Cerveceros artesanales cordilleranos trabajan con la premisa de “fortalecer la calidad”
La localidad de Lago Puelo fue escenario ayer del segundo clúster Cervecero Artesanal de la Patagonia Andina, con participación del Ministerio de Agroindustria de Nación, INTI, INTA, municipios, ministerios de Producción de las provincias del Chubut y Río Negro y otros organismos de ciencia y técnica.
“Venimos trabajando desde el mes de abril con la premisa de ir conociendo las necesidades de los productores, sacar conclusiones y aportar soluciones. El objetivo es fortalecer la calidad y apuntalar la comercialización, porque hay gente que ya se está animando a exportar”, graficó en la apertura el director de Producción local, Walter Sepúlveda.
Por su parte, Federico Galkin (MAGyP), detalló que “el territorio comprende la Comarca Andina del Paralelo 42° y Comarca de los Alerces, con una capacidad instalada de 450 mil litros mensuales, con un potencial significativo. La idea es fomentar la competitividad del sector, que está en constante crecimiento. Hay proliferación de cervecerías, con gran auge de la calidad, y uno de los objetivos de este encuentro es analizar su realidad y lograr su desarrollo de una forma asociativa”.
En referencia a los emprendimientos familiares instalados en la región, valoró que “están pretendiendo aumentar su capacidad y su nivel de producción, por cuanto los pasos a futuro serán seguir manteniendo la calidad y ampliando los espacios de venta y comercialización”.
Acerca de la competencia de las cervezas artesanales con las industriales, destacó que “el consumidor está más especializado, sabe lo que quiere y sabe diferenciar gustos, ya no se conforma con cualquier cerveza”.
Sobre los puestos de trabajo que se generan en la zona, se estima que unos 60 establecimientos comprendidos entre El Manso y Cholila ocupan a unos 100 técnicos y operarios en forma permanente. “Mientras crezcan las cervecerías va a crecer el empleo, ya que el proceso productivo incluye a diferentes actores. De igual manera, desde el clúster se hizo un revelamiento para incorporar solo a aquellos establecimientos que han logrado su pertinente habilitación y garanticen trabajo legal. Asimismo, estamos en la tarea de ayudar a los demás para que lo alcancen”, agregó.
A su turno, el productor Diego Pérez (Áslaug) recordó que “venimos creciendo desde hace 5 años, aun cuando fuimos bastante golpeados por las sucesivas crisis que afectaron al turismo”. “No bajamos los brazos y estamos convencidos de fortalecer al sector. Los principales inconvenientes que afrontamos en la actualidad tienen que ver con los insumos y el equipamiento, que están dolarizados y encarecen muchísimo el producto”, puntualizó.
Destacó enseguida que “la estacionalidad veraniega también nos afecta, ya que a diferencia de las provincias del norte, nuestra temporada es muy corta”. Sumó que “la coyuntura económica del país generó que las grandes cervecerías hayan salido a buscar nuevos horizontes en el mercado artesanal. Su mayor capacidad operativa les permitió obtener menores costos, que nos afecta en la competencia del precio final”.
Con todo, destacó que “una de las ventajas comparativas de nuestra zona es la calidad del agua, que compone el 90% de una buena cerveza artesanal”.
Cebada cervecera
En coincidencia, hay expectativa en el mundo cervecero artesanal por la concreción del proyecto para instalar una maltería en Cerro Radal, con posibilidad de producir hasta 3 mil toneladas anuales.
Según detalló en su momento el delegado del MAGyP de Río Negro, Jorge Levy, “actualmente la cebada se utiliza para engordar ganado” y que la mayor superficie plantada (unas 200 hectáreas) “está en El Maitén”, aunque “todos los valles cordilleranos, desde El Manso hasta Trevelin, son óptimos para el cometido, incluso mejores que en algunos lugares de la pampa húmeda”.
Citó enseguida “las maltas especiales que se podrán elaborar, basadas en la demanda de los propios brewmasters (cocineros de las cervecerías), incluso con toques de frutas finas, jengibre o chocolate”.
Aclaró que actualmente las maltas que se consumen en las cervecerías artesanales del país “son importadas y a un costo muy alto condicionado por el dólar. Produciendo nosotros los insumos (lúpulo, levadura, malta, agua de excelente calidad), se podría equilibrar el valor/litro con las cervezas industriales”, subrayó.
“Venimos trabajando desde el mes de abril con la premisa de ir conociendo las necesidades de los productores, sacar conclusiones y aportar soluciones. El objetivo es fortalecer la calidad y apuntalar la comercialización, porque hay gente que ya se está animando a exportar”, graficó en la apertura el director de Producción local, Walter Sepúlveda.
Por su parte, Federico Galkin (MAGyP), detalló que “el territorio comprende la Comarca Andina del Paralelo 42° y Comarca de los Alerces, con una capacidad instalada de 450 mil litros mensuales, con un potencial significativo. La idea es fomentar la competitividad del sector, que está en constante crecimiento. Hay proliferación de cervecerías, con gran auge de la calidad, y uno de los objetivos de este encuentro es analizar su realidad y lograr su desarrollo de una forma asociativa”.
En referencia a los emprendimientos familiares instalados en la región, valoró que “están pretendiendo aumentar su capacidad y su nivel de producción, por cuanto los pasos a futuro serán seguir manteniendo la calidad y ampliando los espacios de venta y comercialización”.
Acerca de la competencia de las cervezas artesanales con las industriales, destacó que “el consumidor está más especializado, sabe lo que quiere y sabe diferenciar gustos, ya no se conforma con cualquier cerveza”.
Sobre los puestos de trabajo que se generan en la zona, se estima que unos 60 establecimientos comprendidos entre El Manso y Cholila ocupan a unos 100 técnicos y operarios en forma permanente. “Mientras crezcan las cervecerías va a crecer el empleo, ya que el proceso productivo incluye a diferentes actores. De igual manera, desde el clúster se hizo un revelamiento para incorporar solo a aquellos establecimientos que han logrado su pertinente habilitación y garanticen trabajo legal. Asimismo, estamos en la tarea de ayudar a los demás para que lo alcancen”, agregó.
A su turno, el productor Diego Pérez (Áslaug) recordó que “venimos creciendo desde hace 5 años, aun cuando fuimos bastante golpeados por las sucesivas crisis que afectaron al turismo”. “No bajamos los brazos y estamos convencidos de fortalecer al sector. Los principales inconvenientes que afrontamos en la actualidad tienen que ver con los insumos y el equipamiento, que están dolarizados y encarecen muchísimo el producto”, puntualizó.
Destacó enseguida que “la estacionalidad veraniega también nos afecta, ya que a diferencia de las provincias del norte, nuestra temporada es muy corta”. Sumó que “la coyuntura económica del país generó que las grandes cervecerías hayan salido a buscar nuevos horizontes en el mercado artesanal. Su mayor capacidad operativa les permitió obtener menores costos, que nos afecta en la competencia del precio final”.
Con todo, destacó que “una de las ventajas comparativas de nuestra zona es la calidad del agua, que compone el 90% de una buena cerveza artesanal”.
Cebada cervecera
En coincidencia, hay expectativa en el mundo cervecero artesanal por la concreción del proyecto para instalar una maltería en Cerro Radal, con posibilidad de producir hasta 3 mil toneladas anuales.
Según detalló en su momento el delegado del MAGyP de Río Negro, Jorge Levy, “actualmente la cebada se utiliza para engordar ganado” y que la mayor superficie plantada (unas 200 hectáreas) “está en El Maitén”, aunque “todos los valles cordilleranos, desde El Manso hasta Trevelin, son óptimos para el cometido, incluso mejores que en algunos lugares de la pampa húmeda”.
Citó enseguida “las maltas especiales que se podrán elaborar, basadas en la demanda de los propios brewmasters (cocineros de las cervecerías), incluso con toques de frutas finas, jengibre o chocolate”.
Aclaró que actualmente las maltas que se consumen en las cervecerías artesanales del país “son importadas y a un costo muy alto condicionado por el dólar. Produciendo nosotros los insumos (lúpulo, levadura, malta, agua de excelente calidad), se podría equilibrar el valor/litro con las cervezas industriales”, subrayó.