Ballenas en la costa de El Doradillo
Dieron un gran espectáculo a metros de la costa. Se divisaron más de 14 cetáceos en 100 metros.
Estamos en época de ballenas. Un equipo fotográfico de Jornada viajó el sábado a Puerto Madryn y Puerto Pirámides para contemplarlas en su estado más natural. El 15 de junio era la fecha de comienzo de la temporada de avistaje embarcado, sin embargo la pandemia frenó toda actividad turística.
Puerto Pirámides, localidad que vive del turismo, sufre fuertemente las restricciones por la pandemia. La mayoría de los comercios permanecen cerrados, mientras que las empresas dedicadas al avistaje de ballenas aguardan la aprobación del turismo comarcal y esperan ansiosos la vuelta al trabajo.
Micky Sosa, responsable de la empresa Peke Sosa Avistajes, asegura que ya cuentan con los protocolos necesarios. “Tenemos las medidas de seguridad para antes del embarque y dentro de la embarcación”, dice el capitán. Puerto Pirámides es una localidad que no ha tenido casos de Covid-19 hasta la fecha.
Pirámides está vacío desde el comienzo de la cuarentena. Así lo asegura Claudio Nicolini, guía de fauna marina de la Península Valdés. “Estamos esperando que el ingreso y la circulación de gente de la comarca sea efectiva para que esta rueda se empiece a mover lentamente y de forma segura”, expresa Nicolini.
Desde mayo, la ballena franca austral comenzó a ingresar en los golfos Nuevo y San José, sus lugares preferidos para buscar aguas calmas y cumplir con su ciclo reproductivo. Hay quienes aseguran que el número de ballenas y de crías es superior al de años anteriores, un hecho ligado estrechamente a la ausencia de embarcaciones. Esperan estudiar la conducta de las crías, desacostumbradas a la visita de barcos, una vez que se liberen los avistajes.
En el Área Natural Protegida El Doradillo, los ciudadanos madrynenses tienen libre paso a la costa. Por la proximidad con las ballenas, es el mejor lugar para verlas.
Aquellos habitantes del Valle que deseen visitar Puerto Madryn deben recordar que es obligatorio contar con el permiso de circulación en vigencia. Los controles son estrictos en el ingreso a Puerto Madryn y también en el acceso a la Península Valdés. Hay que tener en cuenta que el turismo, en el contexto que vivimos, está prohibido, y por eso es indispensable tener la certificación oficial.
El Boletín Oficial de Provincia, que incluye entre sus medidas un protocolo que regula la habilitación del turismo comarcal en la zona del Valle y en la Cordillera (no incluye el conglomerado integrado por Comodoro Rivadavia y Rada Tilly), fue elevado a Nación y necesita su aval antes de ponerse en marcha. Se espera una respuesta para la semana venidera. Una vez aprobado, los ciudadanos del Valle, Puerto Madryn y la Península podrán circular libremente entre ciudades. Lo mismo ocurrirá entre las localidades de la zona cordillerana.
Estamos en época de ballenas. Un equipo fotográfico de Jornada viajó el sábado a Puerto Madryn y Puerto Pirámides para contemplarlas en su estado más natural. El 15 de junio era la fecha de comienzo de la temporada de avistaje embarcado, sin embargo la pandemia frenó toda actividad turística.
Puerto Pirámides, localidad que vive del turismo, sufre fuertemente las restricciones por la pandemia. La mayoría de los comercios permanecen cerrados, mientras que las empresas dedicadas al avistaje de ballenas aguardan la aprobación del turismo comarcal y esperan ansiosos la vuelta al trabajo.
Micky Sosa, responsable de la empresa Peke Sosa Avistajes, asegura que ya cuentan con los protocolos necesarios. “Tenemos las medidas de seguridad para antes del embarque y dentro de la embarcación”, dice el capitán. Puerto Pirámides es una localidad que no ha tenido casos de Covid-19 hasta la fecha.
Pirámides está vacío desde el comienzo de la cuarentena. Así lo asegura Claudio Nicolini, guía de fauna marina de la Península Valdés. “Estamos esperando que el ingreso y la circulación de gente de la comarca sea efectiva para que esta rueda se empiece a mover lentamente y de forma segura”, expresa Nicolini.
Desde mayo, la ballena franca austral comenzó a ingresar en los golfos Nuevo y San José, sus lugares preferidos para buscar aguas calmas y cumplir con su ciclo reproductivo. Hay quienes aseguran que el número de ballenas y de crías es superior al de años anteriores, un hecho ligado estrechamente a la ausencia de embarcaciones. Esperan estudiar la conducta de las crías, desacostumbradas a la visita de barcos, una vez que se liberen los avistajes.
En el Área Natural Protegida El Doradillo, los ciudadanos madrynenses tienen libre paso a la costa. Por la proximidad con las ballenas, es el mejor lugar para verlas.
Aquellos habitantes del Valle que deseen visitar Puerto Madryn deben recordar que es obligatorio contar con el permiso de circulación en vigencia. Los controles son estrictos en el ingreso a Puerto Madryn y también en el acceso a la Península Valdés. Hay que tener en cuenta que el turismo, en el contexto que vivimos, está prohibido, y por eso es indispensable tener la certificación oficial.
El Boletín Oficial de Provincia, que incluye entre sus medidas un protocolo que regula la habilitación del turismo comarcal en la zona del Valle y en la Cordillera (no incluye el conglomerado integrado por Comodoro Rivadavia y Rada Tilly), fue elevado a Nación y necesita su aval antes de ponerse en marcha. Se espera una respuesta para la semana venidera. Una vez aprobado, los ciudadanos del Valle, Puerto Madryn y la Península podrán circular libremente entre ciudades. Lo mismo ocurrirá entre las localidades de la zona cordillerana.