Desde su prisión en el pabellón 7 de la Alcaidía Policial de Trelew, Diego Correa llamó a la dueña María Betty Calatayud y le consiguió hospedaje gratis en el Hotel Elun Quimey Quipan de Puerto Madryn a Pedro Santos Muñoz, jefe de Seguridad Interna de esa cárcel. Así es la hipótesis de la fiscal Silvia Pereira, que tendrá 6 meses para investigar el presunto delito de ofrecimiento y aceptación de dádivas.
La audiencia de apertura se concretó ayer en Tribunales y a Pereira la acompaño el funcionario de Fiscalía Rubén Kholer.
Según el Ministerio Público Fiscal, el 11 de enero de este año el oficial principal Santos Muñoz aceptó de Correa, “a sabiendas de su procedencia indebida, la promesa de alojamiento sin cargo en el Hotel Elun Quimey Quipan, 25 de mayo 610 de Madryn”.
A ese alojamiento lo habría gestionado el exsecretario privado del gobernador Mario Das Neves ante Calatayud. “Puso en su conocimiento de la necesidad de alojar gratuitamente al jefe de Seguridad tal como surge en conversación telefónica entre ambos”. El 15 de enero, Santos Muñoz se alojó en el Hotel, según consta en la ficha de registro de pasajeros secuestrada el 15 de febrero.
Fiscalía imputa a Correa de ofrecer dádivas, a Santos Muñoz de aceptarla y a Calatayud de partícipe primario.
Carlos Pericich, defensor público del policía, no se opuso a la apertura pero aseguró que no hubo delito en el episodio. “A lo sumo pudo haber alguna irregularidad ético profesional vinculada al decoro del funcionario público, pero nada criminal”.
Javier Romero, abogado de la dueña del Hotel, explicó que “Calatayud es inocente y vamos a demostrar la inexistencia del ilícito”. Gilda Acomazzo, letrada de Correa, opinó igual.
El juez José García dejó abierta la investigación con las imputaciones comunicadas.
La causa incluye la denuncia del jefe de la Policía, Miguel Gómez, la intervención telefónica del celular Movistar de Correa, los allanamientos en la Alcaidía y el Hotel, informes fotográficos y las requisas personales a Santos Muñoz y a Correa, además del legajo personal del efectivo.
Desde su prisión en el pabellón 7 de la Alcaidía Policial de Trelew, Diego Correa llamó a la dueña María Betty Calatayud y le consiguió hospedaje gratis en el Hotel Elun Quimey Quipan de Puerto Madryn a Pedro Santos Muñoz, jefe de Seguridad Interna de esa cárcel. Así es la hipótesis de la fiscal Silvia Pereira, que tendrá 6 meses para investigar el presunto delito de ofrecimiento y aceptación de dádivas.
La audiencia de apertura se concretó ayer en Tribunales y a Pereira la acompaño el funcionario de Fiscalía Rubén Kholer.
Según el Ministerio Público Fiscal, el 11 de enero de este año el oficial principal Santos Muñoz aceptó de Correa, “a sabiendas de su procedencia indebida, la promesa de alojamiento sin cargo en el Hotel Elun Quimey Quipan, 25 de mayo 610 de Madryn”.
A ese alojamiento lo habría gestionado el exsecretario privado del gobernador Mario Das Neves ante Calatayud. “Puso en su conocimiento de la necesidad de alojar gratuitamente al jefe de Seguridad tal como surge en conversación telefónica entre ambos”. El 15 de enero, Santos Muñoz se alojó en el Hotel, según consta en la ficha de registro de pasajeros secuestrada el 15 de febrero.
Fiscalía imputa a Correa de ofrecer dádivas, a Santos Muñoz de aceptarla y a Calatayud de partícipe primario.
Carlos Pericich, defensor público del policía, no se opuso a la apertura pero aseguró que no hubo delito en el episodio. “A lo sumo pudo haber alguna irregularidad ético profesional vinculada al decoro del funcionario público, pero nada criminal”.
Javier Romero, abogado de la dueña del Hotel, explicó que “Calatayud es inocente y vamos a demostrar la inexistencia del ilícito”. Gilda Acomazzo, letrada de Correa, opinó igual.
El juez José García dejó abierta la investigación con las imputaciones comunicadas.
La causa incluye la denuncia del jefe de la Policía, Miguel Gómez, la intervención telefónica del celular Movistar de Correa, los allanamientos en la Alcaidía y el Hotel, informes fotográficos y las requisas personales a Santos Muñoz y a Correa, además del legajo personal del efectivo.