Miquelarena adelantó que se presentará en la comisión que tratará el tema para plantear su oposición y anticipó que si Legislatura lo aprueba, aplicaría la misma metodología de Tucumán para frenar su implementación.
Las causas por las que se opone son varias: la falta de recursos económicos, de lugares de detención, la ausencia de previsión para la rehabilitación de las personas adictas, la incoherencia de haber gestionado un Juzgado Federal para Puerto Madryn para atender esta problemática y ahora querer cambiarla de órbita, entre otras.
Señaló dos aspectos operativos significativos. Uno es que no estarán los nuevos fiscales en funcionamiento para la puesta en práctica de la Ley. “Se dice que la vigencia comenzaría el 1º de septiembre, o sea dentro de un mes y medio (se ríe). Y que se va a fortalecer el MPF con dos fiscales por jurisdicción. Quiero dejar en claro que a la dificultad natural de conseguir fiscales, se suma lo que tarda el proceso. Un fiscal en Comodoro Rivadavia está pedido desde el 9 de julio del año pasado, otro en Esquel desde el 20 de mayo de 2019, otro fiscal en la comarca también está pedido desde esa fecha, dos fiscales en Trelew están pedidos desde el 9 de agosto de 2019 y del 10 de julio de 2019. Un fiscal en Rawson está pedido desde esa última fecha. Para todos esos cargos, habiendo pasado un año, ni siquiera se ha llamado a concurso” reclamó.
Una vez efectuado el llamado hay muchos más pasos que demoran en total, unos dos años: “Después del llamado tiene que prepararse el concurso, hacer el concurso, ganarlo, elevarlo a la Legislatura, que trate el pliego para aprobarlo, que tarda varios meses; que vuelva al Consejo de la Magistratura, que salga la resolución, que venga a la Procuración y que se le tome juramento. Con suerte dos años, desde que tengo el cargo hasta que presta funciones”, aseguró. “Esto no es patear una piedra y encontrar fiscales. Es complicado. Y además cada fiscal trabaja con un equipo de colaboradores”.
El otro aspecto por el que se opone Miquelarena tiene que ver con la percepción de cómo enfrentar el problema del tráfico de drogas: “Siempre se va desde el adicto hacia arriba. Me parece que es momento de empezar a investigar desde el lavado de dinero para abajo a ver hasta dónde se llega y pegar donde más duele que es precisamente donde se benefician económicamente con este flagelo que es la droga”.
“No se entiende cuál es la intención o cuál es la movida. Yo no reniego en cuanto hay que mejorarlo, pero mi propuesta es al revés, es cambiar la lógica de la investigación. Alguna vez Einstein dijo que la definición de locura es hacer exactamente lo mismo y pretender resultados distintos. Bueno, acá estamos haciendo lo mismo y esperando resultados distintos” remató el procurador.
Miquelarena adelantó que se presentará en la comisión que tratará el tema para plantear su oposición y anticipó que si Legislatura lo aprueba, aplicaría la misma metodología de Tucumán para frenar su implementación.
Las causas por las que se opone son varias: la falta de recursos económicos, de lugares de detención, la ausencia de previsión para la rehabilitación de las personas adictas, la incoherencia de haber gestionado un Juzgado Federal para Puerto Madryn para atender esta problemática y ahora querer cambiarla de órbita, entre otras.
Señaló dos aspectos operativos significativos. Uno es que no estarán los nuevos fiscales en funcionamiento para la puesta en práctica de la Ley. “Se dice que la vigencia comenzaría el 1º de septiembre, o sea dentro de un mes y medio (se ríe). Y que se va a fortalecer el MPF con dos fiscales por jurisdicción. Quiero dejar en claro que a la dificultad natural de conseguir fiscales, se suma lo que tarda el proceso. Un fiscal en Comodoro Rivadavia está pedido desde el 9 de julio del año pasado, otro en Esquel desde el 20 de mayo de 2019, otro fiscal en la comarca también está pedido desde esa fecha, dos fiscales en Trelew están pedidos desde el 9 de agosto de 2019 y del 10 de julio de 2019. Un fiscal en Rawson está pedido desde esa última fecha. Para todos esos cargos, habiendo pasado un año, ni siquiera se ha llamado a concurso” reclamó.
Una vez efectuado el llamado hay muchos más pasos que demoran en total, unos dos años: “Después del llamado tiene que prepararse el concurso, hacer el concurso, ganarlo, elevarlo a la Legislatura, que trate el pliego para aprobarlo, que tarda varios meses; que vuelva al Consejo de la Magistratura, que salga la resolución, que venga a la Procuración y que se le tome juramento. Con suerte dos años, desde que tengo el cargo hasta que presta funciones”, aseguró. “Esto no es patear una piedra y encontrar fiscales. Es complicado. Y además cada fiscal trabaja con un equipo de colaboradores”.
El otro aspecto por el que se opone Miquelarena tiene que ver con la percepción de cómo enfrentar el problema del tráfico de drogas: “Siempre se va desde el adicto hacia arriba. Me parece que es momento de empezar a investigar desde el lavado de dinero para abajo a ver hasta dónde se llega y pegar donde más duele que es precisamente donde se benefician económicamente con este flagelo que es la droga”.
“No se entiende cuál es la intención o cuál es la movida. Yo no reniego en cuanto hay que mejorarlo, pero mi propuesta es al revés, es cambiar la lógica de la investigación. Alguna vez Einstein dijo que la definición de locura es hacer exactamente lo mismo y pretender resultados distintos. Bueno, acá estamos haciendo lo mismo y esperando resultados distintos” remató el procurador.