensiva de la vista tras efectuar un ataque.
Pese a la superioridad sobre el césped, Racing Club conquistó el gol después de la primera media hora de partido.
Anteriormente, había gestado únicamente dos ocasiones de gol. Al minuto de juego, un disparo de Brian Castillo fue despejado en la línea de gol. A los dieciocho, envió por encima del travesaño una volea realizada en el área chica.
No abrir el marcador ante un oponente inferior puede causar dolores de cabeza. De hecho, hubo zozobra en el área racinguista a los once minutos. Un tiro libre frontal fue providencialmente desviado al saque de esquina. Además, la intención comodorense de incursionar por izquierda a través de Eric Castro era permanente.
La superioridad en la red
Por ende plasmar la hegemonía en el campo de juego en la red no admitía demoras. Eso sucedió a los treinta minutos, cuando Martín Bataller inauguró el tanteador en el Cayetano Castro, tras una maniobra por derecha de Kevin Garay y Castillo..
Tras esa sucesión de toques, la pelota le quedó servida al “Piojo” en el sector izquierdo, quien doblegó a Lucas Pierrasteguy con un remate en las cercanías del vértice del área. Sin mucha potencia, el balón ingresó al primer palo del golero, que no logró reaccionar eficazmente.
A los 44, el dueño de casa logró superior tranquilidad. Un minuto antes, Nehuén Pereyra asistió a Rodrigo Béliz desde el flanco izquierdo, quien encontró una sólida respuesta de Pierrasteguy. Pero el artillero disfrutó de su revancha personal inmediatamente, cuando incrementó la diferencia, de cabeza, luego de una asistencia de Bataller.
Historia sentenciada
En la etapa final, Racing Club sepultó con prontitud cualquier intento de resurrección del frágil visitante, desmoronado por el tanto de Béliz cerca del entretiempo..
Chiquichano, a los 13 minutos, transformó la victoria len goleada. Tras un despeje fallido de Pierrasteguy, el mediocampista central derrotó desde fuera del área al arquero del elenco comodorense, que se quedó petrificado. La victoria estaba sellada.
La disputa del tiempo restante fue una formalidad, donde Racing aumentó el marcador sin encontrar firme resistencia de su oponente. Garay, en su partido afista número 100 con la camiseta “Albirroja”, trocó un penal por el 4-0 a los 39 minutos.
Los mata-billeteras, al poder
Antes del inicio de la temporada , un poderío económico inexistente limitaba las aspiraciones de Racing Club. Sin embargo, el plantel "Albirrojo" no se dejó intimidar por los nombres propios de los clubes de Comodoro Rivadavia y de J.J, Moreno. El presente es distinto.
En la Zona 3 avanzan tres equipos a los cruces. El triunfo le permitió a Racing aventajar a la CAI, el cuarto, en seis puntos, cuando restan por jugarse nueve. El "Azzurro" es el próximo rival del "Albirrojo", de visitante.
La leyenda de los jugadores mata-billeteras de la "Academia" continúa y sueña con aterrizar en la segunda fase.