Rawson: dictan condena tras juicio abreviado
El Juez Fabio Monti condenó a un imputado por lesiones leves agravadas por el uso de arma de fuego
El juez de garantías Fabio Monti mediante un Juicio Abreviado, con la conformidad de las partes, y la declaración del imputado, resolvió condenar a Roberto Soto por los delitos de lesiones leves agravadas por ser con arma de fuego, en concurso real con amenazas agravadas por el uso de arma y tenencia de arma sin debida autorización, a la pena de dos años de condena condicional.
Roberto Soto deberá presentarse a la oficina judicial de Rawson cada cuatro meses, cumplir con la prohibición de contacto y acercamiento con las tres víctimas en persona, redes sociales y teléfono celular y además tiene la obligación de no cometer nuevos delitos dentro del plazo que dure su condena y cumplir con las reglas de conductas impuestas.
La Fiscal General Florencia Gómez, representó al Ministerio Publico Fiscal, en audiencia preliminar, conjuntamente con el Defensor Pablo Sánchez y el reconocimiento total de los hechos que se le imputaron a Fabian Roberto Soto, acordaron resolver el caso a través de un juicio abreviado. Las victimas manifestaron su conformidad con el acuerdo presentado.
La fiscalía solicitó la destrucción del arma de fuego y el juez ordeno su decomiso y la entrega al MPF para posterior destrucción de la misma, dando cumplimiento a la instrucción de la Procuración General.
Tres casos
El primero de los hechos, ocurrió el 1 de enero de 2019, alrededor de las 17:30hs. cuando David Diaz, se encontraba en cercanía del playón del barrio 2 de abril, en el lugar se observó una riña entre Roberto Soto, Claudio Fernández, Maximiliano Arriagada y Emanuel Cejas, frente a la vivienda de Soto ubicada en el Barrio Malvinas y en dichas circunstancias se puedo observar cuando Soto portando un arma de fuego, tipo revolver calibre, con el cual comienza a efectuar varios disparos, uno de los cuales impacta en la pierna de David Diaz, justo en la cara externa del muslo derecho, siendo asistido en el Hospital de Rawson y resultando con heridas de carácter leves.
El segundo de los hechos tuvo lugar en el Barrio 2 de Abril, cuando Soto y Fernández se dirigen hacia el domicilio de la Sra. Vallejos, en el lugar Soto portando un arma de fuego tipo revolver le apunta a su hija menor quien estaba en la escalera del edificio mientras la insultaba y la amenazaba, mientras Fernández quien había subido hasta la puerta de acceso a la casa las amenazaba diciéndole “a tu hijo te lo entrego en cajón”
El tercero de los hechos es sobre la acreditación del secuestro de un arma de fuego en el domicilio de Claudio Fernández, calibre 22, tipo revolver, color negro, el cual se encontró en una bota de goma guardada dentro de un modular, sin documentación respaldatória y sin contar con la debida autorización legal para su tenencia.
En la misma audiencia, el imputado Roberto Soto hizo uso de su derecho a declarar asumiendo la totalidad responsabilidad de los hechos imputados, reconociendo que el arma era de su propiedad y que la misma se encontraba en la vivienda de Fernández, porque el mismo la había ocultado en dicho lugar.
El juez de garantías Fabio Monti mediante un Juicio Abreviado, con la conformidad de las partes, y la declaración del imputado, resolvió condenar a Roberto Soto por los delitos de lesiones leves agravadas por ser con arma de fuego, en concurso real con amenazas agravadas por el uso de arma y tenencia de arma sin debida autorización, a la pena de dos años de condena condicional.
Roberto Soto deberá presentarse a la oficina judicial de Rawson cada cuatro meses, cumplir con la prohibición de contacto y acercamiento con las tres víctimas en persona, redes sociales y teléfono celular y además tiene la obligación de no cometer nuevos delitos dentro del plazo que dure su condena y cumplir con las reglas de conductas impuestas.
La Fiscal General Florencia Gómez, representó al Ministerio Publico Fiscal, en audiencia preliminar, conjuntamente con el Defensor Pablo Sánchez y el reconocimiento total de los hechos que se le imputaron a Fabian Roberto Soto, acordaron resolver el caso a través de un juicio abreviado. Las victimas manifestaron su conformidad con el acuerdo presentado.
La fiscalía solicitó la destrucción del arma de fuego y el juez ordeno su decomiso y la entrega al MPF para posterior destrucción de la misma, dando cumplimiento a la instrucción de la Procuración General.
Tres casos
El primero de los hechos, ocurrió el 1 de enero de 2019, alrededor de las 17:30hs. cuando David Diaz, se encontraba en cercanía del playón del barrio 2 de abril, en el lugar se observó una riña entre Roberto Soto, Claudio Fernández, Maximiliano Arriagada y Emanuel Cejas, frente a la vivienda de Soto ubicada en el Barrio Malvinas y en dichas circunstancias se puedo observar cuando Soto portando un arma de fuego, tipo revolver calibre, con el cual comienza a efectuar varios disparos, uno de los cuales impacta en la pierna de David Diaz, justo en la cara externa del muslo derecho, siendo asistido en el Hospital de Rawson y resultando con heridas de carácter leves.
El segundo de los hechos tuvo lugar en el Barrio 2 de Abril, cuando Soto y Fernández se dirigen hacia el domicilio de la Sra. Vallejos, en el lugar Soto portando un arma de fuego tipo revolver le apunta a su hija menor quien estaba en la escalera del edificio mientras la insultaba y la amenazaba, mientras Fernández quien había subido hasta la puerta de acceso a la casa las amenazaba diciéndole “a tu hijo te lo entrego en cajón”
El tercero de los hechos es sobre la acreditación del secuestro de un arma de fuego en el domicilio de Claudio Fernández, calibre 22, tipo revolver, color negro, el cual se encontró en una bota de goma guardada dentro de un modular, sin documentación respaldatória y sin contar con la debida autorización legal para su tenencia.
En la misma audiencia, el imputado Roberto Soto hizo uso de su derecho a declarar asumiendo la totalidad responsabilidad de los hechos imputados, reconociendo que el arma era de su propiedad y que la misma se encontraba en la vivienda de Fernández, porque el mismo la había ocultado en dicho lugar.