CIMA: “Los motivos de Trump son poco sólidos”
La Cámara Industrial Madrynense fijó posición sobre los aranceles a las importaciones de metales establecidas por Estados Unidos para Brasil y Argentina.
Ovidio Palacios, presidente de la institución, y Fernando Terraza dejaron sentada la posición de CIMA ante un tema sensible para la economía regional. “Estamos ocupados en un tema que tiene una alta importancia para la economía de Madryn, así como la regional y la nacional; llamamos a todos los dirigentes nacionales y provinciales para acometer en este tema”.
Palacios explicó que por la puesta en marcha de los aranceles más la falta de reintegros a las exportaciones “estamos ante una situación a la que hay que prestarle una máxima atención y tiene que ver con una agresiva política comercial promovida por Trump”.
Desde CIMA remarcaron en “la necesidad de actuar rápidamente y mucho antes de que esto sea homologado y tengamos consecuencias en nuestra localidad y Nación”, dijo Palacios. “Esto no debiera haber sucedido si hubiéramos tenido una política de comercio exterior consolidada y de largo plazo” aunque ahora las autoridades salientes deberán intentar solucionar un problema serio. “Deberán consolidar y darle una previsibilidad al comercio exterior para que los productos nacionales se consoliden” dijo Palacios.
Terraza, especialista en comercio exterior, afirmó que en la decisión del gobierno de EE.UU. “no tiene decisión el Gobierno argentino sino que los compradores en el exterior exigen que ese arancel que deberán pagar sean descontado de los productos de exportación. Los obligarían si no, no hay posibilidades de ingresar a los Estados Unidos”.
El especialista enfatizó que la Casa Rosada deberá instrumentar alternativas para compensar los descuentos por aranceles a las productoras de aluminio y acero. “Sería una salida para poder mantener la producción; Aluar exporta el 40 por ciento a EE.UU., el resto va al resto del mundo” agregando que no se aprecia un efecto domino en el resto de los compradores. “Los argumentos que plasmó Trump son pocos sólidos. Es una decisión que hace 2 años quiso tomar y la frenó el actual gobierno nacional. La idea de que por la devaluación de Brasil y Argentina se afecta el comercio agropecuario en Estados Unidos puede considerarse hasta absurda”.
Terraza remarcó que “los argumentos del presidente no son convincentes. Hay que ver cuándo la norma salga se justificará claramente el motivo. Esto tiene que ver con la guerra de EE.UU. y China que arrastran a este tipo de decisiones”.
Ovidio Palacios, presidente de la institución, y Fernando Terraza dejaron sentada la posición de CIMA ante un tema sensible para la economía regional. “Estamos ocupados en un tema que tiene una alta importancia para la economía de Madryn, así como la regional y la nacional; llamamos a todos los dirigentes nacionales y provinciales para acometer en este tema”.
Palacios explicó que por la puesta en marcha de los aranceles más la falta de reintegros a las exportaciones “estamos ante una situación a la que hay que prestarle una máxima atención y tiene que ver con una agresiva política comercial promovida por Trump”.
Desde CIMA remarcaron en “la necesidad de actuar rápidamente y mucho antes de que esto sea homologado y tengamos consecuencias en nuestra localidad y Nación”, dijo Palacios. “Esto no debiera haber sucedido si hubiéramos tenido una política de comercio exterior consolidada y de largo plazo” aunque ahora las autoridades salientes deberán intentar solucionar un problema serio. “Deberán consolidar y darle una previsibilidad al comercio exterior para que los productos nacionales se consoliden” dijo Palacios.
Terraza, especialista en comercio exterior, afirmó que en la decisión del gobierno de EE.UU. “no tiene decisión el Gobierno argentino sino que los compradores en el exterior exigen que ese arancel que deberán pagar sean descontado de los productos de exportación. Los obligarían si no, no hay posibilidades de ingresar a los Estados Unidos”.
El especialista enfatizó que la Casa Rosada deberá instrumentar alternativas para compensar los descuentos por aranceles a las productoras de aluminio y acero. “Sería una salida para poder mantener la producción; Aluar exporta el 40 por ciento a EE.UU., el resto va al resto del mundo” agregando que no se aprecia un efecto domino en el resto de los compradores. “Los argumentos que plasmó Trump son pocos sólidos. Es una decisión que hace 2 años quiso tomar y la frenó el actual gobierno nacional. La idea de que por la devaluación de Brasil y Argentina se afecta el comercio agropecuario en Estados Unidos puede considerarse hasta absurda”.
Terraza remarcó que “los argumentos del presidente no son convincentes. Hay que ver cuándo la norma salga se justificará claramente el motivo. Esto tiene que ver con la guerra de EE.UU. y China que arrastran a este tipo de decisiones”.