“El agua es la propia historia de la humanidad”
El exconstituyente brasileño Nelton Friedich, colaborador de Lula en su gobierno, visitó la provincia de Chubut y disertó en el marco de las actividades por los primeros diez años de la implementación de la Ley de Política Hídrica N°88. Sostuvo la necesidad de establecer políticas sobre el cuidado y el uso del agua.
El agua es un bien esencial de la naturaleza más que un bien material” aseguró Friedich en una entrevista realizada en el programa “Con Cierto Sentido” que emite Cadena Tiempo y en ese contexto aseguró que ha sido la visión equivocada que se ha tenido sobre ese recurso lo que hoy genera conflictos en distintas partes del mundo.
El especialista llegó a la zona en el marco de las actividades que el Instituto Provincial del Agua realizó para celebrar la primera década de la implementación de la Ley de Política Hídrica N°88, y donde también se concretó la sesión del Consejo Hídrico Federal en la provincia.
Nelton Friedrich, quien por varios años se desempeñó como director de Coordinación y Medio Ambiente en Itaipú Binacional, impulsando el programa Cultivando el buen agua, que fue adoptado por 54 municipios, ha recibido 25 premios nacionales e internacionales, incluido ONU-Agua para la Vida, en el año 2015.
“El agua es la propia historia de la humanidad, gran parte de los poblados en los inicios de la civilización estuvieron entorno del agua” explicó Friedich y agregó que “el agua es todo, no hay vida sin agua”.
El exlegislador de Brasil afirmó que “durante mucho tiempo colocamos el agua apenas como si fuera un apenas un insumo, como si pasase a la idea de mercancía y se compra; pero el agua es un bien esencial pero es más que recurso, es un bien de la naturaleza. Incluso para muchos pueblos continúa hasta hoy la idea del agua como una cosa sagrada, para venerar, para cultivar, para cuidar, porque es esencial e imprescindible”.
Bien esencial
Friedich sostuvo que hay muchas situaciones que marcan porque “el agua es tan fuerte para nosotros, porque pasamos nueve meses en una bolsa de agua, el primer elemento de lo humano es agua” y subrayó que si bien para mantenerse bien “hay que comer, la producción de alimentos depende del agua; de hecho el 70% del mundo se consume en agricultura y agropecuaria, es decir la producción de alimentos”.
“Fue necesaria la escasez para entender los grandes problemas con el agua, incluso la contaminación, polución y demás cosas. Parece que la humanidad está comprendiendo que tiene que cambiar y por eso cuidarse de desperdiciar el recurso” afirmó el especialista.
En esa línea argumento que el rehuso de agua es fundamental ya que “el 60% del agua que pagamos a la compañía no es de uso noble” y que se podría sustituir hasta un 50% del agua que se consume por agua “no necesariamente potable, que pueda ser agua de lluvia, agua de reciclaje, con un reaprovechamiento de todo tipo, por lo tanto es una nueva cultura que tiene que llegar porque fuimos abandonando la cultura del agua”.
Un crimen
Al hablar sobre los distintos usos que se le da al agua potable y su mala utilización, afirmó que “lavar un coche con agua potable es un crimen; porque el agua apta para consumo humano tiene productos químicos para tornarla potable y la mayoría de esos productos son importados, es decir que es agua que está dolarizada”.
Nelton Friedich aseguró que debe tomarse dimensión de lo que hacen “las compañías de agua y saneamiento para poder captar el agua, hacer el almacenamiento y tratarla; entonces es importante comprender las dimensiones del agua”.
Dimensión social
El exconstituyente sostuvo que para modificar la situación de los recursos, “primero debemos comprender la dimensión social del agua” y en ese sentido aseguró que “tiene que ser esencial, tiene que ser para todos, no puede ser solo para algunos”.
Así, aseguró que debe tener un carácter social y todos deben cooperar en su buen uso, para garantizar que “el agua, socialmente hablando, tiene que ser para todos”, al tiempo que afirmó que existe un problema de dimensiones políticas muy grande porque hay países que “hoy que están exportando agua, pero al mismo tiempo es un recurso que hoy está ligado a algunos conflictos, como el existente en la región de la cuenca del río Jordán, una fuente que no solo tiene consideraciones históricas por su vinculación al cristianismo, sino también graves problemas ambientales producto de la contaminación y salinidad, además de estar en una zona de latente conflicto geopolítico.
Una prioridad
“Si la política se transforma cada vez más en arte y ciencia del buen servir, se debe comprender que el agua tiene que ser una prioridad máxima de los países; el agua no es solo un recurso político sino también económico” afirmó Friedich y aseguró que para entender el significado que tiene solo basta con decir que4 “el 80% del empleo pasa por el agua”.
En esa dimensión, opinó que “el agua es todo” y sostuvo que también tiene una dimensión cultural, depende “si usted si tiene una mirada mucho más mercantilista, entonces el agua es un producto cualquiera; pero para cambiar es necesario cambiar para una mirada cultural en cuanto a que el agua es esencial, sagrada”.
El agua es un bien esencial de la naturaleza más que un bien material” aseguró Friedich en una entrevista realizada en el programa “Con Cierto Sentido” que emite Cadena Tiempo y en ese contexto aseguró que ha sido la visión equivocada que se ha tenido sobre ese recurso lo que hoy genera conflictos en distintas partes del mundo.
El especialista llegó a la zona en el marco de las actividades que el Instituto Provincial del Agua realizó para celebrar la primera década de la implementación de la Ley de Política Hídrica N°88, y donde también se concretó la sesión del Consejo Hídrico Federal en la provincia.
Nelton Friedrich, quien por varios años se desempeñó como director de Coordinación y Medio Ambiente en Itaipú Binacional, impulsando el programa Cultivando el buen agua, que fue adoptado por 54 municipios, ha recibido 25 premios nacionales e internacionales, incluido ONU-Agua para la Vida, en el año 2015.
“El agua es la propia historia de la humanidad, gran parte de los poblados en los inicios de la civilización estuvieron entorno del agua” explicó Friedich y agregó que “el agua es todo, no hay vida sin agua”.
El exlegislador de Brasil afirmó que “durante mucho tiempo colocamos el agua apenas como si fuera un apenas un insumo, como si pasase a la idea de mercancía y se compra; pero el agua es un bien esencial pero es más que recurso, es un bien de la naturaleza. Incluso para muchos pueblos continúa hasta hoy la idea del agua como una cosa sagrada, para venerar, para cultivar, para cuidar, porque es esencial e imprescindible”.
Bien esencial
Friedich sostuvo que hay muchas situaciones que marcan porque “el agua es tan fuerte para nosotros, porque pasamos nueve meses en una bolsa de agua, el primer elemento de lo humano es agua” y subrayó que si bien para mantenerse bien “hay que comer, la producción de alimentos depende del agua; de hecho el 70% del mundo se consume en agricultura y agropecuaria, es decir la producción de alimentos”.
“Fue necesaria la escasez para entender los grandes problemas con el agua, incluso la contaminación, polución y demás cosas. Parece que la humanidad está comprendiendo que tiene que cambiar y por eso cuidarse de desperdiciar el recurso” afirmó el especialista.
En esa línea argumento que el rehuso de agua es fundamental ya que “el 60% del agua que pagamos a la compañía no es de uso noble” y que se podría sustituir hasta un 50% del agua que se consume por agua “no necesariamente potable, que pueda ser agua de lluvia, agua de reciclaje, con un reaprovechamiento de todo tipo, por lo tanto es una nueva cultura que tiene que llegar porque fuimos abandonando la cultura del agua”.
Un crimen
Al hablar sobre los distintos usos que se le da al agua potable y su mala utilización, afirmó que “lavar un coche con agua potable es un crimen; porque el agua apta para consumo humano tiene productos químicos para tornarla potable y la mayoría de esos productos son importados, es decir que es agua que está dolarizada”.
Nelton Friedich aseguró que debe tomarse dimensión de lo que hacen “las compañías de agua y saneamiento para poder captar el agua, hacer el almacenamiento y tratarla; entonces es importante comprender las dimensiones del agua”.
Dimensión social
El exconstituyente sostuvo que para modificar la situación de los recursos, “primero debemos comprender la dimensión social del agua” y en ese sentido aseguró que “tiene que ser esencial, tiene que ser para todos, no puede ser solo para algunos”.
Así, aseguró que debe tener un carácter social y todos deben cooperar en su buen uso, para garantizar que “el agua, socialmente hablando, tiene que ser para todos”, al tiempo que afirmó que existe un problema de dimensiones políticas muy grande porque hay países que “hoy que están exportando agua, pero al mismo tiempo es un recurso que hoy está ligado a algunos conflictos, como el existente en la región de la cuenca del río Jordán, una fuente que no solo tiene consideraciones históricas por su vinculación al cristianismo, sino también graves problemas ambientales producto de la contaminación y salinidad, además de estar en una zona de latente conflicto geopolítico.
Una prioridad
“Si la política se transforma cada vez más en arte y ciencia del buen servir, se debe comprender que el agua tiene que ser una prioridad máxima de los países; el agua no es solo un recurso político sino también económico” afirmó Friedich y aseguró que para entender el significado que tiene solo basta con decir que4 “el 80% del empleo pasa por el agua”.
En esa dimensión, opinó que “el agua es todo” y sostuvo que también tiene una dimensión cultural, depende “si usted si tiene una mirada mucho más mercantilista, entonces el agua es un producto cualquiera; pero para cambiar es necesario cambiar para una mirada cultural en cuanto a que el agua es esencial, sagrada”.