"El Kun es millonario"
Al título no lo puede discutir nadie. A menos que alguno quiera que no lo alcance el meneado impuesto a la riqueza.
El delantero Sergio "Kun" Agüero juega habitualmente al FIFA Play y se lo puede ver en vivo por una aplicación llamada twich, cuenta el informante Comisario de San Alberto.
Es que lo hace diariamente, mínimo una hora por sesión.
Se le puede mandar mensajes.
La mayoría son de gente de Independiente pero él no responde a ninguno.
Usa como trípodes los trofeos de mejor jugador y los voltea, mientras insulta, cada vez que se enoja por cuestiones del juego.
Una de estas noches le pidieron por mensaje que eligiera para jugar un equipo argentino y dijo "bueno, River".
Encima, gritó un gol.
¿Infierno rojo?.
Y... hay historias...
El informante Polaco recuerda que en el predio de Wilde, alguien que atiende un puesto de comidas está bien informado y dice que "El Kun", en realidad, de chico, tiraba para los millonarios.
Y quien haya leído su libro recuerda que allí contó que su papá era de River...
Los recuerdos de Bruno Marioni
El delantero de dilatada carrera Bruno Marioni es querido por varios rincones del planeta.
Como futbolista pero también como piloto de autos de carrera.
Y tiene camino por recorrer como director técnico.
El informante Comisario de San Alberto lo encontró contando anécdotas.
En un vivo transmitido a México por el periodista César Luis Merlo.
Relató una anécdota que le tocó experimentar en el fútbol español, jugando un partido de la Copa del Rey para Tenerife, contra Lanzarote.
Un partido que para él fue una macana.
Comenzaba a las 19:00 y el clima estaba caluroso y húmedo.
Más de 30 grados, cuenta Marioni.
"Para el segundo tiempo refrescó. Empezó con menos de 20 grados. Y yo con retortijones. Le digo al técnico que por favor me reemplazara, que necesitaba un baño", rememora.
Pero la respuesta fue negativa.
"No tengo más cambios", le dijo el míster.
El juego, todo mal.
Lanzarote marcó el cuarto gol.
Así que Marioni contó que miró que los rivales se habían ido a festejar el tanto a un rincón de la cancha, se las arregló, se agachó y dijo: "Que sea lo que Dios quiera".
"Que la gente se imagine", comentó.
Enseguida marcaron el quinto tanto.
En ese otro interín corrió al vestuario, hizo lo que pudo porque estaba cerrado con llave, se cambió con ropa que le alcanzó el utilero que sabía de su mal momento y pudo jugar los últimos cinco minutos un poco más relajado, pero nada cómodo con la situación que le había tocado padecer.
El delantero Sergio "Kun" Agüero juega habitualmente al FIFA Play y se lo puede ver en vivo por una aplicación llamada twich, cuenta el informante Comisario de San Alberto.
Es que lo hace diariamente, mínimo una hora por sesión.
Se le puede mandar mensajes.
La mayoría son de gente de Independiente pero él no responde a ninguno.
Usa como trípodes los trofeos de mejor jugador y los voltea, mientras insulta, cada vez que se enoja por cuestiones del juego.
Una de estas noches le pidieron por mensaje que eligiera para jugar un equipo argentino y dijo "bueno, River".
Encima, gritó un gol.
¿Infierno rojo?.
Y... hay historias...
El informante Polaco recuerda que en el predio de Wilde, alguien que atiende un puesto de comidas está bien informado y dice que "El Kun", en realidad, de chico, tiraba para los millonarios.
Y quien haya leído su libro recuerda que allí contó que su papá era de River...
Los recuerdos de Bruno Marioni
El delantero de dilatada carrera Bruno Marioni es querido por varios rincones del planeta.
Como futbolista pero también como piloto de autos de carrera.
Y tiene camino por recorrer como director técnico.
El informante Comisario de San Alberto lo encontró contando anécdotas.
En un vivo transmitido a México por el periodista César Luis Merlo.
Relató una anécdota que le tocó experimentar en el fútbol español, jugando un partido de la Copa del Rey para Tenerife, contra Lanzarote.
Un partido que para él fue una macana.
Comenzaba a las 19:00 y el clima estaba caluroso y húmedo.
Más de 30 grados, cuenta Marioni.
"Para el segundo tiempo refrescó. Empezó con menos de 20 grados. Y yo con retortijones. Le digo al técnico que por favor me reemplazara, que necesitaba un baño", rememora.
Pero la respuesta fue negativa.
"No tengo más cambios", le dijo el míster.
El juego, todo mal.
Lanzarote marcó el cuarto gol.
Así que Marioni contó que miró que los rivales se habían ido a festejar el tanto a un rincón de la cancha, se las arregló, se agachó y dijo: "Que sea lo que Dios quiera".
"Que la gente se imagine", comentó.
Enseguida marcaron el quinto tanto.
En ese otro interín corrió al vestuario, hizo lo que pudo porque estaba cerrado con llave, se cambió con ropa que le alcanzó el utilero que sabía de su mal momento y pudo jugar los últimos cinco minutos un poco más relajado, pero nada cómodo con la situación que le había tocado padecer.