Los viales y un curioso acto de apoyo al juez Alesi, que enfrenta un jury y una grave denuncia
El gremio armó un "acto" de apoyo al juez de Familia de Rawson, que hasta dio un discurso. El trasfondo de una historia que incluye una falasa acusación contra un hombre por violencia de género, realizada por la ahora pareja del magistrado.
En medio de la puja entre el titular de Vialidad Provincial, Nicolás Cittadini, y el gremio de los viales, el Sitravich, apareció en escena el jueves pasado la figura del juez de Familia, Martín Alesi.
El magistrado le prometió a los viales que si desalojaban las tres rutas que estaban cortadas y que impedían el ingreso y la salida de la ciudad de Rawson, este lunes le daría un tratamiento veloz a una denuncia por presunto acoso laboral contra Cittadini.
Más allá del curioso “toma y daca” del juez y los viales sobre un tema que nunca antes había sido utilizado como argumento por los trabajadores en conflicto con el titular de Vialidad, este lunes un grupo de trabajadores de Vialidad participó de un inusual acto de apoyo a Alesi, que despojándose de su figura de juez, salió a saludar al público acompañado de su familia y hasta dio un discurso en el que criticó a los sectores de la Justicia que impulsaron un jury en su contra.
Hay un posible segundo juicio político en marcha, ya que la semana pasada el Consejo de la Magistratura admitió un nueva denuncia en contra de Alesi, esta vez del ciudadano Martín Larrañaga, que lo acusa por reiterados y graves actos de inconducta y pide que sea removido de su cargo por falta de decoro.
Larrañaga es la expareja de la actual pareja de Alesi, y fue denunciado por ella por presunta violencia de género. Fue detenido y hasta le colocaron una tobillera electrónica por esa situación, pero poco después fue absuelto y presentó una denuncia ante el Consejo de la Magistratura porque, asegura, el juez Alesi fue quien orquestó la falsa denuncia en su contra.
Alesi estaba suspendido en sus funciones hasta el jury que deberá enfrentar tras una denuncia del Superior por haber agredido en un restaurante al ministro de la corte provincial Mario Vivas, pero una resolución de hace pocas semanas firmada por el juez laboral de Trelew Paulo König le permitió reasumir en el cargo.
Desde entonces, Alesi levantó el perfil más que nunca y comenzó a tomar resoluciones judiciales una más resonante que otra: le impuso una multa de $ 10.000 diarios a los integrantes del directorio de SEROS por la suspensión de las prestaciones; ordenó a la Provincia que en treinta días restablezca el servicio de Justicia; “condenó” al Estado Nacional a transferir fondos para reanudar las clases; y hasta le envió un exhorto al Presidente de la Nación, Mauricio Macri, para que intervenga personalmente en el conflicto docente.
Y la más reciente: intimó a la intendenta interina de Rawson, Araceli Di Filippo, a regularizar la situación de los sueldos de los empleados municipales, bajo apercibimiento de aplicarle la suma de $ 50.000 por día y solicitar su remoción mediante juicio político.
En medio de la puja entre el titular de Vialidad Provincial, Nicolás Cittadini, y el gremio de los viales, el Sitravich, apareció en escena el jueves pasado la figura del juez de Familia, Martín Alesi.
El magistrado le prometió a los viales que si desalojaban las tres rutas que estaban cortadas y que impedían el ingreso y la salida de la ciudad de Rawson, este lunes le daría un tratamiento veloz a una denuncia por presunto acoso laboral contra Cittadini.
Más allá del curioso “toma y daca” del juez y los viales sobre un tema que nunca antes había sido utilizado como argumento por los trabajadores en conflicto con el titular de Vialidad, este lunes un grupo de trabajadores de Vialidad participó de un inusual acto de apoyo a Alesi, que despojándose de su figura de juez, salió a saludar al público acompañado de su familia y hasta dio un discurso en el que criticó a los sectores de la Justicia que impulsaron un jury en su contra.
Hay un posible segundo juicio político en marcha, ya que la semana pasada el Consejo de la Magistratura admitió un nueva denuncia en contra de Alesi, esta vez del ciudadano Martín Larrañaga, que lo acusa por reiterados y graves actos de inconducta y pide que sea removido de su cargo por falta de decoro.
Larrañaga es la expareja de la actual pareja de Alesi, y fue denunciado por ella por presunta violencia de género. Fue detenido y hasta le colocaron una tobillera electrónica por esa situación, pero poco después fue absuelto y presentó una denuncia ante el Consejo de la Magistratura porque, asegura, el juez Alesi fue quien orquestó la falsa denuncia en su contra.
Alesi estaba suspendido en sus funciones hasta el jury que deberá enfrentar tras una denuncia del Superior por haber agredido en un restaurante al ministro de la corte provincial Mario Vivas, pero una resolución de hace pocas semanas firmada por el juez laboral de Trelew Paulo König le permitió reasumir en el cargo.
Desde entonces, Alesi levantó el perfil más que nunca y comenzó a tomar resoluciones judiciales una más resonante que otra: le impuso una multa de $ 10.000 diarios a los integrantes del directorio de SEROS por la suspensión de las prestaciones; ordenó a la Provincia que en treinta días restablezca el servicio de Justicia; “condenó” al Estado Nacional a transferir fondos para reanudar las clases; y hasta le envió un exhorto al Presidente de la Nación, Mauricio Macri, para que intervenga personalmente en el conflicto docente.
Y la más reciente: intimó a la intendenta interina de Rawson, Araceli Di Filippo, a regularizar la situación de los sueldos de los empleados municipales, bajo apercibimiento de aplicarle la suma de $ 50.000 por día y solicitar su remoción mediante juicio político.