A 65 años del golpe de Estado contra Perón: apuntes sobre la resistencia popular en el Valle

Un historiador recopiló información publicada en Jornada en 1955 tras el golpe de la mal llamada “Revolución Libertadora”. “Queremos despertar las memorias de las vecinas y vecinos de nuestra región, y recuperar esa historia de lucha y resistencia, que es parte de nuestra identidad”, dice el autor.

El trabajo de Pérez Álvarez retrata la resistencia popular en el Valle, reflejada en las páginas de Jornada, en el golpe del 55.
19 SEP 2020 - 19:35 | Actualizado

Por Gonzalo Pérez Álvarez, historiador, investigador del CONICET y de la UNPSJB

Especial para Jornada

Buscamos que se conozcan algunos sucesos claves de nuestra historia regional, recordando figuras que generaron hechos de resistencia, especialmente ante gobiernos autoritarios que buscaban acallar toda voz opositora.

La idea de esta nota es simplemente narrar algunos conflictos, sin analizarlos, sin cargarlos demasiado con la perspectiva del historiador. Queremos despertar las memorias de las vecinas y vecinos de nuestra región y recuperar esa historia de lucha y resistencia, que es parte de nuestra identidad.

El acercamiento para esta nota fue realizado a partir del relevamiento sistemático de las publicaciones del diario Jornada, que comenzó a ser editado en 1954. Además se recuperó en clave histórica un libro conmemorativo sobre el Colegio Nacional de Trelew (escrito por Francisca “Checha” Comes), donde se rememora el conflicto tras el golpe de Estado de 1955.

Jornada era el único diario que se publicaba en la región noreste de Chubut. Registro aquí solamente los hechos más significativos desde el 16 de septiembre de 1955 (comienzo del golpe de Estado que derrocó al gobierno peronista), hasta el final de dicho año. En el inicio del golpe se tituló: “Una nueva rebelión contra el gobierno” (Jornada, 17/9/55, p. 1). La Policía provincial ratificó el Estado de Sitio y el 19 de septiembre todavía el diario postulaba: “Aún no fue sofocada la rebelión”.

Recién el día 20 el titular indicó la caída del gobierno: tratándose del único diario de la región (y estando su sede a 20 kilómetros de la capital provincial), es evidente que el golpe de Estado no había logrado establecer su control sobre Chubut hasta esa fecha.

Tiempo después, esto se expresa para el caso de Esquel, donde hasta el 21 de septiembre dominaron las fuerzas peronistas (Jornada, 26/9/55, p. 1). Se destaca allí la resistencia que había tenido contra el golpe la Gendarmería y el Destacamento Militar de Esquel.

La resistencia, entonces, fue relevante hasta durante el golpe de Estado. Desde ese día 20, la región fue ocupada militarmente por la Base Aeronaval de Puerto Madryn y las publicaciones del diario comienzan a estar determinadas por esa presión militar. En tapa se publica un comunicado del jefe militar, el teniente coronel Adolfo Jesús López, que recomendaba a la población el cumplimiento de las directivas. También se posiciona el “comando revolucionario de la región”, expresando que las actividades deberían retomar la “normalidad”, “…como habitualmente hacen las reparticiones públicas y también las escuelas, como así el comercio y la industria” (Jornada, 20/9/55, p. 1)

Desde el 17 no había clases ni bancos. El 19 por la noche, “varios grupos de personas desfilaron por las calles de a pie y en automotores enarbolando banderas argentinas en adhesión al triunfo de las fuerzas revolucionarias y dando vivas a la libertad su paso por las calles”.

Según Jornada, no hubo incidentes: sólo “…fueron embadurnados los frentes de dos edificios, uno de ellos ocupados por una Unidad Básica femenina y una propiedad de un particular, ambos situados en la Avenida Fontana” (Jornada, 20/9/55, p. 5).

El 21 de septiembre hubo nuevos festejos de los golpistas en Trelew. Ese día se produjo un hecho muy recordado por la población local. Un importante grupo de militantes a favor del golpe se dirigieron a distintos núcleos de trabajadores para destruir los bustos de Perón y Eva Perón. Jornada tituló la crónica: “Sacaron de sus pedestales los Bustos del ex Presidente Perón y de su Desaparecida Esposa”.

Reproduzco en extenso, por la relevancia que tuvo el suceso:

“Al atardecer de ayer grupos de personas que se reunieron en forma espontánea, se agruparon y marcharon hasta los lugares donde se sabía que se hallaban emplazado bustos del ex presidente y de su extinta esposa, y una vez llegados a dichos lugares se pidió a los ocupantes de los mismos que retirarán las efigies. En la estación ferroviaria, los empleados se negaron en principio a acatar el pedido y el público no quería retirarse de las inmediaciones hasta ver cumplidos sus propósitos. En esa circunstancia, los propios empleados que se oponían a este hecho, hicieron retiro del busto y el público al comprobar esto se retiró para dirigirse hasta las oficinas de Vialidad Nacional donde al no hallar a su jefe para intimarle igual retiro, procedieron por su cuenta y bajaron de su pedestal un busto, el que fue cargado en una camioneta y posteriormente paseado por las calles de la ciudad atado por una soga a un automotor”.

“Los mismos grupos de personas procedieron a retirar las chapas con los nombres del ex presidente y de su extinta esposa que existían en la nomenclatura de dos calles de la ciudad. Posteriormente, a instancia de las autoridades los manifestantes se disolvieron sin que se produjeran disturbios”. (Jornada, 22/9/55, p. 3).

Algunos extrabajadores ferroviarios recordaron, en diversas entrevistas, que el retiro del busto de Eva Perón fue una manera de preservarlo, ante un choque que iba a culminar en una inevitable derrota por la diferencia de fuerzas entre los atacantes y quienes defendían la posición.

La imagen del busto de Perón arrastrado por las calles, fue parte de la memoria de muchos habitantes de Trelew. La resistencia de los ferroviarios también fue emblemática. Varios sufrieron cesantías y su perfil era de fuerte identificación con el peronismo.

La movilización de los golpistas se siguió expresando. El 22 de septiembre hubo actos en Madryn y Gaiman; el 23, se realizó una importante concentración en la Plaza Independencia de Trelew y una caravana hacia Gaiman y Rawson, donde se sumó población de Madryn y vivaron al comisionado nacional. Otras manifestaciones se generaron el 25 en Madryn y Esquel.

Mientras seguían los actos pro golpe y se realizaban intervenciones (como a la Estación de Radioconversaciones de Trelew), se llamaba a declarar al exdelegado peronista en Chubut y dirigente obrero de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), Eliseo Sieff. La Policía detuvo a Domingo Acri, sindicado como “nacionalista”, por supuestas injurias a miembros del gobierno.

El 13 de octubre, el gobierno de Chubut emitió un comunicado con un contenido semejante al que luego tendría el decreto 4161: se reprimiría cualquier intento de desorden, manifestación de viva voz, inscripciones, alteración del orden público o entorpecimiento del normal desarrollo de actividades y producción, por todos los medios necesarios.#

Las más leídas

El trabajo de Pérez Álvarez retrata la resistencia popular en el Valle, reflejada en las páginas de Jornada, en el golpe del 55.
19 SEP 2020 - 19:35

Por Gonzalo Pérez Álvarez, historiador, investigador del CONICET y de la UNPSJB

Especial para Jornada

Buscamos que se conozcan algunos sucesos claves de nuestra historia regional, recordando figuras que generaron hechos de resistencia, especialmente ante gobiernos autoritarios que buscaban acallar toda voz opositora.

La idea de esta nota es simplemente narrar algunos conflictos, sin analizarlos, sin cargarlos demasiado con la perspectiva del historiador. Queremos despertar las memorias de las vecinas y vecinos de nuestra región y recuperar esa historia de lucha y resistencia, que es parte de nuestra identidad.

El acercamiento para esta nota fue realizado a partir del relevamiento sistemático de las publicaciones del diario Jornada, que comenzó a ser editado en 1954. Además se recuperó en clave histórica un libro conmemorativo sobre el Colegio Nacional de Trelew (escrito por Francisca “Checha” Comes), donde se rememora el conflicto tras el golpe de Estado de 1955.

Jornada era el único diario que se publicaba en la región noreste de Chubut. Registro aquí solamente los hechos más significativos desde el 16 de septiembre de 1955 (comienzo del golpe de Estado que derrocó al gobierno peronista), hasta el final de dicho año. En el inicio del golpe se tituló: “Una nueva rebelión contra el gobierno” (Jornada, 17/9/55, p. 1). La Policía provincial ratificó el Estado de Sitio y el 19 de septiembre todavía el diario postulaba: “Aún no fue sofocada la rebelión”.

Recién el día 20 el titular indicó la caída del gobierno: tratándose del único diario de la región (y estando su sede a 20 kilómetros de la capital provincial), es evidente que el golpe de Estado no había logrado establecer su control sobre Chubut hasta esa fecha.

Tiempo después, esto se expresa para el caso de Esquel, donde hasta el 21 de septiembre dominaron las fuerzas peronistas (Jornada, 26/9/55, p. 1). Se destaca allí la resistencia que había tenido contra el golpe la Gendarmería y el Destacamento Militar de Esquel.

La resistencia, entonces, fue relevante hasta durante el golpe de Estado. Desde ese día 20, la región fue ocupada militarmente por la Base Aeronaval de Puerto Madryn y las publicaciones del diario comienzan a estar determinadas por esa presión militar. En tapa se publica un comunicado del jefe militar, el teniente coronel Adolfo Jesús López, que recomendaba a la población el cumplimiento de las directivas. También se posiciona el “comando revolucionario de la región”, expresando que las actividades deberían retomar la “normalidad”, “…como habitualmente hacen las reparticiones públicas y también las escuelas, como así el comercio y la industria” (Jornada, 20/9/55, p. 1)

Desde el 17 no había clases ni bancos. El 19 por la noche, “varios grupos de personas desfilaron por las calles de a pie y en automotores enarbolando banderas argentinas en adhesión al triunfo de las fuerzas revolucionarias y dando vivas a la libertad su paso por las calles”.

Según Jornada, no hubo incidentes: sólo “…fueron embadurnados los frentes de dos edificios, uno de ellos ocupados por una Unidad Básica femenina y una propiedad de un particular, ambos situados en la Avenida Fontana” (Jornada, 20/9/55, p. 5).

El 21 de septiembre hubo nuevos festejos de los golpistas en Trelew. Ese día se produjo un hecho muy recordado por la población local. Un importante grupo de militantes a favor del golpe se dirigieron a distintos núcleos de trabajadores para destruir los bustos de Perón y Eva Perón. Jornada tituló la crónica: “Sacaron de sus pedestales los Bustos del ex Presidente Perón y de su Desaparecida Esposa”.

Reproduzco en extenso, por la relevancia que tuvo el suceso:

“Al atardecer de ayer grupos de personas que se reunieron en forma espontánea, se agruparon y marcharon hasta los lugares donde se sabía que se hallaban emplazado bustos del ex presidente y de su extinta esposa, y una vez llegados a dichos lugares se pidió a los ocupantes de los mismos que retirarán las efigies. En la estación ferroviaria, los empleados se negaron en principio a acatar el pedido y el público no quería retirarse de las inmediaciones hasta ver cumplidos sus propósitos. En esa circunstancia, los propios empleados que se oponían a este hecho, hicieron retiro del busto y el público al comprobar esto se retiró para dirigirse hasta las oficinas de Vialidad Nacional donde al no hallar a su jefe para intimarle igual retiro, procedieron por su cuenta y bajaron de su pedestal un busto, el que fue cargado en una camioneta y posteriormente paseado por las calles de la ciudad atado por una soga a un automotor”.

“Los mismos grupos de personas procedieron a retirar las chapas con los nombres del ex presidente y de su extinta esposa que existían en la nomenclatura de dos calles de la ciudad. Posteriormente, a instancia de las autoridades los manifestantes se disolvieron sin que se produjeran disturbios”. (Jornada, 22/9/55, p. 3).

Algunos extrabajadores ferroviarios recordaron, en diversas entrevistas, que el retiro del busto de Eva Perón fue una manera de preservarlo, ante un choque que iba a culminar en una inevitable derrota por la diferencia de fuerzas entre los atacantes y quienes defendían la posición.

La imagen del busto de Perón arrastrado por las calles, fue parte de la memoria de muchos habitantes de Trelew. La resistencia de los ferroviarios también fue emblemática. Varios sufrieron cesantías y su perfil era de fuerte identificación con el peronismo.

La movilización de los golpistas se siguió expresando. El 22 de septiembre hubo actos en Madryn y Gaiman; el 23, se realizó una importante concentración en la Plaza Independencia de Trelew y una caravana hacia Gaiman y Rawson, donde se sumó población de Madryn y vivaron al comisionado nacional. Otras manifestaciones se generaron el 25 en Madryn y Esquel.

Mientras seguían los actos pro golpe y se realizaban intervenciones (como a la Estación de Radioconversaciones de Trelew), se llamaba a declarar al exdelegado peronista en Chubut y dirigente obrero de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), Eliseo Sieff. La Policía detuvo a Domingo Acri, sindicado como “nacionalista”, por supuestas injurias a miembros del gobierno.

El 13 de octubre, el gobierno de Chubut emitió un comunicado con un contenido semejante al que luego tendría el decreto 4161: se reprimiría cualquier intento de desorden, manifestación de viva voz, inscripciones, alteración del orden público o entorpecimiento del normal desarrollo de actividades y producción, por todos los medios necesarios.#


NOTICIAS RELACIONADAS