De Boca en Boca y #DesdeElTwitter

El ministro Massoni, contra las cuerdas: le pidieron juicio político y el gobernador lo reprendió por demorar a la salida de Madryn a otro ministro. Cittadini, afuera de Vialidad Provincial. Los chorizos del comisario Gómez para los manifestantes. Y más.

07 JUN 2020 - 21:20 | Actualizado

Hace rato que el ministro de Seguridad, Federico Massoni, dejó de ser un protegido dentro del Gobierno provincial. Sus particulares formas para llevar adelante su gestión y también para comunicarlas, le hicieron ganar muchos enemigos pero, hay que decirlo, un gran aprobación de una parte de la sociedad más inclinada a poner siempre el guiño a la derecha, que suele priorizar “el orden” por sobre los derechos, y que le gustan los funcionarios que andan en la calle (no se sabe bien para qué, pero que andan por la calle).

Las diversas actuaciones públicas de Massoni le habían significado hasta hace un tiempo una especie de blindaje político y, muchas veces, mediático. Inclusive con el gobernador Mariano Arcioni, que lo sigue considerando un amigo y lo ha venido defendiendo a capa y espada.

Claro que el “affaire” de los hábeas corpus presentados por la Secretaría de Derechos Humanos de Nación y por organizaciones civiles locales bajaron al ministro del pedestal, lo ubicaron en el llano y aquel mote de “Capitán América” que lo catapultó al estrellato mediático y de las redes sociales, ahora lo está poniendo al borde de estrellarse contra el suelo.

Esta semana se conocieron los términos de un pedido de juicio político contra Massoni que ingresó a la Legislatura y cuestiona severamente los métodos utilizados por el Ministerio de Seguridad durante la primera etapa de la pandemia, sobre todo.

Ahora, juicio político

El pedido de juicio político ya está en la Comisión Permanente de Asuntos Constitucionales y Justicia de la Legislatura y lleva las firmas de dos abogados comodorenses vinculados a la defensa de los Derecho Humanos, Gastón Bordier y Cynthia Castro. Ambos lo acusan a Massoni por la “falta de cumplimiento de los deberes a su cargo, inobservancia del Orden Constitucional, abuso de autoridad, comisión de delitos en el desempeño de sus funciones; además por impartir órdenes ilegales a la Policía del Chubut, y la violación de Derechos y Garantías de la población en general, arbitrar detenciones sin orden de autoridad judicial competente, por atribuirse facultades extraordinarias que exceden su función”, entre otras.

Concretamente, a Massoni le imputan “haber violado los deberes a su cargo, haber cometido delitos en el desempeño de sus funciones, violando el orden constitucional y los derechos y garantías de las personas, no sólo de los habitantes de la Provincia, sino de otros habitantes de la Nación e incluso de los extranjeros”.

Y piden que se cite a dar testimonio a la comisario Laura Mirantes, exjefa de la Comisaría de Rawson, que precisamente fue desplazada por Massoni luego de que se negara a encarcelar a vecinos que había sido detenidos en el marco de la ruptura de la cuarentena; y al intendente de Trelew, Adrián Maderna, para que responda por qué el ministro Massoni le solicitó el Gimnasio Municipal N° 1 de su ciudad como centro de detención. Y si le consta que después de haberle retirado el uso del mismo (por decisión de Maderna, que se enojó con la actuación policial), el Ministerio de Seguridad usó otros centros de detención en la ciudad valletana.

El futuro de Massoni se definirá en la Legislatura, en donde tiene algunos amigos pero también muchos adversarios de otras épocas, que están esperando con “cuchillo y tenedor” al ministro. Desde el comienzo de la genial película “Kill Bill” se sabe que “la venganza es un plato que se sirve frío”.

A los gritos

Que las acciones de Massoni bajaron no quedan dudas, pero que valen muy poco quedó comprobado el viernes, cuando muchos escucharon desde los pasillos los gritos que daba el gobernador Arcinoni, cuando se enteró que el ministro de Gobierno, José Grazzini, había sido impedido de salir de Puerto Madryn (donde reside) por un control policial que le impidió llegar a tiempo a Rawson. Los propios agentes no anduvieron con vueltas y dijeron que la orden la había dado Massoni.

Los gritos de Arcioni se hicieron sentir cuando el propio Massoni asumió su decisión e intentó explicarla. El gobernador dijo muchas cosas irreproducibles, y otras que –según los oídos alertas de los habitantes de los despachos contiguos- sonaron a algo así como “me tenés podrido con las cosas que hacés”, o algo por el estilo.

Lo cierto es que los enemigos de Massoni -que no son pocos- ya lo dan por “ido”, pero admiten que la falta de un nombre (hombre o mujer) que pueda hacerse cargo de la situación dilata el recambio y atrasa el final, que parece inevitable.

Otros creen que el Ministerio de Seguridad, que fue creado a medida de Massoni, finalmente vuelva a ser un área dentro del Ministerio de Gobierno.

Amarilla para Cavaco

Se ve que el gobernador Arcioni andaba con pocas pulgas en los últimos días porque hasta el joven ministro Leandro Cavaco, titular de la cartera de Producción, sufrió el rigor.

Resulta que Arcioni convocó a una reunión ampliada de Gabinete durante la cual se abordaron los detalles de cómo se trabajará en la nueva extensión de la cuarentena anunciada por el Gobierno nacional.

Participaron ministros, secretarios y presidentes de entes, y el gobernador fue estricto con la hora de comienzo. Tanto, que Cavaco, que venía de una intensa gira por el interior, llegó tarde al mitín y el gobernador no permitió que entrara.

Se trata de un enojo pasajero porque Cavaco, además de funcionario, es familiar del gobernador. Pero Arcioni quiso dejar en claro que no excepciones con los horarios.

Roja para Cittadini

No es formal pero ya todos lo saben: Nicolás Cittadini dejará de ser el presidente de la Administración de Vialidad Provincial.

Todo comenzó hace dos semanas, cuando el gobernador comenzó a delinear un acta acuerdo para la incorporación de personal técnico que concursó para los cargos vacantes generados por jubilaciones en la AVP. Más allá de la importancia del tema, Arcioni quería acercar posiciones con el Sindicato de Trabajadores Viales del Chubut (SITRAVICH), uno de los gremios más combativos, que el año pasado en plena crisis protagonizó la mayor cantidad de cortes de rutas por reclamos salariales que se recuerden.

La cuestión es que se le pidió a Cittadini, un “enemigo público número uno” del gremio que firmara esos papeles. Pasó el fin de semana y la firma no pareció. Ni tampoco Cittadini al acto del lunes pasado, en donde Arcioni chocó “puñitos” con Carlos Milani, el líder SITRAVICH, y se acordó el pago de cláusulas gatillo de 2019 que eran adeudadas.

Con ese panorama, en el Gobierno ya casi nadie le atiende el teléfono a Cittadini, y ya se pusieron a buscar opciones para reemplazarlo.

La choriceada de Gómez

Durante la manifestación que realizaron la semana pasada los empleados de Salud en la Peatonal Fontana, frente a Casa de Gobierno en Rawson, a cada funcionario que pasaba por el lugar cuando ingresaban o salían del edificio se les recordaba que ellos todavía no habían cobrado sus haberes y si podía ayudar con alguna gestión.

Cuando fue el turno del jefe de la Policía del Chubut, el comisario Miguel Gómez, este escuchó a los manifestantes y les explicó que escapaba a su órbita poder solucionar el pedido. En ese momento se escuchó a uno de los trabajadores decir “ya ni para comer tenemos”, reclamando que aporte aunque sea los chorizos para comer todos juntos ese mediodía en el Hospital.

Y así fue: unos minutos después de la conversación, el jefe policial regresó al lugar con una bolsa de chorizos para tirar a la parrilla. Que como corresponde, fueron deglutidos en menos que canta un gallo.

Naturaleza y Legislatura

Desde la reforma del edificio histórico de la Legislatura, colocaron en todos los pisos del lugar enormes maceteros con plantas que embellecen el lugar y cortan así un poco la imagen gris y cuadrada que presenta la arquitectura edilicia.

Estas plantas han sido testigo de todo tipo de situaciones, sobre todo víctimas de las colillas de cigarrillos de todos los fumadores que concurren o habitan la casa, aunque está estrictamente prohibido fumar en edificios públicos.

Principalmente, las plantas ubicadas en el primer piso, donde se ubican las oficinas de los diputados, además del ingreso al recinto. Como allí hay un amplio hall, muchos empleados y diputados se ubican para fumar, con un enorme cartel de fondo que dice: Prohibido Fumar.

Sin embargo, con la falta de tránsito de personal y de la actividad general de la Legislatura desde marzo pasado, las plantas están respirando un poco de aire puro y ya no son el “cenicero” del pueblo. Esto generó que algunas de ellas alcancen un impulso importante en su crecimiento que no pasó inadvertido para los viejos empleados del lugar (sobre todo los que no fuman), que festejaron el encontrarlas más grandes y hasta más verdes.

Alguien se apiado de as pobres plantas y puso un cartelito en cada maceta para recordar que no tiren colillas ni las usen de ceniceros.

Ciencias Políticas

Después de muchos años, la sede Trelew de la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales está concursando un cargo para la Licenciatura en Ciencias Políticas que se dicta en la casa.

Se trata de una suplencia para dictar la materia Historia Política Contemporánea, que hasta hace poco la dictaba Mariela Flores Torres, que está de licencia debido a que asumió como concejal de Trelew.

Según trascendió hay once postulantes para ocupar esa suplencia mientras la titular ocupa su banca en el Concejo. Algunos nombres son conocidos y variopintos, entre ellos el de José Horacio Giaquinta, un exmarino que se instaló en Trelew luego de ser jefe de la Base “Almirante Zar”, se graduó como Licenciado en Ciencias Políticas, fue consejero de la carrera y, además, es un entusiasta actor de teatro.

Giaquinta era el jefe de la Base Zar en 2006 cuando el juez federal Hugo Sastre allanó el lugar y abrió una causa por el espionaje ilegal que se hacía en “La Casita”, una dependencia de la Inteligencia de la Marina que funcionaba en el lugar, que espiaba a dirigentes políticos, sociales, gremiales y, además, a la sede de la Universidad local.

El entonces marino no fue imputado por el hecho porque se demostró que la conducción operativa de la Base no tenía que ver con el espionaje que se realizaba desde allí, que estaba a cargo del capital Gustavo Monzani, que junto a otros camaradas y jefes fue condenado por el caso.

Giaquinta compite para esta suplencia con otros diez aspirantes, entre ellas María Victoria Das Neves, más conocida como “Mariví”, la hija del exgobernador fallecido en 2018.

El próximo 17 de junio se reunirá el Cuerpo Consultivo de la carrera y definirá quién se quedara con el cargo.

Entre renuncias y TikTok

El jueves pasado fue un día gris para el personal de Salud. Más de cuatro horas se mantuvo la ocupación del Hospital Zonal de Trelew. El dato que llamó la atención es que el personal policial enviado para cubrir la situación se paró en la escalera de ingreso y sólo contemplaron lo que estaba sucediendo: desde médicos hasta choferes pidiendo cobrar.

“No es una lucha de trabajadores, está bien que esté la Policía. Ellos están trabajando como nosotros. Y queremos cobrar el mismo día que ellos”, dijeron.

El primero en salir fue Sebastián Restuccia, el director del HZT. Con un papel en mano, leyó la voluntad de los directores de varias áreas programáticas de la provincia de renunciar a sus cargos. Inclusive él.

La nota quedó plasmada en una fotografía, aunque el gobernador Arcioni dijera más tarde en una conferencia de prensa que “nadie había presentado la renuncia ante el Ministerio de Salud”, y que el anuncio había sido “mediático”.

Un dato recurrente en las manifestaciones de los últimos días son las críticas que los trabajadores hacen a Restuccia por la utilización de las redes sociales. Sobre de TikTok, una en donde los usuarios suben video-selfies con filtros de sonido.

Resulta que Restuccia suele compartir sus TikTok de contenido humorístico y personal. Pero la gente deslizó su antipatía por ello. Tal vez, porque no es el momento para tantas risas o parodias de “Esperancita”, uno de los audios más “tiktokeados”.

El viernes, en medio de la concentración a las puertas del Hospital, un médico de la institución tomó el micrófono y dijo: “Los insto a estar unidos más que nunca, este hospital con la vocación de cada uno de nosotros se está manteniendo. Y no lo hace con fotos en ningún medio y para ningún TikTok”. El palo tenía un claro destinatario.#

Desde el Twitter

Porque informan que el fiscal Fernando Rivarola calificó de esa manera el accionar de los acusados de violar en grupo a una joven de 16 años en 2012 pic.twitter.com/o77xJuDQFI

— ¿Por qué es tendencia? (@porquetendencia) June 3, 2020

"La manera en la que el fiscal Fernando Rivarola propone interpretar la violación a una muchacha de 16 años es un escándalo de la 'Justicia' argentina", Rita Segato.https://t.co/ylmdwOA05v pic.twitter.com/088Ae7upfT

— La Garganta Poderosa (@gargantapodero) June 5, 2020

¿Igualdad? ¿Paridad? Hechos no discursos vacíos

— natalia ferrari (@natiaferrari) June 4, 2020

Enterate de las noticias de PROVINCIA a través de nuestro newsletter

Anotate para recibir las noticias más importantes de esta sección.

Te podés dar de baja en cualquier momento con un solo clic.

Las más leídas

07 JUN 2020 - 21:20

Hace rato que el ministro de Seguridad, Federico Massoni, dejó de ser un protegido dentro del Gobierno provincial. Sus particulares formas para llevar adelante su gestión y también para comunicarlas, le hicieron ganar muchos enemigos pero, hay que decirlo, un gran aprobación de una parte de la sociedad más inclinada a poner siempre el guiño a la derecha, que suele priorizar “el orden” por sobre los derechos, y que le gustan los funcionarios que andan en la calle (no se sabe bien para qué, pero que andan por la calle).

Las diversas actuaciones públicas de Massoni le habían significado hasta hace un tiempo una especie de blindaje político y, muchas veces, mediático. Inclusive con el gobernador Mariano Arcioni, que lo sigue considerando un amigo y lo ha venido defendiendo a capa y espada.

Claro que el “affaire” de los hábeas corpus presentados por la Secretaría de Derechos Humanos de Nación y por organizaciones civiles locales bajaron al ministro del pedestal, lo ubicaron en el llano y aquel mote de “Capitán América” que lo catapultó al estrellato mediático y de las redes sociales, ahora lo está poniendo al borde de estrellarse contra el suelo.

Esta semana se conocieron los términos de un pedido de juicio político contra Massoni que ingresó a la Legislatura y cuestiona severamente los métodos utilizados por el Ministerio de Seguridad durante la primera etapa de la pandemia, sobre todo.

Ahora, juicio político

El pedido de juicio político ya está en la Comisión Permanente de Asuntos Constitucionales y Justicia de la Legislatura y lleva las firmas de dos abogados comodorenses vinculados a la defensa de los Derecho Humanos, Gastón Bordier y Cynthia Castro. Ambos lo acusan a Massoni por la “falta de cumplimiento de los deberes a su cargo, inobservancia del Orden Constitucional, abuso de autoridad, comisión de delitos en el desempeño de sus funciones; además por impartir órdenes ilegales a la Policía del Chubut, y la violación de Derechos y Garantías de la población en general, arbitrar detenciones sin orden de autoridad judicial competente, por atribuirse facultades extraordinarias que exceden su función”, entre otras.

Concretamente, a Massoni le imputan “haber violado los deberes a su cargo, haber cometido delitos en el desempeño de sus funciones, violando el orden constitucional y los derechos y garantías de las personas, no sólo de los habitantes de la Provincia, sino de otros habitantes de la Nación e incluso de los extranjeros”.

Y piden que se cite a dar testimonio a la comisario Laura Mirantes, exjefa de la Comisaría de Rawson, que precisamente fue desplazada por Massoni luego de que se negara a encarcelar a vecinos que había sido detenidos en el marco de la ruptura de la cuarentena; y al intendente de Trelew, Adrián Maderna, para que responda por qué el ministro Massoni le solicitó el Gimnasio Municipal N° 1 de su ciudad como centro de detención. Y si le consta que después de haberle retirado el uso del mismo (por decisión de Maderna, que se enojó con la actuación policial), el Ministerio de Seguridad usó otros centros de detención en la ciudad valletana.

El futuro de Massoni se definirá en la Legislatura, en donde tiene algunos amigos pero también muchos adversarios de otras épocas, que están esperando con “cuchillo y tenedor” al ministro. Desde el comienzo de la genial película “Kill Bill” se sabe que “la venganza es un plato que se sirve frío”.

A los gritos

Que las acciones de Massoni bajaron no quedan dudas, pero que valen muy poco quedó comprobado el viernes, cuando muchos escucharon desde los pasillos los gritos que daba el gobernador Arcinoni, cuando se enteró que el ministro de Gobierno, José Grazzini, había sido impedido de salir de Puerto Madryn (donde reside) por un control policial que le impidió llegar a tiempo a Rawson. Los propios agentes no anduvieron con vueltas y dijeron que la orden la había dado Massoni.

Los gritos de Arcioni se hicieron sentir cuando el propio Massoni asumió su decisión e intentó explicarla. El gobernador dijo muchas cosas irreproducibles, y otras que –según los oídos alertas de los habitantes de los despachos contiguos- sonaron a algo así como “me tenés podrido con las cosas que hacés”, o algo por el estilo.

Lo cierto es que los enemigos de Massoni -que no son pocos- ya lo dan por “ido”, pero admiten que la falta de un nombre (hombre o mujer) que pueda hacerse cargo de la situación dilata el recambio y atrasa el final, que parece inevitable.

Otros creen que el Ministerio de Seguridad, que fue creado a medida de Massoni, finalmente vuelva a ser un área dentro del Ministerio de Gobierno.

Amarilla para Cavaco

Se ve que el gobernador Arcioni andaba con pocas pulgas en los últimos días porque hasta el joven ministro Leandro Cavaco, titular de la cartera de Producción, sufrió el rigor.

Resulta que Arcioni convocó a una reunión ampliada de Gabinete durante la cual se abordaron los detalles de cómo se trabajará en la nueva extensión de la cuarentena anunciada por el Gobierno nacional.

Participaron ministros, secretarios y presidentes de entes, y el gobernador fue estricto con la hora de comienzo. Tanto, que Cavaco, que venía de una intensa gira por el interior, llegó tarde al mitín y el gobernador no permitió que entrara.

Se trata de un enojo pasajero porque Cavaco, además de funcionario, es familiar del gobernador. Pero Arcioni quiso dejar en claro que no excepciones con los horarios.

Roja para Cittadini

No es formal pero ya todos lo saben: Nicolás Cittadini dejará de ser el presidente de la Administración de Vialidad Provincial.

Todo comenzó hace dos semanas, cuando el gobernador comenzó a delinear un acta acuerdo para la incorporación de personal técnico que concursó para los cargos vacantes generados por jubilaciones en la AVP. Más allá de la importancia del tema, Arcioni quería acercar posiciones con el Sindicato de Trabajadores Viales del Chubut (SITRAVICH), uno de los gremios más combativos, que el año pasado en plena crisis protagonizó la mayor cantidad de cortes de rutas por reclamos salariales que se recuerden.

La cuestión es que se le pidió a Cittadini, un “enemigo público número uno” del gremio que firmara esos papeles. Pasó el fin de semana y la firma no pareció. Ni tampoco Cittadini al acto del lunes pasado, en donde Arcioni chocó “puñitos” con Carlos Milani, el líder SITRAVICH, y se acordó el pago de cláusulas gatillo de 2019 que eran adeudadas.

Con ese panorama, en el Gobierno ya casi nadie le atiende el teléfono a Cittadini, y ya se pusieron a buscar opciones para reemplazarlo.

La choriceada de Gómez

Durante la manifestación que realizaron la semana pasada los empleados de Salud en la Peatonal Fontana, frente a Casa de Gobierno en Rawson, a cada funcionario que pasaba por el lugar cuando ingresaban o salían del edificio se les recordaba que ellos todavía no habían cobrado sus haberes y si podía ayudar con alguna gestión.

Cuando fue el turno del jefe de la Policía del Chubut, el comisario Miguel Gómez, este escuchó a los manifestantes y les explicó que escapaba a su órbita poder solucionar el pedido. En ese momento se escuchó a uno de los trabajadores decir “ya ni para comer tenemos”, reclamando que aporte aunque sea los chorizos para comer todos juntos ese mediodía en el Hospital.

Y así fue: unos minutos después de la conversación, el jefe policial regresó al lugar con una bolsa de chorizos para tirar a la parrilla. Que como corresponde, fueron deglutidos en menos que canta un gallo.

Naturaleza y Legislatura

Desde la reforma del edificio histórico de la Legislatura, colocaron en todos los pisos del lugar enormes maceteros con plantas que embellecen el lugar y cortan así un poco la imagen gris y cuadrada que presenta la arquitectura edilicia.

Estas plantas han sido testigo de todo tipo de situaciones, sobre todo víctimas de las colillas de cigarrillos de todos los fumadores que concurren o habitan la casa, aunque está estrictamente prohibido fumar en edificios públicos.

Principalmente, las plantas ubicadas en el primer piso, donde se ubican las oficinas de los diputados, además del ingreso al recinto. Como allí hay un amplio hall, muchos empleados y diputados se ubican para fumar, con un enorme cartel de fondo que dice: Prohibido Fumar.

Sin embargo, con la falta de tránsito de personal y de la actividad general de la Legislatura desde marzo pasado, las plantas están respirando un poco de aire puro y ya no son el “cenicero” del pueblo. Esto generó que algunas de ellas alcancen un impulso importante en su crecimiento que no pasó inadvertido para los viejos empleados del lugar (sobre todo los que no fuman), que festejaron el encontrarlas más grandes y hasta más verdes.

Alguien se apiado de as pobres plantas y puso un cartelito en cada maceta para recordar que no tiren colillas ni las usen de ceniceros.

Ciencias Políticas

Después de muchos años, la sede Trelew de la Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales está concursando un cargo para la Licenciatura en Ciencias Políticas que se dicta en la casa.

Se trata de una suplencia para dictar la materia Historia Política Contemporánea, que hasta hace poco la dictaba Mariela Flores Torres, que está de licencia debido a que asumió como concejal de Trelew.

Según trascendió hay once postulantes para ocupar esa suplencia mientras la titular ocupa su banca en el Concejo. Algunos nombres son conocidos y variopintos, entre ellos el de José Horacio Giaquinta, un exmarino que se instaló en Trelew luego de ser jefe de la Base “Almirante Zar”, se graduó como Licenciado en Ciencias Políticas, fue consejero de la carrera y, además, es un entusiasta actor de teatro.

Giaquinta era el jefe de la Base Zar en 2006 cuando el juez federal Hugo Sastre allanó el lugar y abrió una causa por el espionaje ilegal que se hacía en “La Casita”, una dependencia de la Inteligencia de la Marina que funcionaba en el lugar, que espiaba a dirigentes políticos, sociales, gremiales y, además, a la sede de la Universidad local.

El entonces marino no fue imputado por el hecho porque se demostró que la conducción operativa de la Base no tenía que ver con el espionaje que se realizaba desde allí, que estaba a cargo del capital Gustavo Monzani, que junto a otros camaradas y jefes fue condenado por el caso.

Giaquinta compite para esta suplencia con otros diez aspirantes, entre ellas María Victoria Das Neves, más conocida como “Mariví”, la hija del exgobernador fallecido en 2018.

El próximo 17 de junio se reunirá el Cuerpo Consultivo de la carrera y definirá quién se quedara con el cargo.

Entre renuncias y TikTok

El jueves pasado fue un día gris para el personal de Salud. Más de cuatro horas se mantuvo la ocupación del Hospital Zonal de Trelew. El dato que llamó la atención es que el personal policial enviado para cubrir la situación se paró en la escalera de ingreso y sólo contemplaron lo que estaba sucediendo: desde médicos hasta choferes pidiendo cobrar.

“No es una lucha de trabajadores, está bien que esté la Policía. Ellos están trabajando como nosotros. Y queremos cobrar el mismo día que ellos”, dijeron.

El primero en salir fue Sebastián Restuccia, el director del HZT. Con un papel en mano, leyó la voluntad de los directores de varias áreas programáticas de la provincia de renunciar a sus cargos. Inclusive él.

La nota quedó plasmada en una fotografía, aunque el gobernador Arcioni dijera más tarde en una conferencia de prensa que “nadie había presentado la renuncia ante el Ministerio de Salud”, y que el anuncio había sido “mediático”.

Un dato recurrente en las manifestaciones de los últimos días son las críticas que los trabajadores hacen a Restuccia por la utilización de las redes sociales. Sobre de TikTok, una en donde los usuarios suben video-selfies con filtros de sonido.

Resulta que Restuccia suele compartir sus TikTok de contenido humorístico y personal. Pero la gente deslizó su antipatía por ello. Tal vez, porque no es el momento para tantas risas o parodias de “Esperancita”, uno de los audios más “tiktokeados”.

El viernes, en medio de la concentración a las puertas del Hospital, un médico de la institución tomó el micrófono y dijo: “Los insto a estar unidos más que nunca, este hospital con la vocación de cada uno de nosotros se está manteniendo. Y no lo hace con fotos en ningún medio y para ningún TikTok”. El palo tenía un claro destinatario.#

Desde el Twitter

Porque informan que el fiscal Fernando Rivarola calificó de esa manera el accionar de los acusados de violar en grupo a una joven de 16 años en 2012 pic.twitter.com/o77xJuDQFI

— ¿Por qué es tendencia? (@porquetendencia) June 3, 2020

"La manera en la que el fiscal Fernando Rivarola propone interpretar la violación a una muchacha de 16 años es un escándalo de la 'Justicia' argentina", Rita Segato.https://t.co/ylmdwOA05v pic.twitter.com/088Ae7upfT

— La Garganta Poderosa (@gargantapodero) June 5, 2020

¿Igualdad? ¿Paridad? Hechos no discursos vacíos

— natalia ferrari (@natiaferrari) June 4, 2020


NOTICIAS RELACIONADAS