Dos penitenciarios heridos en revuelta en penal con 23 contagiados

Dos penitenciarios resultaron heridos en el medio de una protesta que realizaron presos de la Unidad Penal número 1 de Corrientes, tras la confirmación de 23 casos de coronavirus en el interior de la cárcel, en la que hace menos de un mes un interno murió en medio del reclamo por las condiciones sanitarias y las prisiones domiciliarias.

12 MAY 2020 - 15:23 | Actualizado

El hecho ocurrió este lunes por la tarde, cuando un preso llamado Diego Cáceres, apodado "El Diablo", quien es oriundo de Santo Tomé y cumple una pena por "robo calificado", subió a una de las torres del penal y reclamó la presencia de funcionarios del Ministerio de Seguridad provincial para hablar con ellos.

Cáceres reclamaba hisopados para todos los internos, que se prohiba el ingreso y egreso de todas las personal del penal y que se agilicen los trámites judiciales.

Según informó el sitio del diario El Litoral, alrededor de las 20:30, Cáceres fue bajado de los techos en un operativo en el que fueron utilizados gases lacrimógenos.

Al mismo tiempo, un grupo de internos intentó tomar la guardia y dos penitenciarios resultaron heridos.

Esta martes, Luis Bravo, el subsecretario de Gobierno del Ministerio de Seguridad, confirmó lo sucedido y comentó además que los presos que se contagiaron el virus, están alojados a unos 60 metros de los pabellones, y que los mismos serán trasladados en unos días a un hospital exclusivo para internos con coronavirus, que se está preparando en San Cayetano, el cual debería estar terminado en 10 días, y tendrá unas 58 camas para los pacientes más críticos.

"Fue una tarde movida, ya que en un momento de descuido durante el tiempo de recreo de los internos, uno de ellos, Diego Cáceres, se trepó a una de las torretas y permaneció ahí un largo tiempo, haciendo reclamos personales. A la tarde noche se complicó cuando tres pabellones no querían ingresar a sus celdas después de cenar, porque estaban molestos con la presencia de los 23 internos con Covid", indicó Bravo en declaraciones a LT7.

Y agregó: "Esos internos están alojados a unos 60 metros de los pabellones. Están en buen estado físico, sin síntomas, aislados en lo que llamamos las aulas taller del penal. A los demás internos esto les parece una situación peligrosa, pero Salud Pública lo descarta, porque la distancia es suficiente para evitar contagios a otros internos".

Además, el funcionario dijo que Salud Pública le hizo los hispodados a todas las personas que se encuentran alojadas en el pabellón 11, donde hay 86 internos.

"Lamentablemente ocurrió lo que ocurrió. Todo el mundo sabe que es un virus muy contagioso, por lo que al tener la presencia de dos penitenciarios que circularon por el penal, por ser parte del equipo de custodia de seguridad interna, era de prever que esto podría ocurrir", aclaró.

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12 MAY 2020 - 15:23

El hecho ocurrió este lunes por la tarde, cuando un preso llamado Diego Cáceres, apodado "El Diablo", quien es oriundo de Santo Tomé y cumple una pena por "robo calificado", subió a una de las torres del penal y reclamó la presencia de funcionarios del Ministerio de Seguridad provincial para hablar con ellos.

Cáceres reclamaba hisopados para todos los internos, que se prohiba el ingreso y egreso de todas las personal del penal y que se agilicen los trámites judiciales.

Según informó el sitio del diario El Litoral, alrededor de las 20:30, Cáceres fue bajado de los techos en un operativo en el que fueron utilizados gases lacrimógenos.

Al mismo tiempo, un grupo de internos intentó tomar la guardia y dos penitenciarios resultaron heridos.

Esta martes, Luis Bravo, el subsecretario de Gobierno del Ministerio de Seguridad, confirmó lo sucedido y comentó además que los presos que se contagiaron el virus, están alojados a unos 60 metros de los pabellones, y que los mismos serán trasladados en unos días a un hospital exclusivo para internos con coronavirus, que se está preparando en San Cayetano, el cual debería estar terminado en 10 días, y tendrá unas 58 camas para los pacientes más críticos.

"Fue una tarde movida, ya que en un momento de descuido durante el tiempo de recreo de los internos, uno de ellos, Diego Cáceres, se trepó a una de las torretas y permaneció ahí un largo tiempo, haciendo reclamos personales. A la tarde noche se complicó cuando tres pabellones no querían ingresar a sus celdas después de cenar, porque estaban molestos con la presencia de los 23 internos con Covid", indicó Bravo en declaraciones a LT7.

Y agregó: "Esos internos están alojados a unos 60 metros de los pabellones. Están en buen estado físico, sin síntomas, aislados en lo que llamamos las aulas taller del penal. A los demás internos esto les parece una situación peligrosa, pero Salud Pública lo descarta, porque la distancia es suficiente para evitar contagios a otros internos".

Además, el funcionario dijo que Salud Pública le hizo los hispodados a todas las personas que se encuentran alojadas en el pabellón 11, donde hay 86 internos.

"Lamentablemente ocurrió lo que ocurrió. Todo el mundo sabe que es un virus muy contagioso, por lo que al tener la presencia de dos penitenciarios que circularon por el penal, por ser parte del equipo de custodia de seguridad interna, era de prever que esto podría ocurrir", aclaró.


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