Familiares y amigos de Sergio “Teko” Chapingo, el joven asesinado el último fin de semana, se manifestaron ayer en la puerta del Ministerio Público Fiscal de Trelew. Exigen justicia por la muerte del joven y aseguran que no fue un “ajuste de cuentas”. El principal sospechoso sigue prófugo.
La madre y primos de Chapingo indicaron a Jornada que “este crimen no puede quedar impune. El asesino tiene que estar preso. Anda por las calles como si nada luego de matarlo. No fue un ajuste de cuentas como dijeron. Lo asesinaron”, indicaron.
Se conocían
Sobre el vínculo del fallecido con quien lo mató coincidieron en afirmar que “se conocían del barrio. El asesino tenía problemas con otras personas y se la agarraba con cualquiera. Amenazaba y mataba a quien quería. No es la primera vez que persiguió a alguien”, indicaron.
Reiteraron que “queremos que no digan que fue un ajuste de cuentas. Él fue a conocer a la familia de su novia. Ella lo acompañó cerca de una biblioteca. Estaba con nosotros tomando mates, salió y no volvió nunca. A él ya lo venían siguiendo. Sergio tiene a sus padres y sobrinos. El vivía con sus primos. Queremos justicia”.
Familiares y amigos de Sergio “Teko” Chapingo, el joven asesinado el último fin de semana, se manifestaron ayer en la puerta del Ministerio Público Fiscal de Trelew. Exigen justicia por la muerte del joven y aseguran que no fue un “ajuste de cuentas”. El principal sospechoso sigue prófugo.
La madre y primos de Chapingo indicaron a Jornada que “este crimen no puede quedar impune. El asesino tiene que estar preso. Anda por las calles como si nada luego de matarlo. No fue un ajuste de cuentas como dijeron. Lo asesinaron”, indicaron.
Se conocían
Sobre el vínculo del fallecido con quien lo mató coincidieron en afirmar que “se conocían del barrio. El asesino tenía problemas con otras personas y se la agarraba con cualquiera. Amenazaba y mataba a quien quería. No es la primera vez que persiguió a alguien”, indicaron.
Reiteraron que “queremos que no digan que fue un ajuste de cuentas. Él fue a conocer a la familia de su novia. Ella lo acompañó cerca de una biblioteca. Estaba con nosotros tomando mates, salió y no volvió nunca. A él ya lo venían siguiendo. Sergio tiene a sus padres y sobrinos. El vivía con sus primos. Queremos justicia”.