Crisis en Paraguay: Abdo Benítez negoció con Cartés y zafó del juicio político
La Cámara de Diputados de Paraguay desestimó hoy, como se preveía, la propuesta de juicio político contra el presidente, Mario Abdo Benítez, y el vicepresidente, Hugo Velázquez, por el cuestionado pacto energético con Brasil.
La alianza de los dos sectores en que se divide la oficialista bancada colorada logró 43 votos contra 36 de quienes votaron a favor del juicio a Abdo Benítez, Velázquez y el ministro de Economía, Benigno López.
El resultado era de alguna manera previsible, porque a la iniciativa del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), respaldada por Encuentro Nacional, se le oponía el pacto de las dos vertientes coloradas, una referenciada en el mismo Abdo Benítez y otra en el ex mandatario Horacio Cartes.
En Paraguay, el juicio político de destitución se tramita en la Cámara de Diputados, de 80 miembros, donde se requiere una mayoría de dos tercios para impulsarlo al Senado, que oficia de tribunal.
El gobierno atravesó una crisis desde fines de julio, cuando el acuerdo que firmó en mayo con Brasil tomó estado público.
El acta que firmó con Brasil establecía un cronograma de compra de energía de la hidroeléctrica binacional Itaipú hasta 2022, un año antes de que ambas partes renegocien el Anexo C del Tratado de Itaipú, firmado en 2023.
Para descomprimir la crispación, Abdo Benítez relevó a varios altos funcionarios, incluido el canciller Luis Castiglioni, y el gobierno de Jair Bolsonaro anunció la anulación del acuerdo y la búsqueda de un nuevo entendimiento en el control de la hidroeléctrica.
Justamente esa anulación fue la base del rechazo colorado al juicio político: sus legisladores argumentaron que haber dejado sin efecto el acuerdo significó que no hubo daño para el país.
El diario Última Hora publicó que el sector de Cartes exigió, a cambio de sus votos, cambios dentro de algunos ministerios y la restitución de funcionarios cartistas destituidos.
Otro acuerdo que se daría en el marco de la unidad colorada es que el oficialista Rodolfo Friedmann deje su banca en el Senado para que justamente Cartes asuma su escaño.
La diputada liberal Celeste Amarilla cuestionó que Abdo Benítez necesite un "salvavidas" de su partido a los 10 meses de gobierno y tildó al mandatario de "inexperto, chiquilín y malcriado".
Su par de PEN Kattya González aseguró que el acuerdo colorado busca solo impunidad, y alertó que Abdo Benítez quedará como un presidente "desnudo y opacado".
El cartista Basilio Núñez criticó al jefe del PLRA, Efraín Alegre, por convocar a movilizaciones para exigir la destitución de Mario Abdo, e ironizó sobre que a los liberales les "molesta mucho" la unidad colorada, reportó el diario ABC Color.
Semanas atrás parecía que el que sí prosperaría era el juicio contra el vice Velázquez, a quien se señalaba como uno de los negociadores del acuerdo con Brasil, aunque también esa chance se fue diluyendo con los días.
Hoy, en plena sesión, mientras se debatía el proyecto, Velázquez escribió en su cuenta de la red Twitter: “Porque la boca que te juzga nunca será más grande que la gracia que te respalda. ¡¡Buen martes para todos!!”.
La alianza de los dos sectores en que se divide la oficialista bancada colorada logró 43 votos contra 36 de quienes votaron a favor del juicio a Abdo Benítez, Velázquez y el ministro de Economía, Benigno López.
El resultado era de alguna manera previsible, porque a la iniciativa del Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), respaldada por Encuentro Nacional, se le oponía el pacto de las dos vertientes coloradas, una referenciada en el mismo Abdo Benítez y otra en el ex mandatario Horacio Cartes.
En Paraguay, el juicio político de destitución se tramita en la Cámara de Diputados, de 80 miembros, donde se requiere una mayoría de dos tercios para impulsarlo al Senado, que oficia de tribunal.
El gobierno atravesó una crisis desde fines de julio, cuando el acuerdo que firmó en mayo con Brasil tomó estado público.
El acta que firmó con Brasil establecía un cronograma de compra de energía de la hidroeléctrica binacional Itaipú hasta 2022, un año antes de que ambas partes renegocien el Anexo C del Tratado de Itaipú, firmado en 2023.
Para descomprimir la crispación, Abdo Benítez relevó a varios altos funcionarios, incluido el canciller Luis Castiglioni, y el gobierno de Jair Bolsonaro anunció la anulación del acuerdo y la búsqueda de un nuevo entendimiento en el control de la hidroeléctrica.
Justamente esa anulación fue la base del rechazo colorado al juicio político: sus legisladores argumentaron que haber dejado sin efecto el acuerdo significó que no hubo daño para el país.
El diario Última Hora publicó que el sector de Cartes exigió, a cambio de sus votos, cambios dentro de algunos ministerios y la restitución de funcionarios cartistas destituidos.
Otro acuerdo que se daría en el marco de la unidad colorada es que el oficialista Rodolfo Friedmann deje su banca en el Senado para que justamente Cartes asuma su escaño.
La diputada liberal Celeste Amarilla cuestionó que Abdo Benítez necesite un "salvavidas" de su partido a los 10 meses de gobierno y tildó al mandatario de "inexperto, chiquilín y malcriado".
Su par de PEN Kattya González aseguró que el acuerdo colorado busca solo impunidad, y alertó que Abdo Benítez quedará como un presidente "desnudo y opacado".
El cartista Basilio Núñez criticó al jefe del PLRA, Efraín Alegre, por convocar a movilizaciones para exigir la destitución de Mario Abdo, e ironizó sobre que a los liberales les "molesta mucho" la unidad colorada, reportó el diario ABC Color.
Semanas atrás parecía que el que sí prosperaría era el juicio contra el vice Velázquez, a quien se señalaba como uno de los negociadores del acuerdo con Brasil, aunque también esa chance se fue diluyendo con los días.
Hoy, en plena sesión, mientras se debatía el proyecto, Velázquez escribió en su cuenta de la red Twitter: “Porque la boca que te juzga nunca será más grande que la gracia que te respalda. ¡¡Buen martes para todos!!”.