La meseta y la minería: “Debemos decidir nosotros”
La expresidenta comunal de Las Plumas, Marina Barrera, reivindicó las manifestaciones de los habitantes de la Meseta que piden el desarrollo de la región, la más amplia de la provincia pero la menos poblada por la constante emigración ante la falta de oportunidades laborales, y por las carencias de infraestructura. Barrera advirtió que no aprovechar los recursos minerales es consecuencia directa del accionar violento de grupos que se oponen al desarrollo y que tienen epicentro en las localidades más pobladas.
“Quienes debemos resolver si se puede avanzar en una explotación racional del recurso somos nosotros”, dijo Barrera. “Sostenemos un grito de hartazgo que viene a unirnos como quizás nunca antes a quienes somos de la región”, dijo en alusión a la consigna “#QueremosDecidir.
En Las Plumas la gente salió a manifestarse, igual que en Gan Gan, Gastre, Blancuntre y Telsen. Los habitantes de la Meseta “fuimos objeto de análisis y de innumerables diagnósticos de los gobiernos de turno, con caravanas interminables de funcionarios analizando y evaluando cómo se podría revertir la realidad de esta región castigada por la desertificación, despoblamiento y la letanía”.
“Observamos siempre respetuosos, y esperamos, quizás con cierta ingenuidad, el surgimiento de planes o propuestas que nunca llegaron”, recordó. “Cuando la conectividad era escasa también era escasa la información de los vecinos, y mucho más escasa la participación de los pobladores en el debate. Pero se terminó”.
Barrera dijo que los sectores que se oponen a la minería, “opinan sin conocer y sin siquiera alarmarse de los tremendos daños ambientales que padecen sus ciudades. La realidad del Río Chubut no parece alarmarlos, ni los basurales a cielo abierto, ni sus desechos industriales”.
En este sentido, “la realidad nos pone frente a un nuevo dilema: o los diputados provinciales escuchan a las comunidades de la Meseta y sus reclamos por la igualdad de oportunidades, o ceden por miedo ante las amenazas de los violentos”.
“Amamos nuestro río porque nos criamos al lado de él, y vamos a ser los primeros en protegerlo. Estuve en Rawson y Playa Unión y vi gente recolectando firmas para prohibir la minería y una alarmante bandera negra y roja y me pregunté: ¿se preocuparán así por la contaminación en “El Elsa”? ¿realmente la gente está asustada? ¿o hay lobby anti minero que pretende despoblar totalmente la meseta por alguna razón?”, continuó.
“Cuando escucho ‘no es no’ en forma terminante y agresiva, me pregunto: ¿cuál es el mensaje? ¿No al debate? ¿No al desarrollo? ¿No al conocimiento? ¿No a la ciencia? ¿No a la geología? Si tenemos recursos que quizás ni conocemos, ¿por qué no estudiarlos? Y si son estratégicos, ¿por qué no conocerlos?”, añadió.
En este escenario, Barrera finalizó: “Queremos decidir porque estamos comprometidos con nuestra gente, con nuestra tierra, con nuestro río y con nuestro ambiente. Y, sobre todo, porque es nuestro deber pensar y plantear que podemos tener un futuro mejor”.#
La expresidenta comunal de Las Plumas, Marina Barrera, reivindicó las manifestaciones de los habitantes de la Meseta que piden el desarrollo de la región, la más amplia de la provincia pero la menos poblada por la constante emigración ante la falta de oportunidades laborales, y por las carencias de infraestructura. Barrera advirtió que no aprovechar los recursos minerales es consecuencia directa del accionar violento de grupos que se oponen al desarrollo y que tienen epicentro en las localidades más pobladas.
“Quienes debemos resolver si se puede avanzar en una explotación racional del recurso somos nosotros”, dijo Barrera. “Sostenemos un grito de hartazgo que viene a unirnos como quizás nunca antes a quienes somos de la región”, dijo en alusión a la consigna “#QueremosDecidir.
En Las Plumas la gente salió a manifestarse, igual que en Gan Gan, Gastre, Blancuntre y Telsen. Los habitantes de la Meseta “fuimos objeto de análisis y de innumerables diagnósticos de los gobiernos de turno, con caravanas interminables de funcionarios analizando y evaluando cómo se podría revertir la realidad de esta región castigada por la desertificación, despoblamiento y la letanía”.
“Observamos siempre respetuosos, y esperamos, quizás con cierta ingenuidad, el surgimiento de planes o propuestas que nunca llegaron”, recordó. “Cuando la conectividad era escasa también era escasa la información de los vecinos, y mucho más escasa la participación de los pobladores en el debate. Pero se terminó”.
Barrera dijo que los sectores que se oponen a la minería, “opinan sin conocer y sin siquiera alarmarse de los tremendos daños ambientales que padecen sus ciudades. La realidad del Río Chubut no parece alarmarlos, ni los basurales a cielo abierto, ni sus desechos industriales”.
En este sentido, “la realidad nos pone frente a un nuevo dilema: o los diputados provinciales escuchan a las comunidades de la Meseta y sus reclamos por la igualdad de oportunidades, o ceden por miedo ante las amenazas de los violentos”.
“Amamos nuestro río porque nos criamos al lado de él, y vamos a ser los primeros en protegerlo. Estuve en Rawson y Playa Unión y vi gente recolectando firmas para prohibir la minería y una alarmante bandera negra y roja y me pregunté: ¿se preocuparán así por la contaminación en “El Elsa”? ¿realmente la gente está asustada? ¿o hay lobby anti minero que pretende despoblar totalmente la meseta por alguna razón?”, continuó.
“Cuando escucho ‘no es no’ en forma terminante y agresiva, me pregunto: ¿cuál es el mensaje? ¿No al debate? ¿No al desarrollo? ¿No al conocimiento? ¿No a la ciencia? ¿No a la geología? Si tenemos recursos que quizás ni conocemos, ¿por qué no estudiarlos? Y si son estratégicos, ¿por qué no conocerlos?”, añadió.
En este escenario, Barrera finalizó: “Queremos decidir porque estamos comprometidos con nuestra gente, con nuestra tierra, con nuestro río y con nuestro ambiente. Y, sobre todo, porque es nuestro deber pensar y plantear que podemos tener un futuro mejor”.#