Pesquero Santiago I: del buque, a un hotel
Parte de la tripulación del barco que había amarrado en el muelle de Madryn bajó y fue trasladada a un establecimiento donde harán el resto de la cuarentena.
Los marineros fueron trasladados hasta un hotel céntrico donde quedaron alojados y donde deberán cumplir los días que restan de la cuarentena.
La embarcación cargó agua y volvió a la rada con los 13 restantes miembros que decidieron permanecer a bordo. Durante los últimos días, los integrantes de la tripulación hicieron público su pedido para poder bajar a tierra y ser alojados en hoteles. Allí planteaban razones humanitarias y que el buque no estaba preparado para poder realizar la cuarentena por COVID-19. El motivo de esta maniobra es que los miembros de la tripulación cursen la cuarentena en buenas condiciones de salubridad, por lo cual se decidió descongestionar el buque. Dicha medida fue autorizada por el Municipio local y coordinada tanto con la empresa propietaria de la embarcación como con las áreas de salud correspondientes y la Prefectura Naval Argentina.
Las personas desembarcadas fueron trasladadas en un vehículo especialmente dispuesto para tal fin hasta el hotel Samay Huasi, el cuál fue debidamente autorizado por el Municipio y deberá cumplir con todas las medidas sanitarias exigidas. Así mismo permanecerá una custodia policial en el lugar para garantizar el cumplimiento del aislamiento social obligatorio. El 31 de agosto arribó a la rada local el buque pesquero Santiago I con 29 tripulantes a bordo; procedente de zona de pesca y con último puerto de recalada Mar del Plata.
Al momento de solicitar sitio de atraque, se constató que no cumplía con los requerimientos establecidos por el protocolo sanitario de la Administración Portuaria de Puerto Madryn. No contaba con los hisopados del total de la tripulación, ni habían transcurrido 14 días desde su zarpada. Por ello, se le negó la posibilidad de tomar amarras en cualquiera de los muelles locales y la empresa propietaria decide realizarles los testeos a las 29 personas que se encuentran a bordo, los cuales arrojaron resultados positivos en la totalidad de las personas.
Los tripulantes comenzaron a expresarse por redes sociales para ser bajados a tierras para quedar alojados en hoteles y las gestiones concluyeron el sábado cuando se realizó el operativo de traslado de marineros.
Los marineros fueron trasladados hasta un hotel céntrico donde quedaron alojados y donde deberán cumplir los días que restan de la cuarentena.
La embarcación cargó agua y volvió a la rada con los 13 restantes miembros que decidieron permanecer a bordo. Durante los últimos días, los integrantes de la tripulación hicieron público su pedido para poder bajar a tierra y ser alojados en hoteles. Allí planteaban razones humanitarias y que el buque no estaba preparado para poder realizar la cuarentena por COVID-19. El motivo de esta maniobra es que los miembros de la tripulación cursen la cuarentena en buenas condiciones de salubridad, por lo cual se decidió descongestionar el buque. Dicha medida fue autorizada por el Municipio local y coordinada tanto con la empresa propietaria de la embarcación como con las áreas de salud correspondientes y la Prefectura Naval Argentina.
Las personas desembarcadas fueron trasladadas en un vehículo especialmente dispuesto para tal fin hasta el hotel Samay Huasi, el cuál fue debidamente autorizado por el Municipio y deberá cumplir con todas las medidas sanitarias exigidas. Así mismo permanecerá una custodia policial en el lugar para garantizar el cumplimiento del aislamiento social obligatorio. El 31 de agosto arribó a la rada local el buque pesquero Santiago I con 29 tripulantes a bordo; procedente de zona de pesca y con último puerto de recalada Mar del Plata.
Al momento de solicitar sitio de atraque, se constató que no cumplía con los requerimientos establecidos por el protocolo sanitario de la Administración Portuaria de Puerto Madryn. No contaba con los hisopados del total de la tripulación, ni habían transcurrido 14 días desde su zarpada. Por ello, se le negó la posibilidad de tomar amarras en cualquiera de los muelles locales y la empresa propietaria decide realizarles los testeos a las 29 personas que se encuentran a bordo, los cuales arrojaron resultados positivos en la totalidad de las personas.
Los tripulantes comenzaron a expresarse por redes sociales para ser bajados a tierras para quedar alojados en hoteles y las gestiones concluyeron el sábado cuando se realizó el operativo de traslado de marineros.