La economía al rojo vivo

Cinco frentes que encienden una luz roja en la economía de Chubut para los próximos meses. Qué pasará con el pago de sueldos y la obra social. Ya empezaron a reducir el suministro de energía a las cooperativas y se sumará un nuevo vencimiento de deuda trimestral de más de 1.000 millones.

20 JUL 2019 - 20:37 | Actualizado

La economía de Chubut tras cerrar un año con las cuentas en positivo durante los últimos meses de 2018 vuelve al ciclo negativo, con un déficit mensual que se va agrandando y con dificultades que se acentuaron como se evidenció con el retraso en el pago de los sueldos y del aguinaldo.

Hoy la masa salarial para pagar los sueldos y jubilaciones con aportes está en el orden de los 3.200 millones de pesos, lo que equivale al doble de las erogaciones de un año atrás. Cierto es que ya pasó el mes del aguinaldo, pero casi de forma inmediata, con los haberes de julio se tendrá que aplicar la claúsula gatillo para gran parte de la administración pública, tal como se acordó en paritarias.

El índice que se utilizará fue la variación de los precios del trimestre anterior, es decir durante los meses de abril, mayo y junio. El incremento acumulado de los precios para ese período en la Patagonia fue del 9,7%. Un 3,5% en abril, 3,4% en mayo y los últimos datos del 2,8% durante junio. Más adelante, en octubre se activará nuevamente la cláusula para el trimestre de julio, agosto y septiembre. Y habrá una nueva ronda de negociaciones. Eso es lo que viene en el horizonte.

Más acá en el tiempo, quizás la semana que comienza, el Gobierno tendrá que empezar a pagar los aumentos de sueldos correspondientes a junio que no abonó en una gran cantidad de sectores de la administración pública. Sumado a retroactivos y adicionales que se adeudan.

Y quedan tan sólo 10 días para juntar todos los fondos propios, de la coparticipación y por las regalías petroleras para llegar en tiempo y forma con los haberes de julio. Una tarea que parece más que complicada teniendo en cuenta lo que pasó durante estas semanas, y pese a que el Gobierno niegue el escalonamiento o lo que ya se está materializando como pago por sectores de la administración pública.

La obra social provincial está directamente relacionada con el retraso del pago de los haberes, ya que al mismo tiempo deben girarse los aportes. Esto generó retrasos y cortes en las prestaciones tal como ocurrió durante todo 2018. Si bien se han acortado los plazos de pago, las complicaciones en las arcas provinciales vuelven a poner un manto de incertidumbre.

El argumento es que han bajado las regalías, y los recursos transferidos desde Nación, con la eliminación del Fondo Sojero (700 millones se calculaban para Chubut este año). Sumado a una baja de la coparticipación en términos reales que se estima en 5 puntos, al perder contra la inflación. Y los subsidios al transporte. Sumado a una baja de la coparticipación en términos reales que se estima en 5 puntos, al perder contra la inflación.

Justamente el transporte es otro de los puntos que ha explotado en simultáneo. La quita del subsidio de Nación desbalanceó el sistema, más allá del incremento del boleto en los distintos municipios. Durante 2018 Nación aportó en subsidios 34 millones de pesos por mes, es decir 408 millones de pesos al año para la provincia. De ello tan sólo quedarán tan sólo por 2019 50 millones de pesos, a partir de un fondo creador a tal fin y que se reparte en todas las provincias.

De esta manera el presupuesto provincial para el transporte se incrementó en 2019 más de un 150%. Teniendo en cuenta que a valores actualizados, Nación en lugar de los 408 millones, debería desembolsar casi 500 millones.

La Provincia presupuestó por mes para cubrir el subsidio al transporte y el sostenimiento del TEG 49 millones de pesos, contra los 18 millones mensuales que se destinaban el año pasado.

Primeros en el ranking

Chubut hoy aparece primero en el ranking de morosos de la empresa mayorista de energía Cammesa. Es luego que las provincias de Chaco y Corrientes saldaran sus deudas. Se acumula una deuda que ya supera los 4.000 millones de pesos y que crece mes a mes, mientras todavía hay indefiniciones sobre cómo se avanzará con la cancelación.

Para el Gobierno es una “papa caliente”, ya que la mayorista decidió acelerar a fondo y notificó mediante Carta Documento a las principales cooperativas de la provincia, poniéndolas bajo la calificación de “moroso crónico” y con la advertencia de reducir un 10% la potencia del suministro energético.

Desde la Federación de Cooperativas se sentó la postura de no realizar un recorte de la potencia y esperar cuáles pueden ser las represalias de las mayoristas.

Primero fueron los embargos, luego llegó la primera reducción en la potencia de energía, que se materializó con Rawson, con la intervención de la línea de Transpa por orden de Cammesa.

En caso de no haber pronta solución, una de las medidas que las prestatarias amenazan con tomar es devolver el principal servicio deficitario al poder concedente de los municipios, que es la administración de Agua y Cloacas. Lo que provocaría mayores dolores de cabeza para un Estado que hoy no parece poder cumplir con las obligaciones básicas.

Vencimientos y obras

En los próximos meses se sumarán a los abultados vencimientos de deuda trimestrales la amortización de capital del bono de 650 millones de dólares que se colocó en los mercados a mediados de 2016. En octubre se tendrá que pagar capital además de los intereses. Trimestralmente se sumaría una fuerte suma de más de 1.000 millones, más los intereses, lo que puede generar un agujero muy importante. Esto más allá que uno de los Bodic 1 emitido por la gestión Buzzi ya habrá sido cancelado, lo que dará algo de respiro.

Frente a este panorama, se está acelerando el proyecto para la reestructuración para cambiar el perfil de la deuda y llevar para adelanto la cancelación de las acreencias. De todos modos, ello implicará tener que salir nuevamente a los mercados internacionales para conseguir una tasa acorde, lo que en la inestabilidad lógica de un proceso electoral que aún falta definir este año seguirá demorando.

Respecto al plan de obras públicas, el Gobierno Provincial ya está pensando en un ajuste de los gastos, que incluiría avanzar con las ejecuciones pendientes pero a un ritmo más lento. Esto con el objetivo de cuidar los recursos y estirar el dinero hasta tanto se puedan equilibrar las cuentas.

Al ya resentido plan de obras públicas nacionales, también se le sumará ahora un recorte de lo que le toca hacer a la Provincia, ya sea a través de Vialidad Provincial en relación a los caminos, o con el IPV en el Plan de viviendas.

Además ya se proyecta un achique de gastos general que incluiría los alquileres, y también otras erogaciones superfluas como viáticos o uso de celulares.

Enterate de las noticias de ECONOMIA a través de nuestro newsletter

Anotate para recibir las noticias más importantes de esta sección.

Te podés dar de baja en cualquier momento con un solo clic.
20 JUL 2019 - 20:37

La economía de Chubut tras cerrar un año con las cuentas en positivo durante los últimos meses de 2018 vuelve al ciclo negativo, con un déficit mensual que se va agrandando y con dificultades que se acentuaron como se evidenció con el retraso en el pago de los sueldos y del aguinaldo.

Hoy la masa salarial para pagar los sueldos y jubilaciones con aportes está en el orden de los 3.200 millones de pesos, lo que equivale al doble de las erogaciones de un año atrás. Cierto es que ya pasó el mes del aguinaldo, pero casi de forma inmediata, con los haberes de julio se tendrá que aplicar la claúsula gatillo para gran parte de la administración pública, tal como se acordó en paritarias.

El índice que se utilizará fue la variación de los precios del trimestre anterior, es decir durante los meses de abril, mayo y junio. El incremento acumulado de los precios para ese período en la Patagonia fue del 9,7%. Un 3,5% en abril, 3,4% en mayo y los últimos datos del 2,8% durante junio. Más adelante, en octubre se activará nuevamente la cláusula para el trimestre de julio, agosto y septiembre. Y habrá una nueva ronda de negociaciones. Eso es lo que viene en el horizonte.

Más acá en el tiempo, quizás la semana que comienza, el Gobierno tendrá que empezar a pagar los aumentos de sueldos correspondientes a junio que no abonó en una gran cantidad de sectores de la administración pública. Sumado a retroactivos y adicionales que se adeudan.

Y quedan tan sólo 10 días para juntar todos los fondos propios, de la coparticipación y por las regalías petroleras para llegar en tiempo y forma con los haberes de julio. Una tarea que parece más que complicada teniendo en cuenta lo que pasó durante estas semanas, y pese a que el Gobierno niegue el escalonamiento o lo que ya se está materializando como pago por sectores de la administración pública.

La obra social provincial está directamente relacionada con el retraso del pago de los haberes, ya que al mismo tiempo deben girarse los aportes. Esto generó retrasos y cortes en las prestaciones tal como ocurrió durante todo 2018. Si bien se han acortado los plazos de pago, las complicaciones en las arcas provinciales vuelven a poner un manto de incertidumbre.

El argumento es que han bajado las regalías, y los recursos transferidos desde Nación, con la eliminación del Fondo Sojero (700 millones se calculaban para Chubut este año). Sumado a una baja de la coparticipación en términos reales que se estima en 5 puntos, al perder contra la inflación. Y los subsidios al transporte. Sumado a una baja de la coparticipación en términos reales que se estima en 5 puntos, al perder contra la inflación.

Justamente el transporte es otro de los puntos que ha explotado en simultáneo. La quita del subsidio de Nación desbalanceó el sistema, más allá del incremento del boleto en los distintos municipios. Durante 2018 Nación aportó en subsidios 34 millones de pesos por mes, es decir 408 millones de pesos al año para la provincia. De ello tan sólo quedarán tan sólo por 2019 50 millones de pesos, a partir de un fondo creador a tal fin y que se reparte en todas las provincias.

De esta manera el presupuesto provincial para el transporte se incrementó en 2019 más de un 150%. Teniendo en cuenta que a valores actualizados, Nación en lugar de los 408 millones, debería desembolsar casi 500 millones.

La Provincia presupuestó por mes para cubrir el subsidio al transporte y el sostenimiento del TEG 49 millones de pesos, contra los 18 millones mensuales que se destinaban el año pasado.

Primeros en el ranking

Chubut hoy aparece primero en el ranking de morosos de la empresa mayorista de energía Cammesa. Es luego que las provincias de Chaco y Corrientes saldaran sus deudas. Se acumula una deuda que ya supera los 4.000 millones de pesos y que crece mes a mes, mientras todavía hay indefiniciones sobre cómo se avanzará con la cancelación.

Para el Gobierno es una “papa caliente”, ya que la mayorista decidió acelerar a fondo y notificó mediante Carta Documento a las principales cooperativas de la provincia, poniéndolas bajo la calificación de “moroso crónico” y con la advertencia de reducir un 10% la potencia del suministro energético.

Desde la Federación de Cooperativas se sentó la postura de no realizar un recorte de la potencia y esperar cuáles pueden ser las represalias de las mayoristas.

Primero fueron los embargos, luego llegó la primera reducción en la potencia de energía, que se materializó con Rawson, con la intervención de la línea de Transpa por orden de Cammesa.

En caso de no haber pronta solución, una de las medidas que las prestatarias amenazan con tomar es devolver el principal servicio deficitario al poder concedente de los municipios, que es la administración de Agua y Cloacas. Lo que provocaría mayores dolores de cabeza para un Estado que hoy no parece poder cumplir con las obligaciones básicas.

Vencimientos y obras

En los próximos meses se sumarán a los abultados vencimientos de deuda trimestrales la amortización de capital del bono de 650 millones de dólares que se colocó en los mercados a mediados de 2016. En octubre se tendrá que pagar capital además de los intereses. Trimestralmente se sumaría una fuerte suma de más de 1.000 millones, más los intereses, lo que puede generar un agujero muy importante. Esto más allá que uno de los Bodic 1 emitido por la gestión Buzzi ya habrá sido cancelado, lo que dará algo de respiro.

Frente a este panorama, se está acelerando el proyecto para la reestructuración para cambiar el perfil de la deuda y llevar para adelanto la cancelación de las acreencias. De todos modos, ello implicará tener que salir nuevamente a los mercados internacionales para conseguir una tasa acorde, lo que en la inestabilidad lógica de un proceso electoral que aún falta definir este año seguirá demorando.

Respecto al plan de obras públicas, el Gobierno Provincial ya está pensando en un ajuste de los gastos, que incluiría avanzar con las ejecuciones pendientes pero a un ritmo más lento. Esto con el objetivo de cuidar los recursos y estirar el dinero hasta tanto se puedan equilibrar las cuentas.

Al ya resentido plan de obras públicas nacionales, también se le sumará ahora un recorte de lo que le toca hacer a la Provincia, ya sea a través de Vialidad Provincial en relación a los caminos, o con el IPV en el Plan de viviendas.

Además ya se proyecta un achique de gastos general que incluiría los alquileres, y también otras erogaciones superfluas como viáticos o uso de celulares.


NOTICIAS RELACIONADAS